Black Love ✔ (Terminada y Editando)

"Inesperado" (EDITADO)

_ Tú... Tú también te ves muy guapo -dije, ¿nerviosa? Tal vez, un poquito nerviosa.

_ Gracias... ¿Nos vamos? -extendió su brazo para que lo tomara.

_ Vamos.

Y así, tomada de su brazo, nos fuimos directo al estacionamiento. 

Una vez dentro del auto todo quedó en silencio, pero era un silencio para nada incómodo.

Vi la hora en mi celular y marcaba las 18:47, perfecto, llegaríamos justo, tal vez 5 minutos antes.

A medida que nos acercábamos a la, ya tan conocida, mansión mis nervios aumentaron sin control. Pensé que estaba preparada para esto pero... Una cosa era que la señora Irina me aceptara como la asistente de su hijo, pero de ahí, ¿a ser su novia? Tal vez no le agradaría la idea.

Una vez en la mansión, James me abrió la puerta del auto como todo un caballero. Caminamos hasta la entrada y antes de tocar el timbre, James me tomó por los hombros para que lo mirara directo a los ojos.

_ Recuerda que somos novios y estamos completamente enamorados.

_ Lo sé, ya lo dijiste -dije, obvia.

_ Tu y yo lo sabemos, pero ELLOS deben creerlo, así que debemos superar la prueba de fuego.

_ ¿Y cuál es esa prueba?

_ El beso...

Sin darme tiempo para alejarme, me tomó las mejillas, se acercó a mí y nos fundimos en un profundo beso.

Al principio, no cerré los ojos, pero luego me dejé llevar por el momento, después de todo, él tenía razón, si íbamos a ser novios por un par de meses este debía parecer real.

El problema es que en la prueba del beso la estábamos pasando demasiado bien. Nunca nadie me había besado como James lo estaba haciendo. Entonces se hizo presente la falta de oxígeno, por lo que, lamentablemente, tuvimos que separarnos.

Nos miramos por unos segundos a los ojos hasta que él desvió la mirada.

Tocó el timbre para luego pasar un brazo por mi cintura, lo cual solo aumentó mis nervios. Segundos después la puerta se abrió dejando ver a nana, quien, al vernos, abrió la boca demostrando su sorpresa.

_ ¡Rayos! Perdí -su tono era de decepción.

_ Siempre lo supe, ¡gané!

Me sorprendí al escuchar decir lo último a la señora Irina, quien abrió un poco más la puerta para que pudiéramos entrar.

James, al igual que yo, miró a ambas mujeres sin entender de lo que hablaban.

Cuando estaba a punto de preguntar qué sucedía una tos falsa se escuchó a nuestras espaldas. Me di vuelta para encontrarme a Sam con Violetta de la mano. De inmediato se formó una sonrisa en mi rostro y me acerqué a ambas para abrazarlas. La señora Irina nos pidió que entraramos.

Llegamos a la sala donde se encontraban el señor William, Mía y Tara. Todos comenzamos a saludarnos como corresponde, Tara y Violetta se fueron a jugar de inmediato. Me extrañé cuando James se levantó pidiendo la atención de todos.

_ Bueno, como ya saben, hace dos meses que Rachell se convirtió en mi asistente y bueno, todos sabemos la gran chica que es y... no pude evitar enamorarme de ella. Por eso le pedí que fuera mi novia hace un mes y ella aceptó, así que pensé que ya era momento de que lo supieran.

En cuestión de segundos Irina estaba abrazando feliz a su hijo. El resto se levantó y comenzó a felicitarnos a ambos. Lo encontraba tierno pero extraño a la vez, ya que solo éramos novios no es como que nos fuéramos a casar.

_ Estoy tan feliz... Por fin encuentras a una chica decente y buena. Bienvenida a la familia, Rachell, a ti también Sam, sé que son como hermanas -Irina le dedicó una sonrisa.

_ Supe que Rachell hace un muy buen trabajo de asistente, hijo -mencionó el señor William.

_ Sin duda es la mejor... -sonrió feliz James.

_ Lo dices por que soy tu novia -imité un tono serio, pero no pude evitar reír al igual que todos.

_ Sobre eso... -James se puso serio- Bueno, Rachell ahora solo trabajará conmigo y...

_ Pero puedo trabajar toda la mañana contigo y cuidar por las tardes a las chicas.

_ No quisiera que te recargaras de trabajo, querida -Irina se veía preocupada por mí.

_ Amo a las chicas, no es trabajo extra -reí- Puedo ir por las tres al colegio y cuidarlas como siempre.

_ Yo puedo ayudar cuando Rach no pueda -mencionó Sam.

_ Vamos, pasen... La comida está servida -nos interrumpió nana.

Quedamos en que trabajaría por las mañanas con James para cuidar en las tardes a las niñas.

La cena fue increíble, tranquila y la pasamos entre risas. Eran cerca de las nueve así que decidimos irnos.

Como era viernes Mía y Tara se irían con nosotras para hacer una pijamada.

_ ¿Puedo ir? -James tenía cara de gato con botas- También quiero ver películas.

_ Lo siento, cariño, pero es noche de chicas. De hecho, irá Blake, así que no puedes.

_ Pero te extrañaré -fingió llora.

_ Pero que cursi, hijo. Déjala, la tienes para ti toda la semana y quieren una noche de chicas -Irina se reía de su hijo, quien de un día para otro, se había vuelto extremadamente cursi.

_ Gracias por la ayuda, madre -su tono irónico me hizo reir.

_ Estamos listas, ¡vamos! -gritó Tara saliendo de la casa junto a Mía y Violetta, Sam esperaba en el auto hablando por celular.

_ Ok, no hagan enojar a Rachell. Adiós, chicos -Irina nos besó en la mejilla y entró a la casa.

_ ¿Vamos a algún lugar todos mañana?

_ ¿A dónde, James?

_ Mmm... Pasaré por ustedes. A las 12:30 am las quiero listas.

_ Ok, nos vemos mañana.

Me acerqué para darle un beso en la mejilla pero él se adelantó, me tomó la cara y me besó apasionadamente, nos separamos por la falta de aire y no pude evitar sonrojarme... respiré y me calmé, después de todo debía acostumbrarme a todo esto.

Me dio un último beso y cada uno fue a su auto, en mi caso subí junto a Sam quien ya había terminado su llamada que de seguro era con Logan.

Le sonreí y nos fuimos directo al departamento. Al llegar, Blake nos esperaba sentada en su auto. Al bajarse traía varias bolsas que parecían ser comida lo que significaba que... ¡estábamos listas para la noche de chicas!