El ¿Odioso?... Amigo de mi hermano. (Liam Payne).

XXV (parte I)

Zayn.

"Lo sentimos, el número que usted marcó está apagado o fuera de ser..."

El jodido buzón de voz continúa burlándose de mí después de la doceava llamada que he realizado al celular de cierta rencorosa mujer.

Katherine me estaba ignorando.

Apuesto a que su celular en estos momentos se encuentra en silencio... ésa chica lista no podría permanecer demasiado tiempo bajo el escrutinio de los profesores cuya molestia radica en el uso excesivo de los celulares y el brutal sonido de estos, particularmente el de Kate.

Si ella no está molesta debido a lo que le comenté sobre Perrie el día de ayer, probablemente se molestará cuando se dé cuenta que su buzón de voz está lleno de mí pidiendo de doce diversas maneras que debemos hablar durante el almuerzo; sólo ella y yo, sin más audiencia que pudiese opinar por un asunto que solo nos concierne a nosotros dos.

Mi celular vibra dentro de mi bolsillo indicando un nuevo mensaje de texto; inmediatamente desbloqueo la pantalla, ignorando el ceño fruncido que el Señor Davis me dedica desde su encorvada postura frente al pizarrón. Al vislumbrar la pantalla solo puedo observar un nombre:

'Perrie'.

¿Qué demonios?

No puedo evitar sentirme decepcionado. Sin duda no es el nombre por el que he esperado toda la mañana... ni siquiera me siento con el ánimo necesario para leer lo que sea que la rubia me haya enviado.

Esto es una mierda.

¿En qué momento me convertí en esto?

¿Cómo es posible que una mujer me tenga a sus expensas del modo en que Katherine me tiene?

Es casi enfermiza la forma en que me he comportado ésta mañana; me he limitado a observar frenéticamente la pantalla de mi celular esperanzado a que decida comunicarse de una vez por todas conmigo.

¿Por qué tiene que tomarse todo tan personal?

Sí, le hablé sobre lo que ha estado pasando con Perrie últimamente. Sí, sé que a ella no le agrada Perrie... Sé qué ambas han tenido sus diferencias; pero no es como si me fuera a casar con Perrie.

No iré ahí nuevamente.

Sea lo que sea que creí haber sentido por la rubia está más que enterrado, más allá de lo que el hombre pueda concebir como espacio habitable. No sucederá, ¿cuál es el problema de Kate de todos modos?

¿Ella podría estar celo...?

Ni siquiera completaré esa posibilidad. Kat estando celosa de Perrie es más absurdo que los sentimientos que pude albergar hacia ésta... Ella no podría sentirse celosa de una chica como Perrie, son totalmente distintas, no hay punto de comparación. Jamás podría elegir a Perrie sobre Kate, la sola idea me hace querer golpearme a mí mismo.

Perrie es una chica práctica, sin complicaciones, sin inhibiciones, podría decirse que es como un robot; un robot caliente y pasional –a veces más frío-, carnal incluso.

Katherine... Dios. Ella es todo cuanto podría imaginar. Es divertida de una forma tierna, inocente y a veces un poco retorcida; todo al mismo tiempo. Sus pensamientos pueden pasar desde lo trivial hasta lo más profundo en un minuto, como si estuviese canalizando toda su energía en expresar sentimientos a través de palabras. Es la mujer más exasperante y terca de la Tierra; por consiguiente es argumentativa y a veces un poco caprichosa. Empática, sarcástica... Hay tantos adjetivos que podrían describirla... Hermosa, es tan preciosa por dentro y por fuera de una manera escandalosa, por eso me es difícil aceptar que ella no lo note, usualmente es más perceptiva.