A través del espejo (ItaShisuNaru)

Capítulo 6

Kushina lo veía con cuidado, ¿desde cuándo esa actitud tímida y nerviosa en su hijo? afiló su mirada- no te creo, soy tu madre, te conozco mejor que nadie ttebane- Naruto abrió sus azules enormes, rascó su nuca pensando con velocidad -es verdad, en verdad me siento solo en casa- Kushina ablandó su mirada viendo tristeza en su mirada, eso era extraño, jaló de él con cariño acariciando su espalda. Naruto abrió sus azules con sorpresa, su mirada se hizo aguada, se dejó abrazar y mimar un poco -ay cariño, sé que tu marido salió a misión, vamos a casa, te haré algo rico de comer-

Naruto asintió con duda, no sabía si era buena idea, mientras caminaban observó el camino a casa de los padres de Menma, levantó una ceja con duda, el lugar era donde el complejo Hyuga tenía sus terrenos, apretó el ceño tratando de entender ¿se los habían quitado? observó la casa de dos pisos, era un lugar sencillo, cálido, al entrar podía sentirse cómodo, era extraño, observó con disimulo las fotos, eran copias de algunas en el álbum de la casa de Menma, entraron a la cocina donde la pelirroja dejó algunas compras.

-Desde tu boda no hemos tenido mucho tiempo para nosotros, sé que sigues molesto por la decisión de tu padre en casarte- Naruto mordió su mejilla -no tenían otro opción supongo ttebayo -Kushina lo vio con duda, tenía desde pequeño que no escuchaba su muletilla, estaba extraño su hijo- vaya, tenía años sin escuchar tu muletilla -Naruto abrió sus azules asustado, sonrió forzado -no sé, creo, simplemente salió -Kushina sonrió con diversión -deberías decirla más, es una muletilla linda que sólo nos pertenece a nosotros, a tu padre le encanta-

Naruto la vio con cuidado, asintió suavemente -¿quieres que te ayude?- Kushina apretó el ceño sin entender, su hijo nunca se ofrecía a ayudarla en casa, en verdad debía extrañarlos -¿ya aprendiste a cocinar? recuerdo que detestabas la cocina- Naruto mordió su mejilla, era su oportunidad, rascó su nuca con vergüenza -bueno, tal vez quisiera aprender un poco- la Namikaze sonrió con emoción -eso es genial Menma-chan, vamos, ponte un mandil y párate a mi lado, te enseñaré un poco, a tu marido se le caerán los calzones con mis recetas ttebayo -

El rubio sonrió con diversión y algo de emoción, observó el lugar buscando el mandil- oh por Kami, tiene semanas que te fuiste y ya olvidaste dónde están las cosas, eres todo un caso hijo ttebane- la pelirroja sacó de un cajón el mandil, se lo dio, comenzó a explicar cómo preparar la comida, le explicó cómo cortar y freír los vegetales. Naruto cortaba los vegetales suavemente sin querer cometer error y mostrar que era torpe.

Pasó al menos una hora- nos quedó increíble Menma-chan ttebane- Naruto sonrió algo incómodo por el nombre -ahora toma asiento en tu lugar, tu padre no debe tardar en llegar -el rubio abrió sus ojos con terror, sacó el mandil- yo creo debo regresar a casa, aún no termino mis deberes, yo…- Kushina afiló su mirada -harás las paces con tu padre, no pueden seguir peleados Menma, él te ama, sufre cuando no le hablas, cuando lo ignoras, por Kami, si ya estás aquí, ya hablaste conmigo ¿por qué no con tu papá?- Naruto mordió sus labios sin saber qué hacer, la puerta se abrió -ya estoy en casa kushi, huele delicioso -la pelirroja sonrió con emoción -Minaaa, mira quién vino a visitarnos ttebane-

Naruto vio a la señora con pesar, se sentía mal por mentir, por fingir alguien que no era, parecían buenas personas, abrió sus azules enormes al ver al Namikaze verlo con seriedad, su mirada era seria, se veía molesto, mordió su mejilla con miedo, rascó su nuca preocupado, el sujeto era un maldito genio si era como su padre -Menma, me da gusto que estés en casa- Naruto lo vio con cuidado, recordó a su padre en la guerra, sus azules se aguaron, bajó su mirada sin querer derramar sus sentimientos -mamá dijo que podía quedarme a comer-

Minato cambió su mirada al verlo con otra actitud, sonrió con cariño, se acercó a su hijo colocándose frente a él, el kage lo abrazó con fuerza besando su frente con amor. Naruto levantó su rostro con sus azules aguados creyendo por un momento que era su padre -gracias por venir cariño, no sabes lo feliz que me haces ¿Sigues odiándome?- el menor hizo un enorme puchero sin poder contenerse, se acostó en el pecho de su padre haciéndose bolitas en sus brazos- no podría odiarte ttebayo -Minato sonrió con cariño, dejó de lado por el momento la muletilla y algunos cambios físicos en su hijo atribuyendo al crecimiento, no había detallado en él- hace unos días gritabas que me odiabas, gracias por venir cariño- besó su cabeza con amor. Naruto sonrió quedito hasta que reaccionó, se separó un poco con vergüenza rascando su nuca- gracias-

Minato lo vio con cuidado, vio a su esposa con duda ¿desde cuándo agradecía? suspiró hondo, tomaron asiento -¿cómo te trata Shisui? -Naruto por fin sabía el nombre del marido de Menma, sonrió ligero recordando quién era ese sujeto, había escuchado sobre ese shinobi, él de su dimensión era una persona honorable por lo que sabía sobre la historia de Itachi, era su amigo sino más recordaba, murió antes de la masacre Uchiha si estaba en lo correcto- bien, es amable- la pareja sonrió más tranquila, tenían dudas sobre la boda y la situación de su hijo, estaban preocupados- ¿tu suegro?- Kushina negó con fastidio -Fugaku es un cretino Mina, ese bastardo algún día me pagará las que me debe, aún recuerdo sus comentarios imbéciles en la boda ttebane -el kage negó suspirando hondo- lo sé Kushi, pero no somos iguales a él, deja que él sea el loco- ambos sonrieron cómplices.

Naruto mordió su mejilla con duda, Fugaku Uchiha, el padre de Sasuke si recordaba bien, ¿pero que no Shisui era amigo de Itachi? no entendía nada, suspiró hondo recordando lo que Menma le dijo- bueno, está insistente en que tenga hijos- ambos mayores apretaron el ceño- no hay prisa cielo, hicimos la revisión médica antes de la boda, tu suegro lo sabe, todo está en orden, tal vez sólo sea un poco de ansiedad, todo a su tiempo-

Naruto sonrió ligero al sentir su apoyo- ¿cómo vas con tus estudios? en algunas semanas vendrá sensei, él te hará el examen de los ocho niveles que dijiste que mantenías, espero sea verdad -el rubio sonrió nervioso, asintió- no te preocupes, todo está en orden ttebayo- lo vieron con cuidado, nuevamente la muletilla, algo estaba extraño con su hijo, continuaron hablando platicando de la situación de Konoha y de la rivalidad de Kushina con Fugaku y Hiashi. Naruto sonreía escuchando a ambos, como reían, como convivían, como su madre los tenía aterrorizados, mordió su mejilla con cargo de conciencia por sentirse feliz en ese otro mundo, en ese momento ¿qué sucedería en su mundo? ¿ya habrían descubierto a Menma? negó con fastidio en su interior.