Dimenson Four

Futuras Reinas

Ya las tres niñas se encontraban en sus habitaciones, Claudia estaba con Melani, para ayudarla con Anabell.

—Este vestido si que es hermoso —gritaba Melani mientras se veía en uno de los espejos de su nuevo closet.

Llevaba puesto un vestido rosado de tul y unos guantes largos y blancos, su cabello estaba suelto y se veía realmente hermosa. Pensó que jamás se había visto tan elegante y hermosa, quizás podría acostumbrarse a eso, a esa vida, a esa ropa, a las cosas nuevas que experimentaría luego de ese día.

—Veo que ya estas lista, que tal si vas a ver a tu hermana

Melani no tenía ganas de hablar con Claudia por eso hizo exactamente lo que le pidió y pasó por el agujero que Melisa hizo poner, se preguntaba que tan bien se vería su hermana, le hacia feliz tener ese gran agujero, sentía que aun estaba cerca de Melisa y no había nada mejor que eso.

—¡Melisa! Mírame, se que es raro verme así pero ¿como me veo?

—Te ves hermosa Melani, eres toda una princesa.

—Tú te ves... ¡Realmente hermosa Melisa!

—¿Tu crees?

Melisa llevaba un vestido muy parecido al de su gemela la única diferencia era su color rojo, su cabello estaba recogido en un muy elegante moño también llevaba los mismos guantes largo y blancos. Se sentía extraña al llevar puesto algo como eso, le gustaba ser humilde y aún no le cabía la idea de ser una reina algún día, era capaz de cuidar a sus hermanas pero como sería capaz de cuidar a tantas personas. Fue obligada a salir de sus pensamientos en cuanto llegó Claudia con Anabell en brazos.

—Anabell te ves hermosa, ven con tu gemela favorita —dijo Melani en lo que Claudia le entrego a la pequeña

Anabell llevaba un muy hermoso vestido azul y unas pequeñas zapatillas blancas que la hacían ver adorable

Intentaban divertirse mientras esperaban la llegaba de Iniart, aun no entendía exactamente lo que sucedía, pero eran jóvenes, les gustaba jugar una con la otra y hacer reír a la mas pequeña de las tres, Anabell siempre seria la consentida y su mayor tesoro. Paso un corto tiempo cuando Iniart entro en la habitación interrumpiendo sus juegos. se veía bastante sencilla a comparación de las niñas, pues llevaba puesta la misma ropa con la que la habían visto desde que la conocieron, se decía que Iniart era diferente para los ojos de todos, jamás nadie lograba ver su verdadera forma, pero en lo que se debía a su ropa ella podía escoger su atuendo siempre.

—¿Ambas están listas para esto? —comento Iniart mientras las observaba muy tristemente.

—Si estamos listas pero explícanos, dijiste eso de ser reinas, te fuiste y queremos respuestas de nuevo.

—Melani cálmate, claro que tendrán sus respuestas, quizás no aun, pero las tendrán, serán reinas de Iniart y aprenderán magia pero eso es todo lo que deben saber en estos momentos, serán presentadas al publico como lo que son de hoy en adelante REINAS, ambas solo deben saludar y sonreír.

—Esta bien Iniart haremos lo que nos pides

—Gracias Melisa, Melani deberías comportarte mejor. Melani sintió el deseo de contestar de inmediato, pero Melisa la detuvo antes de que reaccionara peor—. Síganme —dijo Iniart al notar la tensa situación

Ambas niñas obedecieron sin decir ni una sola palabra, hicieron que Anabell caminara un poco y luego la cargaron, subieron todas hasta el tercer piso o mejor dicho hasta una parte de este, había unas cortinas que no dejaban ver absolutamente nada de lo que se ocultaba tras ellas.

—No se preocupen, las tres están hermosas y la gente las amara tanto como yo desde que las conocí ¿Están listas?

—Listas.

Las cortinas se corrieron y el sol se asomo segando un poco a las tres niñas que apenas podían ver lo que sucedía, millones de personas se podían ver desde el lugar donde estaban, era una especie de balcón parecía antiguo y estaba muy alto, helicópteros las iluminaban y muchos gritos y aplausos se escuchaban. Iniart fue la primera en acercarse más al balcón y saludar a todos. Los gritos estallaron todo el mundo se encontraba en ese lugar. Iniart les pidió que se acercaran a su lado, cosa que las tres hicieron de inmediatamente.

—Mis queridos Irnianos estoy tan contenta de verlos a todos el día de hoy, hace dos largos días para ustedes y solo minutos para mi, le pedí a mi gente que regara rumores sobre mi presencia en este día y a otros sobre lo que haría, al verlos a todos aquí me doy cuenta que mi gente lo hizo muy bien, que me cumplió y logro lo que quería, que era tenerlos a todos en este lugar el día de hoy presenciando mi regreso y el momento del cambio que tendrá Iniart. sin dar mas vueltas al asunto, quiero presentarles a estas tres niñas, tres irnianas preciosas, que no solo son preciosas, serán mas que eso, serán sus futuras reinas y espero respeto para ellas desde hoy hasta el ultimo día de sus vidas, ellas son Melisa Melani y Anabell. —los aplausos comenzaron a sonar por doquier, gritos y miles de flashes de cámaras segando un poco a las tres niñas, era impresionante la cantidad de gente que se encontraba en ese lugar, solo podían saludar con sus brazos bien en altos y intentar sonreír, Anabell era la mas contenta de las tres, desde que la habían presentado no había parado de reír y se notaba a leguas que el publico la amaba—. Gracias por haber asistido a la presentación de sus nuevas reinas, sin nada más que decir nos despedimos. Todas dieron unos paso a tras y vieron las cortinas cerrándose poco a poco, aun podían escuchar a las personas gritar de la emoción desde el otro lado.

—¡Eran muchas personas Iniart!

—Lose Melisa, les pido disculpas a ambas pero si no lo hacíamos de esa forma todas podían haberse asustado y no actuar natural o tan bien como las tres lo hicieron.

—Creo que Anabell fue la que mas lo disfruto

—Es totalmente cierto Melani, Anabell pareció haberse divertido mucho, ya ha pasado lo peor para las tres, ahora les pido que bajen al segundo piso necesito hablar con Claudia sobre algo importante

Claudia que no se había alejado demasiado de ellas se notaba un poco extraña y triste a pesar de que ninguna entendía el por que hicieron exactamente lo que les pidieron y bajaron