Parte 40 En camino...

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Las lágrimas caen de mis ojos, la tristeza me destroza y las náuseas están cada vez más insoportables. Anna me ha visto en este estado y me ha propuesto ir al médico, no es normal que vomite todo lo que coma y que cualquier olor me de ganas de vomitar, también me ha aconsejado hacerme un test de embarazo.

¡Eso nunca! Yo no estoy embarazada.Yo no puedo estar embarazada. Soy demasiado joven.

Pensar esto me hace llorar aún más, yo no puedo estar embarazada. Mi período siempre ha sido irregular. Esto es normal que no me venga.
Anna ha comprado un test, y yo estoy sentada en el sillón encaprichada en no hacérmelo.

- Si estas tan segura de que no estas embarazada porque no hacértelo- dice ella como si todo fuese tan sencillo.

- Por esa misma razón- digo histérica, mi humor va de mal en peor. Estoy tan sensible que lloro por todo y me pongo de mal humor al mismo tiempo.

- Por favor Mel, hazte el test- me ruega Ann- Tu humor no es normal y tus vomitos tampoco-.

Se para y pone junto a mi el maldito test. Y luego toma su abrigo y se marcha.

Estoy sola con mis pensamientos. Cojo con mis manos temblorosas el test, pienso en la posibilidad de hacérmelo pero el temor ha que salga positivo, me hace temblar como una hoja. Después de un larga decisión cojo el test y voy al baño llorando.

Sigo las indicaciones en el reverso de la caja, y entre lágrimas lo hago. Lloro y lloro en todo el proceso, estoy sola en esto, y si llega ha salir positivo no sé como haré.

Han pasado los cinco minutos y voy temerosa al sitio donde se encuentra el palillo metido dentro del frasco con orina. Saco el test de la frasco y miro la paletilla que tiene un signo mas: Positivo.

Mi corazón comienza a latir con fuerza, demasiada fuerza, siento que se saldrá de mi en cualquier momento, lo cual no es mala idea.

Estoy desesperada, tiro el puto objeto y lloro sentada en el inodoro desconsoladamente, de tanto que lloro no se como no me deshidrate hace tiempo. Por mi cabeza pasa todo, la muerte, el aborto, la soledad, el suicidio nuevamente y Benjamín. El no puede saber de esto.

Termino de llorar cuando mis ojos están tan rojos y secos, me me acerca al espejo y observo mi vientre que sigue totalmente plano.Tengo ganas de meterme trescientas puñaladas más las que te tengo y morir.

Maldigo a Benjamín en mi fuero interno.

Entro a la ducha y tratando de liberar tensiones bajo el agua, el agua siempre me tranquilizaba cuando era niña, las discusiones de mis padres siempre me llenaban de miedo y nerviosismo, y ente momento me encuentro demasiado desequilibrada.

Mis pensamientos vuelan a lo más inhumano de mi ser, pienso una y otra vez en el suicidio, es tentador y provocador. Trato de borrar eso pensamientos agitando mi cabeza, cierro los ojos fuertemente y trato de imaginar otra cosa y el rostro de Benjamín aparece en mis sentimientos ¡Oh Dios cuanto lo extraño! Pero recordar que estoy embarazada me hace odiarlo y pensar que no lucho por nuestro amor, me hace detestarlo.

Salgo de la ducha y  me pongo la pijama. Y me recuesto en mi cama y los pensamientos invaden mi mente, me atormentan hasta que logró conciliar el sueño. 

-¡Voy a ser tía!- escucho gritar a Anna, desde no se donde.

Mi puerta se abre de golpe y entra Anna como recién llegada de una fiesta, todo despeinada y con el vestido un tanto arrugado. Sus palabras me hacen sentir rara, me da algo de pena, pero no me disgustan tanto como creí.

- No lo confirmes- digo y bajo la mirada.

- No te pongas triste Melody esto es una bendición, tal vez ahora puedan recuperar tu relación con Benjamín, ya han pasado tres semanas ¿Has recibido otra llamada de el?- dice Anna y yo me molesto ante ese comentario.

-No y no, si esto llega ha ser cierto me iré de España, nunca lo ataría a mi por una bebe- digo y Anna. Y recuerdo la llamada que me hizo un sábado por la noche a las tres de la madrugada.

