Cambiando el Destino

Capítulo 63 (Final de temporada)

Nuevamente nos localizaremos al lugar en donde se desataba el enfrentamiento entre Bael y Hefesto, siendo un poco exactos nos hallaremos a una gran altura. En aquella parte del cielo se puede observar al demonio quien se estaba desplazando a una gran velocidad para así poder evadir cada una de las espadas que se acercaban a él. En el rostro de este se le podía ver una expresión de seriedad, cuando Bael esquivo otra de las armas. De pronto el demonio realizo un último movimiento hacia atrás para así evadir otras de las espadas, en ese instante este se quedó flotando. Lo que Bael hizo a continuación fue extender sus brazos hacia los lados, repentinamente el cuerpo de este expulso una energía de color rojizo por los alrededores. En ese momento todas las espadas que se acercaban hacia él fueron desintegradas.

Bael: Por fin, me deshice de esas espadas... - Exhalo con cansancio -: Mierda, lo admito. Esas espadas me hicieron sudar, nunca me espere que ese bastardo tuviera una habilidad tan interesante y fuerte como esa... - Escucho un fuerte grito -: ¿He? ¿Y, ese grito? ¿De dónde...? - Al bajar su mirada, sus ojos se engrandecieron del asombro -: Pero. ¿Qué carajos...?

Lo que el demonio estaba observando era como aquella esfera gigantesca que había lanzado hacia su oponente empezó a moverse, pero en vez de moverse hacia el suelo. Aquella esfera se estaba moviendo con dirección hacia el cielo, algo que llamo mucho la atención de Bael era el intenso brillo de color azulado que provenía de la parte baja de la esfera.

Bael: ¿Qué está pasando? ¿Mi ataque está siendo repelido? - Observo que la esfera se estaba acercando hacia él -: ¡No! ¡No, no, no, no! - Volvió sus manos en forma de puño -: ¡Ese bastardo está resistiendo ese ataque que le lance! - Extendió sus brazos hacia los lados -: ¡No! ¡Ningún ser debería de poder resistir uno de mis ataques más poderosos! Yo, yo no voy a permitir que ese desgraciado logre su objetivo. ¡Voy a acabar esto usando todo mi poder! ¡Ya no voy a ser tan blando...! - En frente de las palmas de sus manos aparecieron dos esferas de energía -: ¡Muere!

En ese instante el demonio movió sus brazos y los llevo hacia adelante, aquellas dos esferas que se hallaban en frente de las palmas de sus manos se juntaron y crearon una esfera de mayor tamaño. De repente Bael lanzo su ataque hacia la esfera que se estaba acercando, cuando estas dos colisionaron. Lo primero que ocurrió es que de las esferas empezaron a salir una cantidad de rayos, muchos de ellos se dirigieron al cielo y otros descendieron. Varios de estos rayos cuando tocaron el suelo causaron una gran destrucción.

Lo segundo que sucedió fue que ambas esferas de energía iniciaron a disminuir sus tamaños, al momento en que estas dos alcanzaron cierto tamaño. En ese instante lo que ocurrió fue una poderosa explosión, una poderosa presión de aire fue expulsada por los alrededores mientras era seguida por una cortina de humo y unas llamaradas las cuales estaban quemando todo a su paso.

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A lo lejos se puede ver a Hades y a Nix, ambos veían con seriedad la presión de aire que se acercó a ellos y ni siquiera los movió de donde estaban. Al momento en que estos dos observaron la cortina de humo y la llamarada que se acercaban, ambos de inmediato elevaron uno de sus brazos. De repente delante de las palmas de las manos de estos dos apareció un muro de energía, dicho muro de energía logro resistir las intensas llamaradas que estaba carbonizando todo el suelo y el entorno.

Hades: Hefesto...

Nix: Por lo visto, esa explosión... - Cerró sus ojos -: Esa explosión tenía una gran cantidad de energía acumulada, y por como lo veo... - Abrió lentamente sus ojos -: Si esta batalla continua, es probable que cause una gran devastación en el inframundo... - Una sonrisa se le formo en su rostro -: A pasado tantos años desde que veo algo tan interesante como esto... - Exhala con cansancio -: Me pregunto. ¿Mis hijas ahora mismo están observando este combate? ¿Ellas sabrán como se termina todo esto? Pero, mi verdadera pregunta es. ¿Qué clase de destino le espera a ese dios? - Llevo su mirada hacia cierta dirección -: oh, vaya. Cloto, Láquesis y Átropos... - Ve que en cierta parte del cielo había un ojo de gran tamaño flotando -: Así que, yo tenía razón. Ustedes tres están viendo este combate. - Dirigió su vista hacia el sitio donde se hallaba Hefesto -: Muchos dioses primordiales seguramente te van a tener en la mira, pequeño dios. Pero, quien te vio primero fui yo así que. Muéstrame, muéstranos a todos de lo que eres capaz...