—¿No te gusta la cerveza? — Calum preguntó riendo.
—No— negué balanceando mi pierna—, pero es lo único que hay,
puedo soportarlo por esta noche.—Muy bien— sonrió.
Me quedé en silencio y bebí un poco de cerveza. Él no dijo nada, se quedó observando el cielo y suspiró.
No sé cómo había llegado a las afueras de la ciudad con Calum, se
supone que sólo iba a su casa para saludarlo, sin embargo, la invitación salió de sus labios y yo accedí. Nos encontrábamos
sentados en la parte trasera de su camioneta, habíamos pasado por
unas cervezas y dos bolsas de frituras.Sujetaba un cigarrillo con su mano derecha y con la izquierda la pequeña botella de cerveza. Mordí mis labios y recordé el día en
que probé por primera vez un cigarro, había sido con Luke en el
callejón, sin embargo, la experiencia no me gustó, en lo absoluto. Al principio me sentí tan avergonzada, pero después todo eso cambió, quizá porque me encontraba acompañada de él.
Esbocé una sonrisa ante tal recuerdo. Me hacía sentir bien el hecho de que no me doliera, pero que de alguna forma disfrutara tenerlo en la mente. Eso es lo que siempre había querido, que su recuerdo estuviera presente sin que doliera o me hiciera llorar a cada momento.—Él estaría orgulloso de ti — la voz de Calum murmuró ocasionando que mi vista se alzara hasta la suya, sus ojos oscuros me miraban con una sonrisa dibujada en sus labios—. Porque estás
continuando, pero sobretodo con una sonrisa en los labios.—¿Tu crees?— cuestioné.
—No lo creo— negó—. Lo sé.
—A mí también me hubiese gustado que él pudiera continuar.
¿Sabes? Era de las personas que casi no demostraba las cosas, pero cuando lo hacía, era de alguna manera tan magnifica.—Así era Luke— rió—. Sea el lugar en donde esté, puedes tener la
seguridad que es feliz si tú también lo eres. Digo, Luke habría
matado monstruos por ti y verte sonreír.Me mantuve en silencio y desvié mis vista hacia el cielo. No habían
muchas estrellas, solo unas cuantas y la luna se asomaba entre las nubes que la cubrían, relamí mis labios antes de echar un suspiro y volví a mirar al moreno.—¿Crees que nos escuche?— le pregunté, con la voz un poco débil.
—Quiero creer que sí— susurró mirándome—, quiero creer.
—Calum— lo llamé—, ¿tú supiste sobre algún intento de suicidio por
parte de Luke?Él me miró con el semblante serio. No quería lanzar la pregunta así
como si nada, pero quería escuchar la historia por parte de alguien que fuera más cercano al pasado de Luke, el chico era su mejor amigo y tenía la certeza de que él sí sabía sobre ello, después de todo, también Bella era su mejor amiga.El rostro de Calum cambió a un ceño ligeramente fruncido, se puso
de pie y le dio una calada a su cigarro antes de tirarlo al suelo y
aplastarlo con su zapato, bebió lo último de su cerveza y me miró.—Sí— afirmó—, y no es un tema del cual me guste hablar, ni siquiera me corresponde, si él no te lo dijo, yo no debería, no
importa si está o no.—Sólo quiero saber— insistí—, me interesa, no entiendo porqué no
me lo dijo, teníamos confianza, se supo...—Porque para Luke fue una etapa dolorosa— me interrumpió—.¿Crees que para él era fácil retomar esos temas? Katniss, no te
quiso ocultar nada, solamente evitó que...

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Promesas Rotas
Teen FictionUna chiquilla escuálida llegando casi siempre tarde a sus clases con una mancha de pasta dental en su blusa, entra a la vida del chico como un rayo de luz en la habitación más oscura. La penumbrosa estela ilumina el cielo para ambos enseñándole un...