El viento se sentía demasiado fresco. Mi miedo se aumentó en 150% en cuanto las ramas ya no me dejaron divisar a la gente de los tres colegios.
No sabía a donde ir o si quiera que hacer. Es un laberinto; se supone que debo encontrar la copa según los pasadizos pero esto es el mundo mágico. Las trampas mágicas más los encantamientos que pueda encontrar me harán esto mucho más difícil.
Comencé a caminar con mi varita en mano, un poco temblorosa.
Tenía mis razones para tener miedo. Dumbledore en la noche anterior nos había comentado que estuviéramos en nuestros 5 sentidos al entrar por qué este lugar jugaba con la mente. Podría hacer creer cualquier cosa, más solo el concursante alterado podrá notarlo, los demás no. A veces corría por un camino mientras pensaba que veía una luz que podría ser la copa pero solo eran puros trucos... lógico, ¿no?
Hubo un momento en el que ya dejaba de caminar miedosa, si no, que solo quería encontrar una salida.
Por mi mente paso algo, a lo mejor ya habían ganado la copa y yo era la única estupida vagando por este torpe laberinto pero entonces... escuche.
Un grito ahogado. Muy agudo. Tendría que ser de Fleur. ¿¡QUE PASA CON ELLA!? Esta era una competencia pero tenía que asegurarme que ella estuviera bien.
Corría mientras seguía los gritos demasiado ahogados de Fleur, aunque estos pasadizos me confunden demasiado.
Justo antes de llegar pude ver una luz. La luz roja que Dumbledore dijo que usáramos si queríamos retirarnos.
Fleur se había ido.
Ella volvió a estar a salvo.
Ahora estaba corriendo un poco más asustada. Fleur era una chica delicada pero si fue elegida para representar a su escuela, tuvo que haberse retirado por algo mayor.
Aunque el susto que me dio Fleur me puso más alerta no cambio en mucho la situación. Seguía caminado como niña buscando a su mama, por todo el laberinto.
Escuchaba unas voces detrás de mí. ¿Habían hecho alianzas? No lo creo.
Entonces sin que me diera cuenta apareció Viktor detrás de mí pero algo parecía estar mal.
Sus ojos no eran marrones como siempre los veía. Tenían un tono blanquecino muy extraño además que esas no eran las miradas que siempre me dedicaba, era como... si el espíritu de Viktor no estuviera ahí pero eso lo que menos me importaba ya que recordé unas palabras."Escuchen, sientan, olfateen y además visualicen quienes son ustedes ya que la tercera prueba puede jugar con ustedes... podrían llegar a matarlos." Había dicho Dumbledore la noche anterior.
Viktor Krum me apuntaba con su varita en un intento de homicidio pero entonces más calmado, sin quitar esa extraña expresión de su rostro.
Lo mire confundida pero el solo siguió con su camino apartándome de él.
Ahora más que nunca tendría que estar alerta.
Camine un poco más apresurada de lo que estaba antes pero entonces una ráfaga de viento me comenzó a atormentar y las ramas que estaban a mis costados se comenzaron a unir desesperadamente queriéndome atrapar ahí.
Entonces salí corriendo como si no hubiera nada que me detuviera pero era un poco difícil por el viento que iba en mi contra.
Me aleje pero por pura suerte.
Tal vez eso mismo le ocurrió a Fleur.Lo único que quería era salir de aquí.
Entonces, sin darme cuenta, me tope bruscamente con el capitán del equipo de Quidditch de Hufflepuff, Cedric Diggory.
Me vio.
Estaba nervioso al igual que yo pero esas solo eran razones inútiles. No quería dejarme ahí pero su deseo de ganar la copa era más fuerte. Salió huyendo pero yo lo seguí. No se me ocurrió algo más inteligente que hacer.
En ese transcurso perdí a Cedric pero encontré a mi querido amigo de anteojos y ojos verdes.- ¡HARRY! – Grite sin importarme que alguien me atacara.
- ¡_____! – Grito el mismo mientras corrió a abrazarme. – Pensé que algo te había pasado.
- Tenemos que salir de aquí, ya no me importa la copa.Pero en eso nos encontramos a Cedric.
El tejón de Hufflepuff de ojos grises estuvo a punto de atacar al león de ojos verdes y anteojos de Gryffindor pero en ese momento Viktor Krum apareció detrás de Cedric y con el poder de su varita lo lanzo casi al punto donde estábamos nosotros. Había intentado matarlo por qué lo que uso no fue un "Expelliarmus".
Entonces Cedric se levantó enojado por el acto pasado de Viktor.
Cedric Diggory se acercó a nosotros desconcertado pero el buscador del equipo de Quidditch de Bulgaria apuntaba amenazadoramente con su varita hacía la dirección donde nosotros nos encontrábamos.
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La Oscura Bruja de Gryffindor
Fanfiction¿Alguna vez te haz sentido diferente? ¿Haz querido simplemente aplicar un reparo a tu vida? Pensé ser normal. Nacer, crecer, estudiar, conseguir un trabajo, una familia, cuidar de mis hijos, envejecer junto a mi amado esposo y... morir. La vida me h...