Black Love ✔ (Terminada y Editando)

"¿Es tu novio?" (EDITADO)

Con más fuerza de la necesaria, le di un golpe al despertador junto a mi cama, por poco y el despertador pasa al cielo de los despertadores.

Eran las 9 de la mañana en punto y debía prepararme porque el idiota pasaría por mí en una hora y media.

Era sábado, por lo que las chicas estaban profundamente dormidas en sus respectivas habitaciones.

Luego de una relajante ducha, que hace mucho tiempo no tenía el privilegio de hacer, me vestí con unos pantalones negros ajustados, zapatos del mismo color, una blusa simple color crema y una chaqueta de mezclilla.

Fui directo a la cocina para comer algo ya que mi estómago no dejaba de rugir. Preparé un café bien cargado con unas tostadas.

Cuando me senté para comer escuché el timbre, vi la hora en el reloj de la cocina y eran recién las 10:05. Qué extraño, quién sería a esta hora, se supone que el simio llegaría en 25 minutos.
Fui a la puerta y al abrir...

_ Supongo que no te has olvidado de mí, preciosa.

_ ¡Logan!

Logré reaccionar y salté a sus brazos, hace mucho que no veía a mi amigo. Cuando ya estaba por asfixiarlo me separé y entramos a la cocina, le serví un café como recordaba que le gustaba y me senté.

_ Mucho tiempo sin vernos, pequeña ardilla.

_ Hace mucho que nadie me dice pequeña ardilla.

_ Por eso volví, para recordarte que eres una pequeña ardilla.

_ Gracias por todo lo que has hecho por mí, Logan. Sin ti quizás dónde estaríamos con las chicas. El trabajo es perfecto y la señora Irina es maravillosa. Por cierto, ¿por qué no te he visto en la mansión? ¿No que trabajabas allá?

_ Sí, pero solamente voy lunes, miércoles y a veces los viernes, pero justo este viernes no me tocaba.Pero dime, ¿qué tal New York?

_ Bueno, no he tenido mucho tiempo de salir a recorrer pero lo que he visto me ha encantado.

_ ¿Qué te parece si las llevo a ti y a las chicas en un tour por la ciudad hoy día?

_ Oh, eso seria genial...

No pude terminar de hablar puesto que el sonido del timbre me interrumpió, fui a la puerta y al abrir me encontré con el simio más idiota del mundo, James.
¡Genial! Por un momento había olvidado que tenía que salir con él. Y yo que tenía ganas de pasar mi tiempo con Logan.

_ Supongo que ya estás lista, creo haber dejado en claro que no me gusta esperar.

_ ¿Señor Collins? - escuché la voz de Logan a mis espaldas un poco confundido.

_ ¿Logan? ¿Qué haces tú aquí? - al parecer el simio también estaba confundido.

_ Logan espera a que las chicas despierten, puedes salir con ellas. Yo tengo cosas que hacer, nos vemos más tarde.

Tomé el bolso, besé la mejilla de Logan y salí rápidamente tirando un poco del simio.

Llegamos al primer piso y seguí a James sin decir nada. Nos subimos a su auto en completo silencio. Hasta que su voz nos sacó de ahí.

_ ¿Es tu novio?

Me quedé mirándolo por unos segundos. Vestía unos jeans oscuros y una polera blanca que marcaba su cuerpo bien trabajado. Podía ver los músculos de sus brazos tensarse mientras manejaba. Su vista fija en el camino se desvió para mirarme cuando vio que yo no contestaba. De inmediato desvíe mi mirada hacia la ventana.

_ No es de tu incumbencia.

_ Bueno, desde ahora lo será.

_ ¿De qué estás hablando?

_ Luego te lo explico.

Llegamos al lugar, era una linda tienda.  Se veía que todo era bastante costoso. Llegamos donde el señor tras el mostrador, quien al ver a James nos atendió de inmediato.

_ Señor Collins, es un gusto verlo por aquí - el señor, al parecer, estaba un poco nervioso por la presencia del chico - El pedido de su madre está listo.

_ Bien, ¿qué esperas para entregarlo entonces?

Era claro que James estaba de mal humor, pero no tenía por qué pagarlo el vendedor. Dicho esto el señor desapareció por una puerta, cuando volví la vista a James vi que este me miraba fijamente como escaneando todo mi cuerpo.

Hice sonar mis dedos justo frente a su cara para que dejara de verme así y lo logré. Iba a hablar pero el señor, llegando con un montón de cosas, lo interrumpió.

Nos explicó que había de todo, desde el uniforme para los cinco días de la semana (además de otros por si acaso) hasta útiles escolares, ya sea cuadernos, lápices, etc. y una mochila.

Con un montón de bolsas volvimos al auto de James. Luego de guardar todo nos subimos, otra vez en un completo silencio.

Decidí hablar cuando noté que no era el camino al departamento.

_ ¿A dónde vamos?

_ Tenemos que hablar y no he desayunado.

Llegamos a una pequeña cafetería, nos sentamos y de inmediato apareció una camarera para tomar nuestra orden. Era obvio que a la chica se le caía la baba por James ya que no dejaba de mirarlo. Por alguna extraña razón eso me molestó un poco así que tosí disimuladamente.

Pedí sólo un café, aunque James, en contra de todas mis protestas, me ordenó unas medias lunas.

Una vez que el pedido estaba frente a nosotros él se decidió a hablar.

_ Bueno, como sé que te importa mucho el trabajo en casa de mi madre y sé que no lo quieres perder, tendremos que hacer un trato.

_ ¿Qué tipo de trato?

_ Como dijiste que habías trabajado de secretaria serás mi asistente personal.

_ Pero trabajo en casa de tu madre, no tengo tiempo...

_ Tengo un contrato listo donde dice que estarás disponible a la hora que yo te necesite, aun así obviamente no te molestaré en el horario en que estás en la casa.

_ ¿Y por qué debería aceptar?

_ Porque si no aceptas pierdes tu trabajo en la casa de mi madre, el departamento, el colegio para tu hermanita y tu amiga también se quedará sin trabajo.

_ ¿Por qué haces todo esto?

_ No tengo por que darte explicaciones. Aquí está el contrato, firma...