18.El comienzo y el fín.

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Margaret
=Flashback=
Se supone que cuando terminas con alguien lo haces por que no la quieres más, porque te engañó, te hizo daño etc.

Puede haber mil y un razones para terminar con alguien, pero también puede haber mil y un razones para estar sentada en un estúpido bar.

Una de ellas puede ser por ejemplo, el no tener trabajo desde hace un infinito, el que tu ex novio te siga pidiendo perdón, desde hace un año por haberte engañado con tu ex amiga, que tus padres intenten que trabajes con ellos en Londres.

Pude haber mil y un razones para que estes observando la pequeña jarra de cerveza frente a ti.

Llevaba media hora admirando la jarra que sin pedir, el mesero con mucho gusto puso frente a mí.

El bar se había llenado de hombres de repente. Había mujeres pero la mayoría de ellas buscaban un novio o un cuarto para pasar la noche (Saben a lo que me refiero) sólo una chica a unos metros de mi y yo buscábamos tomar una cerveza (O yo en mi caso admirarla).

Un chico se sentó junto a mi y pidió una cerveza.

-Eso no se toma por los ojos- se burló.

Ni siquiera me digne a verlo.

-No te pregunté ¿Oh si? - le dije en tono grosero.

-Vaya, me eh encontrado con una fiera- dijo divertido- Soy Austin- me tendió la mano.

-No me importa vaquero- seguí sin mirarlo-Si buscas diversión, en el rincón de haya, hay un circo de payasas.

El soltó una carcajada.

-El problema es que no estoy buscando divertirme, simplemente quería acompañarte- dijo tranquilo-Además eres la primer mujer que me mantiene divertido por más de cinco minutos.

-Ves como si buscas diversión- por primera vez me gire para verlo.

Era muy guapo, tiene una hermosa sonrisa que se amplio cuando lo mire. Parecía ser el chico por el que todas en la escuela suspiraban, pero algo no estaba bien.

Lo miré una vez más y me detuve.

-¿Eres militar? -dije sorprendida.

-Soy Marine- dijo orgulloso.

-¿Y que no es lo mismo? -pregunté confundida.

-No, yo soy soldado de mar, no de tierra- explicó.

-Ya- dije indiferente.

Y ahí se detuvo la conversación, el siguió mirándome pero yo lo ignore.

-Así que ¿Estas esperando a tu novio? -rode los ojos.

-Si mi novio imaginario. -sonreí.

-¿No tienes novio? -pregunto.

-¿Mi novio imaginario no te dice algo? - pregunté molesta.

-Tienes un carácter horrible.

-Bueno tu deberías ver tu cara.- me había hartado de su estúpida conversación. Saqué 20 dólares y los deje sobre la barra. Tomé mi bolso, me pare de mi asiento y comencé a caminar.

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