Había pasado casi dos semanas desde la boda en este momento me encontraba en la oficina realizando mi trabajo luego de salir de una mañana pesada en la universidad ya que tuve que realizar una defensa en una de mis materias, salí excelente, pero también agotada escuché la puerta de la oficina ser abierta, levanté mi vista y sonreí al ver a Angelo entrar por ella.
- Hola, amor. - dije para levantarme y acercarme a él, se miraba tan guapo en ese traje negro siempre le gustaba usar traje para verse presentable, me dió una mirada de pies a cabeza.
- Porque tan guapa? - dijo tomándome de la cintura con sus manos y dándome un beso en los labios, andava con un crop top negro de tiras de delgada, una falda talle alto pegada con el largo hasta las rodillas en color crema, mis stilettos negros y el blaiser crema pero en este momento no lo llevaba puesto ya que con angelo no me importaba mucho mostrar las marcas de mi piel, mi maquillaje bien elaborado en eso siempre he sido vanidosa y mi cabellos suelto.
- La universidad, tuve una exposición y debía estar muy presentable. Porque tardaste en llegar? - pregunté curiosa.
- Pasé al aeropuerto a recoger a Aranxa. - dijo, me separé de él alejándome un poco.
- Que hace ella aquí? - pregunté cautelosa, no me agradaba la idea saber que ella estuviera cerca de Angelo.
- Negocios, tengo negocios con su padre.
- Y porque vino ella y no su padre? - dije algo molesta o celosa mejor dicho.
- Ella es la que se encarga de esto desde hace unos años, son negocios no te hagas ideas que no son, además quedé en que cenaremos con ella así que cambia esa cara. - dijo llegando hasta a mí abrazándome por detrás dándome un beso en la mejilla, asentí - Pongámonos a trabajar para terminar a tiempo.Y así fue terminamos todos los pendientes que habían, a las 7 salimos del club con rumbo al hotel donde se encontraba hospedada Aranxa, una vez llegamos Angelo bajo del auto y yo lo espere dentro hasta que la ví, no la conocía en persona era realmente hermosa, cabello rubio, de piel blanca, delgada parecía modeló tenía unas caderas era toda una muñeca Barbie preciosa, de buen tamaño y entiendo porque Angelo está enamorado de ella, lo que hizo que mis celos aumentaran y mi autoestima cayera hasta el piso, cómo podría competir contra ella? No podría, aunque Angelo estaba casado conmigo no sentía que era completamente mío porque su corazón estaba en otra parte, le pertenecía a ella no a mí. Una vez que Angelo la subió a uno de los coches volvió a mi lado y emprendimos la marcha al restaurante donde cenariamos, llegamos y bajamos del coche y entonces la tuve frente a frente.
- Amaia, ella es Aranxa Fisterra, Aranxa ella es mi esposa. - nos presentó y estiré mi mano la cual ella estrecho.
- Mucho gustó. - contesté algo fría.
- Igualmente estaba ansiosa por conocer a la mujer que Angelo escogió como esposa eres muy hermosa. - dijo con una sonrisa que no pude corresponder porque la verdad no me agradaba que estuviera aquí y menos cerca de él.
- Gracias. - me límite a contestar.
- Bueno pasemos ya la reservación está lista así que no esperemos más. - dijo Angelo rompiendo el incómodo momento bueno por lo menos para mí lo era, pasamos adentró y nos llevaron hasta nuestra mesa, tomamos asiento y nos dispusimos a ordenar.
- En cuanto supe que te casaste viaje directamente acá deseaba conocer a la mujer por la que me cambiaste, además claro de los negocios que estamos por llevar a cabo. - dijo sonriendo la plática era con Angelo pero su mirada estaba clavada en mí así que se la sostuve no iba a dejar que me intimidara.
- Aranxa, que haces? - preguntó Angelo.
- Nada, simplemente quiero saber si está al nivel o sí puedo quitarla del medio. - dijo divertida lo que me hizo fruncir el ceño.
- Y que es según tú estar al nivel? - pregunté un poco molesta.
