Des de que apareciste.(Fanfic ElRubius)

capítulo 19

-Levanta! Vamos! Hay un chico picando a la puerta.- Mi madre me estiró para que saliera de las sabanas aún manchadas del rímel por lo que había llorado.
-Mamá ahora no puedo recibir a nadie.-Dije cabreada.
-Es que lleva mucho rato esperando...-Dijo casi suplicandome.
-Joder, voy. -Me puse una sudadera y me hice una cola rápida. Mientras bajaba las escaleras me secaba el rímel. Sólo rezaba para que no fuera Ruben. Bueno no creo... Si lo fuera mi madre me hubiera dicho algo... Supongo.
Pero la sorpresa era aún mayor. Ese chico me miró y me sonrió, aunque se le quitó un poco la sonrisa al verme tan triste.
-Mangel! -Corrí a abrazarlo.
-Mi Mía! - Nos separamos y me miró con tristeza.
-Que.. Que? Que haces aquí? -Dije aún demasiado sorprendida.
-Eh que como te noté triste decidí venir a animarte.
-Estas muy loco! Pero te quiero. -Le volví a abrazar.
Me vestí y nos fuimos a un bar.
-Cuentame Mía... Que ha pasao con Ruben?
-Pues que... -Respiré ondo para no llorar- Que le presenté a una amiga de aquí de Londres y se empezaron a llevar muy bien, tontearon y se besaron. Cuando tu me llamaste los perdí de vista y no los vi en todo el día. Por la noche, cuando volví estaba Ruben en mi portal y nos discutimos, le di dinero para que durmiera en un hotel y se marchó.
-Joer. Mira que eh mi mejor amigo, pero nunca aprenderá... Pero Mía puedeh estar segura de que te quiere mucho. Tu ereh la única por la que ha estado tan rallado y tan... Enamorado. Te juro que nunca había estado así por nadie. Pero a veces tiene deslices.
-Ya Mangel, pero esos deslices me hacen daño. Y si lo vuelve a hacer? Es que...-Empecé a llorar- Es que pensé que lo nuestro sería para siempre y...-Mis llantos aumentaban y Mangel me intentaba calmar.- Y es que lo quiero joder. Ahora lo quiero matar pero lo quiero.
-Te entiendo...-Me abrazó con fuerza.
-Quizás no soy la chica perfecta para él. Tengo muchos defectos...
-Shhh -Me calló Mangel.-Eso no. Aquí el que se ha equivocado es Ruben.
-Mangel. No lo quiero perder... Estoy... Estoy... Enamorada.-Esas palabras que salieron de mi boca sin pensar, me hicieron más daño aún.
Seguimos paseando con Mangel por el lado del río Thamesis. Hacía un día bonito, pero mi corazón por dentro estaba roto en mil pedazos. Mangel me explicaba chistes, yo fingía alguna sonrisa ya que no tenía fuerzas para reír.
-Mía puedo llamar a Rubiuh? -Me dijo Mangel con el móvil en la mano.
-Sí, claro.-Dije, ya que deseaba tener noticias de él aunque me doliera.
Me senté en un banco a esperar a que Mangel acabara de hablar con Ruben.
Mangel volvió preocupado.
-Mía, Ruben ha tenido un accidente y esta en el hospital. -Mi corazón se paró de golpe. Me repetía a mi misma: todo es tu culpa, no puede ser, joder, no! No podía apenas hablar.
-Y... Como... Como está? -Dije casi llorando.
-No se ha roto nada, sólo tiene heridas y rascadas aunque está aún en estado de shock y no se despierta. -Me mordí el labio para no llorar, pero fue imposible.
-Y cuando despertará Mangel? Cuando? - Dije ahogando mis palabras.
-No lo sé Mía. -A él también se le escaparon unas lágrimas. Y me abrazó repitiendo: no lo sé...