I wanna wake up |cancelada|

Cap 35 Pensar en el futuro

Me desperté para ir al colegio, me vestí, me lavé la cara y me despedí de Iara. Liam pasaba a buscarme desde hacía unas semanas. Apenas estaba logrando acostumbrarme a la rutina. Cuando llegó el recreo fui al baño.

-¿Viniste a taparte las ojeras por estar desvelada cuidando a…? – Era Etel, apenas me había dado cuenta de su presencia.
- No quiero pelear contigo – dije mientras abría la puerta y salía.
- ¿Te crees tan madura?
- Por favor, deja que vuelva al aula.
- Eres una zorra.
- Por favor, Etel.
- Lo único que querías era engatusar a Liam con tu cuento formar una “familia feliz”. 
- ¿Qué? Sabes que no fue así.
- Lo hiciste porque todos sabíamos que era tu novio y no podía desentenderse. Quizá esa bebé ni siquiera es hija suya – continuó haciendo caso omiso a lo que le había dicho – Y Liam es tan estúpido que te cree.
- Etel cállate – dije y abrí la puerta y salí.
- Y además pretendes hacerte la mosquita muerta.
- Te gusta Liam ¿Verdad? – solté.
- ¿Qué? Por Dios. Es solo un estúpido que cree todo lo que le dices… De seguro cuando tu hija sea grande va a ser igual de zorra que tú.

Ni siquiera lo pensé, cuando me dí cuenta ya le había dado una cachetada. Si quería enojarme, acababa de conseguirlo. Realmente no me importaba si decía algo acerca de mí, pero no tenía porque meterse con Iara.

-¡Gómez! – gritó una profesora que al parecer había visto la escena. 
- Mierda –dije para mis adentros.

…

-¿Qué fue lo que pasó Leila? No eres así – dijo la profesora.
- Me sacó de quicio. Disculpe.
- ¿Qué hizo para que reaccionaras así?
- No importa…
- Por favor, dime. No prometo que no vayas a tener un castigo, pero puedo escuchar tus razones.
- Dijo algo de mi hija.
- Pero no debías pegarle.
- Lo sé…Es que…
- No voy a suspenderte, solo trae firmada esta notificación. Haré lo mismo con Etel, no te preocupes… 
- Gracias.
- Me enorgullece saber que defiendes tanto a tu hija.
- No tiene idea de la cantidad de cosas por las que tuve que pasar para tenerla… - Sonó el timbre de vuelta y todos entraron al aula. Volví a mi lugar a sentarme secándome una lágrima que no había notado que descendía por mi mejilla.
- ¿Qué pasó? – dijo Liam.
- Le pegué a Etel…

Luego de que pasaron las últimas horas de clase, llegó la hora de salida. Liam y yo salimos.

-Ahora sí, cuéntame – dijo Liam cuando subí al auto, al parecer no iba a arrancar hasta que le contase.
- Creo que Etel gusta de ti.
- ¿Qué? – Rió - ¿Por eso le pegaste?
- No. Dijo que me embaracé para engatusarte… También que solo querías acostarte conmigo.
- Creo que sabes que no es cierto.
- Lo sé. Pero, eso me dio a entender que le gustas ¿Entiendes?
- No realmente.
- Por eso se enojó cuando se enteró de mi embarazo.
- ¿Eso crees?
- Es la única explicación que encuentro.
- Pero era tu amiga ¿No?
- Uno no elije de quien gustar, aunque eso no me alegra.
- Ahora que lo dices… cuando no estabas aquí, ella intentaba acercarse a mi, pero sinceramente yo no le prestaba atención.
- Por eso se enojó cuando volví.
- Pero sabes que ella no va a importarme.
- Lo sé – dije antes de besarlo - Ah, y dijo algo más…
- ¿Qué?
- Que Iara iba a ser “tan zorra como yo”…
- No eres eso… - me besó el cabello – eres la mejor madre del mundo.
- Pero… piensa… ¿Qué voy a decirle a Iara cuando tenga mi edad? ¿Qué clase de ejemplo voy a ser para ella?
- Fuiste capaz de dar tu vida para salvar la suya, no importa a la edad que la hayas tenido, eso no quita que seas una buena madre…
- ¿Cómo voy a decirle que se cuide cuando yo no lo hice? – Sacudí la cabeza haciendo caso omiso a lo que Liam decía – Si le digo algo así, va a creer que ella es un error, y no quiero que piense eso..
- Hey, Iara aún no tiene un año, no sé porque estás preocupándote por qué harás cuando tenga dieciséis o diecisiete. 
- Es que… quiero ser un buen ejemplo para ella…
- Lo serás… y no le hagas caso a lo que diga Etel ni nadie. 
- Deja de ser tan bueno conmigo – sonreí y me acerqué a besarlo.