En cuanto Ashton entró al salón, vio que todos los asientos estaban vacíos. Pegó el pequeño post—it, que decía "Lo siento", en la mesa que habitualmente solía usar Callie y se sentó al final de la sala. Ni siquiera quería mirar a sus compañeros a los ojos por la vergüenza que había pasado ayer, mucho menos quería mirar a Callie.
Lo había rechazado, incluso después de haberse humillado de esa manera, debería estar enojado o resentido con ella. Pero no podía, porque en el fondo sabía que ella tenía razón, y todo esto no era más que su culpa.
Puso sus audífonos, y golpeteó la mesa con dos de sus lápices, esperando que la clase empezara.
Para cuando llegó el profesor, la sala estaba a medio llenar, todo el que había entrado se lo quedaban mirando hasta que les correspondía la mirada, pero Callie no había llegado, y empezó a ponerse más nervioso aún.
Pero Callie llegó, y se sentó junto a May en las mesas que él había predicho. Callie alzó el papel, lo miró sin darle importancia y lo hecho en su mochila, sin mirarlo dos veces. Y hasta ese mínimo gesto hizo que sintiera una punzada en su estómago.
Calum llegó tarde, y se sentó junto a él, lo saludó con una sonrisa burlona y comenzó a tomar apuntes.
—Hola Calum — murmuró Ashton, mirando a Calum sospechosamente.
—Hola galán, ¿planeando alguna confesión amorosa?
—No para hoy — contestó un poco incómodo — pero...
—¿Pero qué?
—¿Podemos hablar cuando acabe la clase?
—Uhm — Calum alzó la vista de sus apuntes, y miró a Ashton durante un par de segundos estudiándolo — Esta bien.
Y ninguno dijo nada más.
Cuando la clase terminó, Calum se alejó y fue directo a abrazar a Callie. Algo en su estómago quemó y tuvo que apartar la mirada. ¿Por qué Calum siempre hacía eso? ¿Cómo si Callie le perteneciera?
—Si las miradas mataran... — dijo Luke al tiempo que se sentaba en la mesa de Ashton.
—¿Me volviste a hablar?
—Quizás estaba un poco equivocado con el tema tuyo y de Callie. Quizás realmente te gusta.
—¿Quizás?
—Ashton, si mal no recuerdo, tú dijiste...
—Se lo que dije —lo interrumpió.
—Bueno, pero quizás tú también estabas equivocado.
—Mira, si quieres oír la verdad, no quiero hablar de esto. ¿Podemos dejarlo?
—Bueno — Luke alzó ambas manos — ¿Vienes conmigo o te quedarás aquí sufriendo?
—Sufriendo. Aquí.
—Está bien, ¿vienes a mi casa en la tarde?
—¿Estará May?
—Si.
—Entonces sí.
—Bien.
Luke se levantó para irse, pero al dar dos pasos se detuvo y miró fijamente a Ashton.
—Es mi chica, si no te funcionó con la tuya, ni la mires — y lo dijo completamente serio.
—Bien — Ashton tuvo que aguantar la gracia que ver a Luke celoso le provocaba, pero luego recordó que probablemente a Luke le había causado el mismo chiste verlo celoso por Calum, y ya no tuvo más ganas de reírse. Luke se fue sin decir otra cosa.