Amor vs odio ©

Cap 36

Brandon no había traído el coche, algo que en cierto modo agradecía, ya que necesitaba que me diera un poco el aire. Habían pasado tantas cosas en tan poco tiempo que sentía que la cabeza me estallaría de un momento a otro. Además, lo que me acababa de contar Dan no hacía otra cosa más que sumar un poco más de caos a todo. En definitiva, tenía la cabeza en otro sitio y Brandon pareció darse cuenta.

-Te pasa algo.-murmuró. Ese comentario sirvió para que despertara del trance en el que me encontraba. Me giré hacia él y me percaté de que tenía la cabeza ladeada y me miraba fijamente. De seguro llevaba un rato mirándome.

-N-no.-añadí rápidamente.

-Erika, mientes fatal, y lo sabes.

-En serio, no me pasa nada-traté de pensar rápidamente en algo que poder decir para desviar el tema.-Estaba viendo las casitas de por aquí. La verdad es que son pre...-me detuve en cuanto vi que Brandon seguía mirándome, esta vez con las cejas alzadas.-Vale... sí.

Tenía la cabeza en otras cosas. Finalmente cedí a la evidencia. Si de algo estaba segura era que Brandon era muy perspicaz. Siempre sabía cómo me sentía, parecía que pudiera leer en mi cara mi estado de ánimo en cualquier momento, por mucho que yo tratara de ocultarlo. De todas formas él ya sabía lo que había pasado con mi hermano hacía unas semanas, así que sabía más o menos de qué iba la cosa. Brandon no volvió a decir nada ni a presionarme. Simplemente se quedó mirándome mientras andábamos, como esperando a ver si quería contárselo o no.

-Tiene que ver con lo que te conté aquella vez en el parque.-decidí hacerle un pequeño resumen. No quería aburrirle con los problemas de mi familia, pero tampoco quería que pensase que no quería contárselo o que no confiaba en él. De hecho tenía ganas de hablar con alguien más a cerca del tema que no fuera un miembro de mi familia. -Parece ser que han vuelto a filtrar documentos, supongo que te imaginarás cómo están ahora mis padres.-negué con la cabeza, como si con eso fuera suficiente para negar todo lo que estaba pasando.

En ese momento Brandon se acercó más a mí y nos detuvimos en medio de la calle. Me pasó un mechón de pelo que se había escapado del resto por detrás de la oreja mientras me miraba a los ojos.

-¿Y tú cómo estás?

Parpadeé varias veces mientras pensaba en la pregunta que me había hecho.

-Pues la verdad no lo sé. Estoy sorprendida y no sé qué hacer... quiero ayudar a mis padres pero no sé cómo. Me siento inútil.-Me llevé una mano a mi oreja y empecé a juguetear con uno de mis pendientes. Algo que hacía apenas unos meses me había dado cuenta de que hacía siempre que estaba nerviosa. Brandon me cogió la mano y comenzamos a caminar de nuevo, esta vez más juntos.

-¿Y ya sabéis algo? ¿Quién os está haciendo esto...?

En ese momento me vino a la cabeza de nuevo lo que minutos antes me había comentado mi hermano. Las dos empresas que habían filtrado los documentos en ambas ocasiones y la supuesta relación entre ambas... Pero no quería complicar mucho más la historia. Además, Brandon debía de estar preguntando simplemente para ser amable, para que me desahogara si quería hacerlo. No quería aburrirle con esos temas.

-Sí... parece ser que una pequeña empresa que se dedica a lo mismo que la de mi padre, ya sabes, negociaciones entre otras empresas y mediaciones.-Brandon asintió haciéndome entender que estaba escuchando.-Pero bueno, no quiero aburrirte con estos temas, y casi prefiero no darle demasiadas vueltas ahora mismo.