Darren
Había estado trabajando en el restaurante desde hace un tiempo y no estaba dispuesto a ver como fracasaba.
Atenea había ayudado demasiado con todos los cambios y aunque le había pedido de mil maneras que aceptara los cheques que le ofrecía a cambio del trabajo, se había negado "Es parte del contrato" me había dicho.
Y tenía razón, así que había decidido que si ella no aceptaba mi dinero, tendría que aceptar otra cosa, por supuesto no iba a ver manera de que se negara.
-Aún falta afinar algunas cosas y aún no decides quien va a cortar el listón contigo- me recordó Carol.
A pesar de los problemas que había tenido con ella, había decidido que lo mejor que podía hacer era devolverle su trabajo junto a mi, al fin de cuentas, ella nunca traicionó mi confianza.
-¿Ya le avisaste a mi hermana del evento verdad? -pregunte.
Ambos estabamos en mi oficina arreglando todo para que la noche saliera bien.
-Margori esta más que enterada.
Atenea había decidido que la prensa sería una buena manera de llamar a la gente e incluso propuso que les hiciéramos una cena especial antes de dejar pasar a los comensales.
-¿Y mis padres? -pregunte.
No pude negarme a su idea por lo tanto decidí que los comensales serían familiares y amigos.
-Ambos vendran, tu madre esta más que emocionada- me dijo con una sonrisa.
-¿Y tú estas lista? -pregunte.
-Bueno, reconsiderando que ya no soy tu novia y que Margaret sera el centro de atención después de todo esto. Creo que estoy bien- me sonrió sincera.
-¿Ya sabes con quien vas a venir? - le pregunte evitando su comentario.
-Tenía a alguien en mente, pero no quiero causar un gran desastre así que creo que vendre sola- se encogio de hombros.
-¿Con quien ibas a venir? - le dije interesado.
-Con Russell- respondió apenada.
-¿Estan saliendo? -pregunte asombrado.
-No- se apresuró a decir- Más bien estamos conociendonos.
-Pero ustedes ya se conocen.
-No de la manera correcta. El me conoce como su admiradora loca y yo como el imbécil que rompio mi amistad con Margaret y mi corazón-en sus ojos aún brillaba la ira.
-Invitalo-le dije intentando parecer tranquilo.
Aunque la verdad la idea de convivir con Russell y Margaret en una misma habitación me incomodaba.
-¿Estas seguro? ¿No crees que Margaret vaya a volverse loca?
-No, tranquila. Hablare con ella para que todo marche bien- le dije tranquilo.
Aunque la verdad sabía que Margaret se volvería loca cuando le contara.
-Gracias- dijo emocionada- Voy a ir a llamarle si no te molesta.
-Adelante- ella salió rapido de mi oficina.
Bueno al menos uno de nosotros lograría superar el bache de la locura.
Me levante de mi asiento y decidí volver a casa, aún tenía que hablar con Margaret antes de la "gran noche".
Al salir vi que Carol hablaba por teléfono con una gran sonrisa.
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Nuestro Acuerdo
Fanfiction¿Qué pasa cuando dos personas que ya se conocían se ven obligadas a vivir juntos? ¿Qué los obliga a compartir un hogar? ¿Venganza? ¿Lástima? ¿Amor? Es fácil enamorarse de una persona el problema es ser correspondido.