XXXVI

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- ¿Encontraste la jícama? - preguntó Chani con algunas bolsas en la mano.

- Sí. Solo falta comprar la col para el Kimchi y tendremos todo para la cena - respondí - Vamos - comencé a caminar, era agradable que se hubiera ofrecido a acompañarme a comprar los ingredientes, ya que Eunwoo estaba en el trabajo.

- Aún no me has contado, ¿Cómo fue que aceptaste volver a salir con Eunwoo?

- Aún no estamos saliendo. Estamos poniendo a prueba nuestra relación - dije.

- ¿Y qué diferencia tiene eso?

- En realidad, aún hay muchas cosas que debo arreglar con Eunwoo y una de ellas es por contarle la verdad de porque terminé con él hace 4 años.

- Ahhh... Cierto, Eunwoo me comentó lo idiota que fue cuando intentaste decirle la verdad.

- ¿En serio?

- Sí. Sabes cómo se pone cuando está ebrio y molesto. No hay nadie que lo pueda controlar tan fácilmente - ambos reímos.

- Eunwoo me dijo que cuando me sintiera lista se lo dijera.

- ¿Y cuándo será el momento? - decidí no responder - Algo me dice que eso no es lo único que te preocupa.

- No es tan sencillo, Chani - dije mirando al suelo - Hay cosas que prefiero no decirle aún.

- ¿Por qué?

- Porque... Temo que las cosas empeoren.

- ¿Y por qué habrían de empeorar?

- ¡Mira! - señalé un puesto - Está col se ve en buen estado. Creo que la llevaré - comencé a buscar en mi monedero.

- Déjame pagar esto a mi. Ya compraste bastante y suficiente harás con darnos de cenar está noche - pagó la col.

- Gracias, Chani - dije.

- Pero, Amy - lo miré - En verdad me alegra ver qué tú y Eunwoo lo estén intentando de nuevo - mostré una sonrisa - Él siempre sonríe cuando está contigo. Y sea cuál haya sido la razón, espero que ambos puedan enfrentarlo - me mostró una sonrisa.

- Gracias - después le dí un leve golpe - Ya te extrañaba.

- Yo igual - me rodeo con su brazo y comenzamos a caminar al departamento.

...

Había pasado la tarde preparando las cosas con Chani, y ya una vez teniendo listo todo, junto con el postre, cada uno de nosotros nos fuimos a arreglar en espera de que los demás llegaran de trabajar.

Me había maquillado y puesto aquel collar que Eunwoo me había regalado, cuando la puerta sonó y me dirigí a abrir. Aún era temprano, pero supuse que eran las chicas.

- ¡Hola! - las abracé.

- Trajimos un poco de vino - dijo Ryujin mostrando una botella.

- Gracias, chicas - dije.

- El Bulgogi no se disfruta sin un buen vino - ambas entraron - Esperamos no haber llegado muy temprano.

- Para nada. Es bueno tenerlas aquí.

- Vaya, mírate - dijo Ryujin - Luces más radiante, seguramente volverás a conquistar a Eunwoo vestida así - las tres reímos - Oh - miro mi cuello - Yeji, ¿Ya viste eso? - señaló el collar que tenía.

Bastó Con Un Sorbo Para Recordarte (Cha Eunwoo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora