Maratón 2/3
P.o.v Phoebe
Llegamos al colegio y todo normal, a la hora de salida quedamos de ir a la clínica para hacer la prueba de ADN.
Entramos a la clase de matemática que es la primera que tenemos, la materia se me da pero no es una de mis favoritas, prefiero los libros, en un futuro me gustaría estudiar literatura y poder trabajar en una editorial.
[...]
Es la hora del almuerzo y Am y yo nos volvemos locas, estamos buscando a Ted por todos lados y no lo encontramos.
-¡Derek!- le grita Am
-¿mande pequeña?-responde el saludándonos con un beso en la mejilla a cada una.
-oye... ¿y Ted?- le pregunto yo
-eso mismo les iba a preguntar a ustedes-
¡mierda! Ósea que Ted no vino, nos mintió a Am y a mi para no venir, esta nos las paga.
P.o.v Amber
Ósea que Ted nos mintió, nos dijo que luego vendría para ya no ver, esta me la paga cuando lleguemos al departamento.
Las demás clases pasaron rápido, uf... eso es lo bueno, ya estamos en la última que es inglés, el cual nunca se me a dado muy bien, son un poco complicadas las palabras, pero bueno intento hacer lo mejor.
Suena el timbre y guardamos nuestras cosas, tuve que convencer a Phoebe de que no nos llevará Taylor a la clínica y pues nos llevará Ruby, mi nueva amiga, es muy buena persona, me cayó muy bien, es amable.
Salimos del salón, y nos dirigimos hacia el estacionamiento en donde se encuentra Ruby.
Ella es muy linda esta vestida, con unos Jean negros, que resaltan sus piernas, una linda blusa blanco, trae unos tacones de muerte, son hermosos solo fue un poco altos para mi gusto.
En cuanto nos ve, aparece una sonrisa en su rostro, la cual Phoebe y yo le devolvemos.
-hola nenas, pensé que se habían arrepentido- dice con su típica voz, es cálida como una melodía.
Lo se soy muy cursi.
-no, eso nunca baby- le responde Phoebe, la saludamos con un beso en la mejilla y subimos a su lindo Audi A3 blanco, es un lindo auto.
En el camino vamos hablando de cualquier tontería, riendo como si nunca había reído, me doy cuenta que Ruby es muy interesante y divertida, inspira confianza, que no dude dos veces y le dije que soy adoptada en un principio se sorprendió, pero no dijo nada al respecto.
Llegamos a la clínica en donde haremos las pruebas, bajamos del auto, nos tomamos de los brazos, poniendo los como jareas y metiendo la mano por dentro, así vamos hasta la entrada de la clínica.
Cuando entramos, caminamos a recepción, todas traemos nuestra pruebas en la mano.
-disculpe Señorita- habla Phoebe.
-mande muchachas- le responde en un tono alegre.
-es que queremos hacer unas pruebas de paternidad- digo un poco bajo, haciendo que solo nosotras cuatro escuchemos.
-claro Señoritas, solo llenen estas hojas- nosotras asentimos, cada una tomó una hoja y un bolígrafo y se pone a llenar su hoja.
Son solo los datos, número de teléfono, dirección, nombre.
Terminamos de llenar el formulario y se lo entregamos, ella nos sonríe amablemente diciéndonos que en unos momentos sale el doctor O'Brien, nos otra asentimos y nos sentamos en unas sillas que hay.
A los minutos sale un doctor de unos 50 años, alto, cabello marrón, ojiverde.
-doctor- le habla la recepcionista, el se dirige hacia ella y se ponen a hablar, a los segundos se acerca a nosotras.
-bueno chicas, ¿que ocupáis?- pregunta, Se nota que su acento que nos de por aquí.
-pruebas de paternidad- decimos las tres al mismo tiempo, el asiente y no hace pasar a donde creo que es su consultorio.
Unos minutos después le entregamos las pruebas, y nos toma pruebas a nosotras, las cuales es saliva, todas trajimos cabello, claro en diferentes bolsas.
Salimos del consultorio, el doctor nos manda con la recepcionista, que no era recepcionista, resulta que es su secretaria.
Caminamos hacia donde se encuentra sentada y le hablamos.
-bueno señoritas, podrán recoger la prueba dentro de dos días- dice con una cálida sonrisa.
-gracias- respondemos, estamos a punto de salir de la clínica cuando escucho que alguien nos grita a nuestras espaldas.
-Amber- ¡mierda! Es el tal Alexander, me eh dado cuenta que Ruby también lo odia.
Me volteo, le insisto a las chicas para que me esperen en el auto, pero no, ellas se quedan a mi lado.
-¿si?- hablo fuerte para que me escuche, ya que son como unos 15 pasos los que nos separan.
-es que quería invitarte un helado- dice con tanta naturalidad, veo que las chicas hacen una mueca.
-lo lamento Alexander, tengo novio y es celoso- digo eso, me doy la vuelta y arrastró a las chicas para irnos.
Subimos al auto y me miran con la boca abierta.
-¿porque le dijiste eso?- pregunta Phoebe, unta pues no la entiendo primero dice que lo odia y luego se enoja porque no acepte tomar un helado con el.
-no me agrada- respondo, encogiéndome de hombros, no dándole importancia
-pero tu no tienes no.... ¡espera!¡ya te dijo!- se pone a gritar y aplaudir como niña pequeña, me le quedo viendo extraña, no se a quien se refiere ni que ya me dijo que.
-¿de qué hablas Phoe?- le digo un poco alto para que me escuche.
-no te ha dicho nada- yo niego con la cabeza entonces se calma y se calla.
-¿quien me tiene que decir algo? ¿y que?- le pregunto y veo que su cuerpo se tensa,
-es un secreto- dice haciendo un puchero súper infantil, Ruby solo se va riendo de nosotras.