- Angelo y yo somos similares ambos nos complementamos, vivimos la misma vida sí me entiendes, verdad? - alce una ceja y ella continúo - Conmigo pudo haber obtenido un poder inimaginable, mayores contactos, mucho mas dinero y bueno a mí que no soy poca cosa como podrás ver. - terminó de decir y puso su mano sobre la de Angelo acariciándola lo que me hizo explotar.
- Quita tu mano de la de mi marido - dije apartándosela y tomándola con algo de fuerza - no quiero que lo vuelvas a tocar, hasta deseó poder arrancarte los ojos en este momento para que no lo mires, es mío entiendes y no podrás cambiar ese hecho aunque lo intentes, no podré darle poder, ni dinero pero conmigo tiene seguridad, paz y amor que es algo mucho más importante. - la miré amenazante estaba furiosa.
- Aranxa no más, Amor cálmate puede hacerle daño al bebé. - dijo Angelo tomándome de la otra mano, lo miré y dí un gran suspiro.
- No vuelvas a insinuarte y menos delante de mí. - dije un poco más calmada.
- O sino qué? - pinchó.
- Aún no me conoces y no sabes de lo que sería capaz así que no me retes. - le advertí porque la verdad ni yo misma sé de lo que sería capaz.
- Me agrada tu esposa es una fiera no se dejá amedrentar de nadie o serán que los celos te controlan? Pero bueno no te preocupes solo quería comprobar cómo era la mujer que hizo que Angelo cayera y entiendo porque se doblegó, eres de las mías creó que nos llevaremos muy bien. - dijo de repente y yo no supe que contestar.
- Eres terrible, no sé cómo te soporto. - dijo Angelo.
- Porque así me amas, no te preocupes Angelo y yo nos conocemos desde hace años además hacemos negocios juntos, no intentaré nada con él. - contestó ella sonriente y él sonrió pero yo no hice más que observarlos y sí que hubieran sido la pareja perfecta, ambos eran bellos ademas de que trabajan en lo mismo son socios y se llevan bien, entonces caí que actúe mal haciendo esa escena, que me pasó? Los celos me cegaron tanto que no pude controlarme pero la realidad era que Angelo a la mujer que amaba era a esta hermosa rubia que estaba a nuestro lado y la única que sobraba aquí era yo.Después de todo pudimos cenar bueno yo hice la fuerza de hacerlo ya que las ganas se me habían ido al igual que el valor que tuve hace rato, la conversación fue tranquila aunque no participe mucho porque hablaban de negocios y personas que no conocía así que me límite a escuchar, una vez terminamos salimos del restaurante.
- Amaia, Tyler te llevará a la casa, Aranxa y yo iremos al club. - dijo acercándose a mi para darme un pequeño besó en la frente.
- Puedo acompañarlos. - dije rápidamente no quería que estuviera a solas con ella aunque me haya dicho que no intentará nada con él, me sentía insegura.
- No, debes descansar estás embarazada así que debes cuidarte yo llegaré más tarde. - dijo para ayudarme a subir al coche, cerró la puerta y Tyler emprendió el camino a la casa y a mí no me quedó más que resignarme.No podía dormir me acosté en la cama pero el sueño no hacía acto de presencia y todo se debe a que Angelo aún no llegaba eran las 3 de la madrugada y todavía lo esperaba, mi cerebro no ayudaba mucho ya que imaginaba distinto tipos de escenarios y ninguno me daba tranquilidad de repente escuché unos pasos me acomodé en mi lugar y cerré mis ojos, la puerta fue abierta y cerrada, los pasos siguieron hasta que sentí otra puerta ser abierta abrí un poco mis ojos y pude notar la luz del baño encendida y poco después el sonido del agua caer ya había regresado y era todo lo que me importaba en este momento, después de un rato sentí el colchón hundirse y como sus manos rodearon mi cintura así que dí la media vuelta para acurrucarme en su pecho, él me abrazó y me sentí relajada entre sus brazos, el tenerlo a mi lado me daba la paz que necesitaba y solo hasta entonces pude conciliar el sueño quedando profundamente dormida....
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Mascara Rota (+18)
عاطفيةÁngelo Ivanov un hombre frio, calculador, desconfiado, tremendamente guapo, poderoso y despiadado, jefe de una de las organizaciones mas importantes en el trafico de armas, confianza y amor solo lo tiene por su familia. Amaia Montez una chica que a...