TN
Mi respuesta desata otra ola de risas entre los chicos, y Baekhyun, sin dejar de sonreír, toma asiento a mi lado. Aunque siento su presencia cerca de mí, algo en el ambiente se ha relajado. El nerviosismo sigue ahí, pero también hay una extraña sensación de comodidad, como si este fuera el inicio de una interacción que está destinada a ser más compleja de lo que aparenta.
Baekhyun se sienta a mi lado, tan cerca que casi puedo sentir el calor de su cuerpo. Me mira con una intensidad que me hace sentir como si estuviera bajo una lupa. Su expresión, aunque relajada, es la de alguien que observa cada pequeño detalle, como si buscara entenderme con solo mirarme. Hay algo en él que me resulta desconcertante, casi peligroso, pero a la vez, increíblemente intrigante.
Intento resistir las ganas de reír, aunque sus ojos, llenos de una dulzura extraña, me hacen sentir como si estuviera frente a un enamorado. Sin embargo, sé que hay algo más profundo, algo más oscuro en su mirada. Detrás de esa apariencia inocente se oculta un demonio disfrazado de ángel virginal. Ese brillo travieso en sus ojos lo delata, pero no voy a dejar que me intimide.
La mesa queda en un silencio incómodo. Joshua y Kai nos observan con interés, como si estuvieran disfrutando del espectáculo. Me muerdo el labio, sonriendo, intentando mantener la compostura. La cercanía de Baekhyun es intimidante, pero a la vez... Estimulante.
—Así sabe tu boca —dice Baekhyun de repente, sus ojos se fijan en mi taza de café, aunque está claro que lo que realmente le interesa son mis labios.
Su comentario me toma por sorpresa, pero no pienso dejar que me vea titubear frente a los demás. Alzo una ceja, mostrando una seguridad que no estoy del todo segura de sentir y asiento con la cabeza.
—¿Y así sabe la tuya? —pregunto, mirando el café helado con crema que Baekhyun tiene frente a él.
Baekhyun me sostiene la mirada por un instante, sin decir nada. Luego, levanta la bebida con un gesto suave y toma un sorbo; haciéndome saber que no lo había probado. Hace todo esto sin romper el contacto visual que me hace sentir como si estuviéramos jugando a algo mucho más peligroso de lo que parece. Tras beber, asiente lentamente, sin dejar de sonreír.
Joshua y Kai rompen el silencio con una carcajada ligera y yo me uno a ellos, aliviada por el momento de distensión. Sin embargo, justo cuando me relajo, algo en el ambiente cambia.
Miro hacia la mesa de los chicos, mis esposos. Mi mirada se cruza con la de Jimin, quien está de pie junto a Jin, Suga y Namjoon. Se han alejado de la mesa en la que estaban antes y, aunque intentan no hacerlo demasiado evidente, sus miradas se deslizan hacia mí con frecuencia, como si estuvieran planeando algo. No puedo evitar sentir un escalofrío recorrer mi espalda. Lucen serios, tensos, molestos.
Mi corazón se acelera. Trato de convencerme de que no hay nada de qué preocuparme, pero la forma en que se miran entre ellos, es como si estuvieran esperando el momento adecuado para actuar. Intento concentrarme en la conversación en la mesa, pero mis pensamientos siguen volviendo a ellos.
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MIS SIETE SECRETOS (II PARTE)
RomanceTe casas con uno y también lo haces con sus seis hermanos. Su lema favorito: Lo tuyo es mío y lo mío es tuyo, pero de nadie más... Nadie más puede fijarse en lo que les pertenece. Prohibida su copia u adaptación. II PARTE DE LA HISTORIA