Capítulo 24

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-No, no puedes pedirme eso -levante la voz.

-Michael, no es una petición.

Baje la mirada hasta mi taza de café, dejar Janne no podía ser un opción, era como mi capricho, un deseo, como desear tener entre manos una estrella, tan cerca, tan lejos. Ella a la par con esos ojos azules me traían de vuelta al presente.

-Ella hablo conmigo -dio un sorbo a su café -. La confundes, no entiende la razón de tu comportamiento, le duele tu forma de usarla.

-No la estoy usando.

-Demuestra eso -se encogió en los hombros.

-Prometí mantenerme al margen de todo, no quiero arruinar mi última oportunidad para estar cerca de ella, al menos no por ahora.

- ¿Le hiciste una promesa?

-No tenía de otra, realmente metí la pata ayer.

- ¿Qué sucedió?

-Inicialmente la invite a comer para discutir ciertos puntos del proyecto, obviamente esto era un simple pretexto. Al final Lisa y Ryan aparecieron, me dieron la invitación de su boda sugiriendo llevar a Janne conmigo.

-Debió sentirse agobiada.

-Supongo, ella salió corriendo, trate de hacerla volver, se negó, traté de besarla, volvió a negarse.

-No entiendo...

-Alguien nos tomó una fotografía. Para cuando regresé a Sassafras ella se había ido, le pedí perdón a Lisa para ir de regreso a la disquera, hablé con ella, le rogué por aceptarme como un amigo y no lo hizo.

-No es ninguna sorpresa.

-Lo sé, necesito mantener un bajo perfil hasta encontrar la oportunidad perfecta de acercarme.

-Te deseo suerte con eso -pronuncio mordiendo su labio inferior.

Afirme un par de veces con los labios hechos una linea firme. Me propuse a mi mismo hacer mi mayor esfuerzo, ganar la confianza de Janne, dejar a un lado al recuerdo doloroso de un amor no consumado. El resto del desayuno mencionó cosas vagas sobre su hermana y el nuevo tratamiento en espera de una respuesta positiva. Regresamos a Shades Musix a las 10 de la mañana, justo cuando la cabina de grabación estaba lista para ser usada. Janne y su inseparable amigo Ethan. Ella lo miraba con los ojos brillantes, tenía su cabeza recargada en su hombro, él tocaba una tonada lenta mientras ella tarareaba algo.

-Es hora de comenzar el show -Carly se situó frente al panel de control conectando el micrófono interno-. ¿Chicos?

Ambos voltearon sonriendo.

-Tenemos la tonada de la primera canción, podríamos hacer un ensayo rápido -indico el chico de cabello ondulado.

- ¿Qué dices Michael?

Al escuchar mi nombre la sonrisa espontánea de Janne se borro casi al instante dejando apenas un pequeño rastro de esta.

-Claro, me encantaría.

Ella se levanto al instante posicionando un par de hojas sobre el atril aclarando su garganta. Los primeros acordes del piano se repitieron tres veces con un silencio corto en medio.

-Everybody's looking for that something
One thing that makes it all complete
You find it in the strangest places
Places you never knew it could be.

SpeechlessDonde viven las historias. Descúbrelo ahora