09. Un paquete especial

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Carlos se encontraba en el evento del lanzamiento del monoplaza. Él se encontraba con exactitud en una esquina ajeno a todos los demás.

Estaba concentrado escribiéndole a Charles hasta que él monegasco le escribió que hablarían más tarde, los ánimos le bajaron un poco, pero por lo menos esta vez no lo dejó en visto, era un alivio.

Pero se quedó inquieto cuando Charles le dijo que no había comido ni desayunado nada en lo que había pasado de día. ¿Cómo no había podido comer?

¡Si el desayuno es la comida más importante del día! O eso es lo que le suele decir su madre cuando no desayunaba. Ahora esa pequeña manía de siempre desayunar se le había pegado.

—Carlos, en unos momentos se dará inicio al evento. Por favor está atento para cuando te llamen —le dijo uno de los miembros de Renault.

Él español solo asintió entrando a la aplicación de Uber. Se dirigió a la sección de Uber Eats. Buscó durante un buen rato una comida que le convenciera e hizo su pedido.

Media hora más tarde, el evento había dado inicio. La música de fondo es una mezcla de ritmos electrónicos y melodías épicas que aumentan la tensión antes de la revelación.

Los asistentes se mueven con entusiasmo, discutiendo sobre los coches y las expectativas para la temporada.

Un imponente escenario está cubierto con una alfombra negra brillante, iluminada por una combinación de luces blancas y amarillas que proyectan sombras dramáticas sobre el fondo.

En el centro, dos monoplazas de Fórmula 1 de Renault están exhibidos en plataformas giratorias, con focos que resaltan sus diseños modernos y elegantes.

La pantalla LED detrás de ellos muestra una animación de alta resolución con los logotipos de Renault y escenas de carreras espectaculares.

Carlos luego de dar varias entrevistas se va a una zona no tan apartada, pero a la vez que le da un poco de privacidad para ver la notificación de la aplicación.

Estaba notificando que su pedido ya se encontraba en el lugar de entrega. Sale de la aplicación de pedidos y va directo al chat que comparte con Charles.

Carlos:

Ángel, ¿recibiste algún pedido?

Se sorprendió al notar la rápida respuesta del monegasco. Normalmente tardaba unos minutos o a veces hasta más para responderle, pero esta vez.

Ángel Charlie:

No. ¿Me has pedido algo?

Él moreno se extraño. Había pedido el sitio correcto, sin embargo al entrar a la app y detallar con más precisión se dió cuenta de su error.

Si había pedido al lugar correcto, de diferente país.

Nunca se salía de una.

Carlos:

Bueno, eso intente

*has enviado una captura de pantalla*

Charles le respondió riendose del error del español y Carlos solo quería golpearse a sí mismo por su idiotez.

Se llevó un bocadillo a la boca, necesitaba comer para pensar en un nuevo plan. Esto de pensar con el estómago vacío no se le daba.

También que sus planes no solían salir como los planeaba, pero esta vez sería la excepción. Volvió a entrar a la app para intentar nuevamente pedir la comida.

En esta vida || 𝒞𝒽𝒶𝓇𝓁𝑜𝓈Donde viven las historias. Descúbrelo ahora