Un corazón por sanar

9. Presentándome tu casa.

Joseph's PoV.

Hora: 11:45 a.m., viernes.

Ubicación: Clase de Historia.

Estado: Aburrido.

—....Y así fue como Miguel Ángel creo a su grandiosa escultura, El David —termina de decir el profesor luego de un largo discurso.

Miro alrededor y veo un montón de estudiantes medio dormidos, frunzo el ceño al ver a Emilia y a Emma. Son las únicas dos personas que miran atentamente todo lo que dice el profesor.

—¿Cómo pueden no aburrirse? —pregunta Luke con la mejilla pegada a su mesa, la cual compartimos, viéndolas.

—Ni idea —respondo restregándome los ojos con las manos para mantenerme despierto.

—Estudiantes, tengo un trabajo para ustedes —dice el profesor y bufo, aparte de aburrido no nos deja disfrutar el fin de semana —Lo harán en parejas con la persona que se siente a lado en su pupitre. Pasaré por cada mesa a darles un tema diferente que tendrá que ver con la historia, ¿entendido? —todo el mundo responde que sí.

Espero a que pase por mi lugar a darnos el tema, cuando llega, nos toca el Renacimiento. Termina de repartirlos todos y vuelve al frente para dar más indicaciones.

—Quiero una carpeta con veinticinco hojas, mínimo —todo el mundo se queja —¡Silencio o les pongo más! —se callan al instante—Bien, ese trabajo lo entregaran de aquí a dos semanas, les di temas un poco amplio así que el tiempo para que lo entreguen también lo será, para ser justos. Quiero un trabajo bien hecho, ¿entendido?

Asentimos y continúa con la clase. Cinco minutos antes de que toque el timbre veo a Luke pararse de su asiento e ir al de Emma, dice unas cuantas palabras y hace que se levante también para ir al escritorio del profesor. Hablan durante un rato y vuelven cada uno a su pupitre con una sonrisa, no me da buena espina esto.

Frunzo el ceño a Luke y él sólo aumenta su sonrisa, luego a Emma que está viendo sonriente a su amiga y por ultimo a Emilia, esta también está viendo con el ceño fruncido a Emma y gira para verme, como preguntándome de que va todo esto. Me encojo de hombros y espero que me explique que hizo.

—¿Por qué la sonrisa del Guasón en tu cara? —pregunto.

—Porque conseguí cambiar de pareja para el trabajo y lo haré con Emma.

—¿Qué?

—Lo que oíste, ah, y te tocara hacer el trabajo con Emilia.

—Hemos hecho los trabajos juntos siempre que podemos, ¿y ahora me cambias por Emma?

—Eres jodidamente dramático —rueda los ojos.

—Eso no cambia que seas un traidor —digo entrecerrando los ojos y el vuelve a rodarlos.

—¿Me perdonas si te compro un libro nuevo?—dice haciendo ojitos, le pongo la mano en el rostro empujándole la cara a otro lado y río.

—Vale. Yo solo quería fastidiarte pero ya que insistes...

—Eres idiota, lo sabías ¿cierto? —me dice y río.

—A veces, pero igual me tienes que comprar un libro.

Ríe y se pone a rayar una hoja de su cuaderno hasta que termina la clase. Por suerte es la última hora y cuando toca el timbre de salida siento el deseo de salir bailando por la puerta, pero eso sería suicidio social así que mejor me quedo quieto y guardo mis cosas en mi mochila como alguien normal.

Luke no me espera y sale de la clase con Emma a su lado. Bueno, tiene más excusas para estar al lado de ella, es obvio que no las desperdiciará.