XXVII

155 16 14
                                    

    La semana seis en contra de los seahawks solo terminaba de confirmar el infierno que estaba siendo para los equipos enfrentarse a unos Bengalíes que apuntaban al Superbowl.
   Un récord de 6-0 nos posicionaba como el equipo mejor consolidado de toda la liga.
   Andrei por fin había logrado marcar su primer touchdown contra Seattle nada más y nada menos que el día de su cumpleaños, lo festejamos como si hubiéramos ganado la conferencia.

   Hablando de cumpleaños, tocaba retroceder unos cuantos días en la semana, para ser exactos el viernes trece... Mi cumpleaños.

   Aunque me había esforzado por darle vueltas al asunto, ninguno de mis amigos y Joe parecía querer quitar el dedo del renglón, llenaron mi departamento de globos y regalos.
   Mike y Mónica junto a los jugadores decoraron mi lugar en el vestidor y también me dejaron regalos.
   A pesar de que estaba teniendo las mejores semanas de mi vida, seguía sintiendo un hueco en el pecho, extrañaba mucho a mi mamá, solo quería hablar con ella aunque fuera un par de minutos.
   Recibí llamadas desde San Diego, mi papá decía que estaba deseando verme pero por alguna razón lo notaba apagado, algo me decía que no había logrado recuperar el dinero que le había arrebatado esa señora.
  
   Mike le había encontrado un trabajo a Aaron en el equipo que no lo exponía de ninguna manera y así se mantenía entretenido.

   Ahora era un año más vieja, con más responsabilidades y obligaciones.

—Niños–Mónica entró al vestidor como casi nunca–no se les olvide que los esperamos para celebrar el cumpleaños de Charlie–me escondí detrás de Darren–esta noche.
—Y el mío.-levantó la mano desde su lugar.
—Sí, Iosivas, sí también.
   Sin decir más salió.
—Parece que los está invitando a una fiesta de cinco años, que horror.
—No seas tan dura, se esforzó mucho en organizarlo.
—Es solo una cena en un restaurante, Zac.-volví a renegar.
—¿Estas lista?
   Se apareció ya cambiado.
—Sí, me voy, los veo más tarde.

   Salí del estadio de la mano de Joe como siempre.

—Semana libre–soltó un suspiro–¿Que vamos a hacer?
—¿Vamos?–asintió–yo descansar, no sé tú.
—Había pensado en la posibilidad de escaparnos unos días, ¿Qué dices? Se lo comenté a Aaron y Yoshi, irnos de fin de semana, Ja'Marr también se apuntó.
—¿Ya haces planes con ellos?–me miró con seriedad–es broma–me reí–no sé, quiero descansar, no quiero aviones ni planes. Solo quiero dormir, han sido semanas agotadoras.
—En eso estoy de acuerdo, igual piénsalo y si te convences, solo es cuestión de que Gabriel haga un par de llamadas.
—Lo pensaré, lo pensaré.

   Me dejó en mi departamento, estudié la posibilidad de decir que estaba enferma para no asistir a mi propia cena de cumpleaños pero era una opción poco viable.
   Aaron llegó un rato después, últimamente su único tema de conversación era lo increíble que la pasaba con Rosalie haciendo que verlo tan contento me diera la espina de que se le había olvidado porque estaba en Cincinnati.
   No tenía ganas de ser una señorita en apuros con vestido porque hacía frío así que opté por un pantalón decente.

—¿Iremos a correr?
—No sé, no creo.
—Tengo ganas...
—Sí, tú siempre, ya lo sé.

   Él se fue con Andrei y yo con Joe, en el restaurante ya estaban casi todos los jugadores excepto los que tenían cosas mejores que hacer que asistir a un cumpleaños como en el kinder.

—Charlie, la cara.
—Mónica, te dije que era innecesario tanto.
—Tenemos que festejar como te mereces.
—Sí, sí, como sea.

   Cada que podía desviaba la atención de mi y se la pasaba a Andrei.

   Me sentaron en el medio de la gran mesa con Joe a un lado, Mónica al otro y al lado de Mónica, Mike.

   A la mesa llegaron dos pasteles, uno para Yoshi y otro para mi, apagué primero las velitas no sin antes sentir que todo el mundo se me venía encima solo de recordar que era mi primer cumpleaños sin mamá.
   Joe apretó mi mano al ver que perdía la batalla contra las lágrimas.
   Esperé a que mi amigo también apagara las suyas y me disculpé para ir al baño, me sentía totalmente abrumada con esos sentimientos tan fuertes.
   Me puse agua fría en la cara para intentar volver a conectar con tierra firme o iba a terminar el plan de Mónica.

Better.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora