"Lᴀ́ɢʀɪᴍᴀs ᴘᴏʀ ᴀᴍᴏʀ" ¦¦ [Lᴇᴏɴᴅʀᴇ Dᴇᴠʀɪᴇs ʏ ᴛᴜ́]

1.06

Me encontraba sentada en el sillón de la sala cuando escuché bajar a alguien de las escaleras.

-____, ¿me acompañarías al aeropuerto?-me preguntó mi tía.

-Claro, ¿a qué hora?-pregunté mirando mi celular.

-A las 3:30.-respondió checando su reloj.

-Claro, me iré a bañar entonces -le comenté y me dirigí a mi habitación.

Me di una ducha de unos 10 minutos, me puse mi ropa

me cepille el cabello, y antes de bajar mi mirada se fijó en la fotografía que estaba en mi ropero, era de mi madre.

-No sabes lo mucho que te extraño.-susurré mientras mis dedos acariciaban la foto.

Sentí vibrar mi celular, dejé la fotografía en su lugar y busqué dentro de mis bolsillos mi celular, contesté sin siquiera fijarme del número.

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[Llamada telefónica]

-¿Bueno?.- contesté

-¿____? Ehm.. estoy en casa de Leo, le podrías decir a mi mamá que me pase a buscar para ir al aeropuerto.-era Charlie.

-Está bien.-contesté y colgué.
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Bajé a la sala para avisarle a mi tía de la llamada de Charlie, ella se encontraba maquillandose.

-Tía, Charlie me dijo que pasarás por él, esta en casa de Leo.-mencioné acercándome a ella.

-¿Qué no puede venir? está enfrente.-dijo mientras se aplicaba el labial.-Linda hazme el favor de ir a buscarlo ¿sí?- dijo con una sonrisa

Yo solo asentí, salí de casa y crucé la calle, al llegar toque el timbre.

-Un momento- escuché una voz femenina.

Me abrió la puerta una mujer alta, de cabello negro, muy linda.

-Buenas tardes, ¿se encuentra Charlie?-pregunté algo nerviosa.

-Oh si! disculpa, ¿quién lo busca?-me preguntó confundida.

-Soy _____, su prima.-respondí con una leve sonrisa.

-Oh! pasa siéntate ahora le llamo.-dijo de forma amable y con una leve sonrisa.

-Gracias-Le devolví la sonrisa y me senté en el sofá de la sala.

Chequé la hora eran las 3:15.

Escuché pasos, mire a la escalera y ellos estaban bajando, enseguida me levanté del sofá.

-¡____!-sonrío y me abrazó.

-Charlie nos tenemos que ir.- dije desesperada, íbamos tarde mi tía seguro estaría molesta.

-Sí, vamos Leo-dirigió su mirada a Leo.

Sin decir nada, salí detrás de Charlie, cruzamos y ahí estaba mi tía en la camioneta. Los tres entramos a la camioneta y fuímos directo al aeropuerto.

(...)

Llegando al aeropuerto, estacionamos la camioneta y entramos, había demasiada gente, si que sería difícil buscar a mi tío.

-Será difícil-dijo Charlie con fastidio seguido hizo una mueca.-Les dije que traigamos un cartel, como le hacen en las películas-dijo ingenuo.

Todos reímos ante su comentario.

-Iré a ver por allá- apunté a la izquierda.

Ella asintió.

Me dirigí a la izquierda, pero de inmediato el lugar se llenó más de gente, alguien me empujó haciendo que cayerá encima de un chico, era muy lindo.

-Hola-sonreí como boba debo admitirlo.

-Hola, podrías...-quería que me quitará de encima.

-Ehm... claro.. lo siento.-Me paré y lo ayudé a levantarse.

-¿Cómo te llamas?- Me preguntó.

-____ y tu?.- Le sonreí.

-Lindo nombre, me llamo Keith pero me puedes decir "K"-Se acercó a mí.

"¿Me esta coqueteando?, ____ calmate"

-Me gusta.. "K".-Sonreí.

-¿Me pasas tu número?- Me dijo sin titubear, vaya si que era rápido este chico.

-No le doy mi número a desconocidos, pero buen intento.. crees que soy estúpida.- Sonreí-¿A cuántas más le has pedido su número el día de hoy?-Espere una respuesta.

-Bueno.. si tú no me lo das, yo te daré el mío -Dijo sacando un plumón de su bolsillo, se acercó a mí y me apuntó su número en mi brazo.

-____.. ya encontramos..-se escuchó la voz de Leo, yo volteé al igual que Keith.

-¿Decías?-Pregunté ya que no terminó de hablar.

Keith y Leo se miraban como si se conocieran, había una tensión en el aire que podías tocarla.

-Tu tío, ya lo encontramos.- dijo sin despegar la mirada de Keith, y con la cara completamente seria.

-Bueno yo ya me iba, me llamas.-Se acercó Keith a mí y me dio un beso en la mejilla, luego miró a Leo con una sonrisa y se fue.

-Ya, vamos- Escuché molesto a Leo. Y sin más, comenzó a caminar rápido.

-Espera.. Leo tú lo conocías... o se conocen.-Le agarré del brazo para que parará.

Él paró, no me contestaba, ni siquiera me miraba, solo miraba a la gente pasar.

-Tu tío nos esta esperando.- Al fin habló, y de mala gana.

Yo sólo le solté el brazo y lo miré molesta, no entendía que pasaba.