Son las tres de la madrugada, luego de irme de la empresa me la he pasado llorando en mi cama. Estoy casi dormida y suena mi móvil, maldigo a quién sea que sea, miro la pantalla y es él, creí que jamás volvería a escucharlo, creí que ya no me buscaría y ahora me encuentro en la duda de atender o no.

-Hola- digo dudosa nerviosa.

-Le di una muerte peor, lo besé tan-tan dulcemente que le par-partí el corazón. Tienes razón- dice Benjamín del otro lado, tartamudeandome ¡Esta borracho!

- Estas borracho- recriminó.

- Borracho de amor por vos, que lastima que no podamos estar juntos- tartamudea y lo escucho sollozar.

-¿Por qué?- preguntó, aprovechando su vulnerabilidad para sacarle información.

- Por mi pasado- su voz suena triste, y tengo que jurar que me tiene harta con su pasado ¿Tan malo es? -Te amo Mel, no lo olvides - dice ahora con voz normal.

Cuelga la llamada, yo quedo hecha un desastre emocional. Es una maldito hijo de puta, solo llama para hacerme sufrir más.

-Eso es ser egoísta Mel, él es el padre y se merece conocer a su hijo- se que tiene razón, pero yo estoy segura de que si este bebe llega a nacer yo desaparezco y Benjamín no sabrá nada dé nosotros.

- Basta, todavía no sabemos se verdaderamente estoy preñada el test dice 99% efectivo, no dice 100% efectivo- Ann ríe ante la idiotez que acabo de decir.

- Mañana iremos al ginecólogo ¿Quieres?- yo asiento y cambiamos de tema.

Hace media hora que estoy sentando en la sala de espera, odio las clínicas,odio el olor que hay, odio apoyar mi trasero por una hora en estas bancas duras y odio sentir esta tristeza que hay en las clínicas, Anna le comento sobre esto y ella me dice que estoy exagerando. ¡Yo no exagero!

- Señorita Burton, dice la ginecóloga Smith- me paro y Anna también, caminamos hasta el consultorio.

Después de quince minutos, que me haya insertado un palito que hacia <Pi- pi-pi-> dentro de mi confirma lo obvio.

- Estas embarazada de dos meses y dos semanas, pero hay un problema...- dice y Anna y yo abrimos bien grandes los ojos.

- El bebe se encuentra en un lugar crítico- saca la ecografia y me muestra una manchas que ni parecen un bebe.

- Mira aquí- la mancha esta atravesada en mi útero.

- ¿Y como que tenemos que hacer?- pregunta Anna.

- Cuidarse, no tienes que hacer nada de fuerza, mucho reposo y dejar de tomar bebidas alcohólicas o si fumas déjalo por completo- yo solo asiento, no puedo cree que esa manchita que llaman bebe esté dentro de mí. Quiero morirme, no se si estoy preparada para esto.

Salimos del médico y vamos a un restaurante a almorzar. Ann está más contenta que yo, me habla de ropa, de zapatitos, de que si es nena o nene, de nombre de todo ¡Mi cabeza explotara!

-Basta, no estoy segura de si lo tendré- digo en un impulso.

- ¡Que dices!- ahora su cara refleja molestia.

- Que no se si estoy preparada- bajo la mirada, Ann cuando se enoja puede dar miedo.

- Eres una insensible, tu no sabes lo que es no poder tener nunca un hijo- una lágrima cae por su ojos- pero Dios le da pan, al que no tiene diente- concluye.

-¿Que?- pregunto asombrada, no lo puedo creer.

- Soy estéril Melody- confianza con una tristeza enorme, lo noto en sus ojos.

- Perdón, ¿porque nunca me lo has dicho?- digo apenada por mi amiga.

- No me pidas perdón, solo dime que lo tendrás y si quieres yo te ayudaré criarlo. Yo no te lo he dicho porque es un tema muy doloroso para mí- yo asiento.

- Si saldremos adelante juntas- le digo tratado de animarla- Serás la mejor tía Ann-.

- Te quiero tonta- dice ella y unas lagrimas caen por mis ojos.

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Hola!!
Gracias por la espera, los quierooooo!

Me encantaría que me dejen comentarios positivos y gracias por motivarme 💕

¡Ese es mi Jefe! (Wattys2015)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora