Sinopsis:
Tras un evento traumático para su familia, Iris es obligada a vivir en cautiverio, desde los 5 años, con estrictas reglas para protegerla.
Su vida da un giro inesperado, cuando viaja a otro mundo, uno lleno de magia y seres místicos, muy...
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—Es el territorio humano, ¿porque no vamos a la clínica? —sugiere Angel.
Ella solo asiente y vuelan hacia allá. En un punto, ambos aterrizan y se encuentran con Zircón, quién iba saliendo de la clínica del doctor. Él los mira sorprendido, e incrédulo se acerca a ellos inmediatamente.
—Larimar dime que no es un truco tuyo... ¡Al fin volvieron! Eso explica la sensación que tuve hace rato.
Iris solo ríe un poco ante el inusual comentario sobre su hermano.
—Tampoco esperaba verte aquí —confiesa Ángel, con una sonrisa y ofreciendo su mano.
—Veo que aprendiste el saludo de los humanos del otro mundo —dice mientras responde el saludo.
—Con mi hermano Rufo tengo un saludo similar, ¿te muestro?
Zircón abre la boca, extrañado por el tono tan amable que usa el joven, pero sabe que es honesto al mirarlo a los ojos. Ya no hay nada de ese desprecio que sentía antes. No lo culpaba, pues lo merecían. Es un hecho que fueron demasiado lejos. Pero la mirada que ahora enfrenta, es de alguien que te ve como familia; esto lo conmueve y solo asiente.
El muchacho entrelaza sus brazos y le da una palmada en la espalda. Iris no puede contener la emoción y provoca el abrazo entre los tres, aunque el mayor de ellos, por su altura, pareciera más bien estar abrazando a sus hijos. Al poco tiempo, se separan.
—¿Estás trabajando para el doc?
—Algo así, en realidad, ahora dirijo la clínica, el doctor Aragonito me la encomendó y se trasladó al territorio angelus. Aún viene en ocasiones, pues ahora es más fácil ir y venir entre territorios.
—¿De verdad? —La pregunta de Ángel sale acompañada de una evidente sensación de alivio.
—Si.
—Que extraño, no está Larimar cerca... —comenta curiosa, Iris.
—Lo dices como si nunca nos separáramos.
—Bueno, él siempre estaba cerca de ti.
—Je, no puedo negarlo. También está en la tierra flotante. Mejor vayamos a la casa, estoy tomando un descanso en el trabajo y allá podemos hablar más tranquilos.
Una vez que se ponen cómodos en la que antes era la casa del doctor, Zircón les explica lo sucedido en su ausencia.
A raíz de su partida, Titanita y Russeus labraron el terreno para un nuevo gobierno en Zafiro. La victoria de la guerra se consideró que fue en conjunto y dada la caída del poder que había forjado Lazurd, los nobles sobrevivientes se vieron obligados a obedecer al equipo vencedor; aunque en mejores términos de los esperados, puesto que se descubrieron muchos movimientos sucios del gobernante derrocado, que no eran favorecidos por la mayoría.
Forzosamente debían pensar en un nuevo gobernante; no estaba permitido uno que ya tenga un clan a su cargo y tomaba prioridad un primogénito de la familia real; entonces, ambos clanes propusieron a Ángel, pues ya habían formado una alianza con él, para derrocar a su padre; por lo tanto era elegible y la mejor opción para todos.