Nothing in my way EN EDICIÓN

Capitulo 28: Atracción

  -Zayn
Volví a tomar mi celular y marqué el número de mi mejor amigo. Pero al tercer tono me atendió el contestador. Fruncí él ceño y volví a marcar, pero ahora me atendía el contestador directamente.
—Que raro —musité y entonces marqué el número de Bella.
—¿Hola? —dijo algo nerviosa.
—Bella, ¿Qué pasó? ¿Dónde estás? —le pregunté.
—¡Zayn, amor! —dijo sorprendida —Estoy en casa, ¿Por qué?
—No, por nada —dije confundido —¿Por qué estás tan nerviosa?
—¿Nerviosa yo? —preguntó y rió —No amor, nada que ver. ¿Cómo estás tú?
—Bien, estaba intentando llamar a Alex pero no me contesta.
—¿A Alex? —preguntó nerviosa de nuevo —¿No te atiende?
—No, no me atiende —le dije —¿Sabes por qué?
—No tengo ni la más mínima idea, amor —respondió rápidamente.
—¿Tú, como estás? —pregunté.
—Yo excelente, perfecta. Pero ahora mamá me esta llamando para ayudarla con unas cosas. ¿Me llamas mañana? —dijo.
—Si, te llamo.
—Está bien, adiós amor.
—Adiós —dije algo confundido aun y corté.
Que extraño... ella nunca es así de cortante por teléfono. Pero bien, no creo que sea nada grave como para estar preocupándome. Me acomodé bien en la cama para dormir de verdad. Volví a sonreír... esa tonta gitana pidiéndome perdón. Es tan tonta. Negué divertido con la cabeza y cerré mis ojos sin poder evitar pensar en sus palabras...
El resto del fin de semana pasó volando, y el maldito lunes llegó otra vez. Isabella había estado demasiado rara el domingo. Y Alex ni les digo.
Me senté al lado de él y lo miré esperando a que dijera algo. Estábamos esperando a que el señor Mayer llegara.
—¿Vas a decirme que demonios te pasa? —le pregunté. Me miró rápidamente.
—¿A mi? —dijo. Entrecerré mis ojos.
—No, a la goma de borrar. Claro que a ti, Pettyfer.
—No me pasa nada, ya te lo dije.
—Pues no te creo.
—Zayn, todos tenemos problemas y mi problema ahora es este mal nacido de Mayer. Quizás estoy así porque no dejo de pensar que ese aprovechador esta coqueteando con mi hermana.
—Yo ya te dije lo que podemos hacer —le recordé.
—Si, pero no sé si sea buena idea.
—Por dios, ¿vas a pensar en el bien de ese abusador? —dije. Él me miró.
—No, estoy pensando en el bien de mi hermana.

Ella tomó mi mano y me arrastró hasta el baño. La miré extrañada y me solté de ella cuando ya estuvimos dentro. Se giró a verme agitada.
—¿Qué sucede, Bella? —le pregunté.
—Yo se que puedo confiar en ti porque eso me has dicho, ¿cierto?
—Claro que si —asentí.
—Bueno, creo que eres a la única que puedo contarle esto. Ni siquiera podría decírselo a Tiffany... no lo se. Últimamente ella anda muy rara y no sé, siento que nuestra amistad cambió mucho.
—Hablando de amistades —la interrumpí antes de que se me olvidara decirle —Las chicas y yo queremos que mañana en la tarde vengas a casa de Becca para la ronda de amigas.
Me miró bien y una leve sonrisa se curvó en sus labios.
—¿De verdad? —preguntó.
—Si —dije asintiendo efusivamente.
—Eso sería estupendo... he echado de menos la ronda de amigas.
—No se hable más. Mañana la tendrás —ambas reímos divertidas —Pero bueno, dime eso tan urgente que me tienes que decir.
—Primero que nada, TN_____, necesito saber si a ti te gusta Alex —dijo con voz preocupada.
—¿Pettyfer? —pregunté.
—Ajá —dijo asintiendo.
—No, ya le he dicho a todo el mundo que lo veo solo como a un amigo —le conté.
—Ay que suerte, eso me saca una parte de la culpa que tengo encima.
Fruncí el ceño al no entender bien de lo que me estaba hablando.
—¿Por qué? —le pregunté.
—El viernes que fuimos a la heladería, tú te fuiste con Zayn y yo me quedé con Alex —asentí para que siguiera hablando —Nos quedamos unos minutos más y después me acompañó hasta mi casa, caminando. En el camino hablamos mucho... cosa que nunca hicimos porque no lo sé. Llegamos a la puerta de mi casa y te juro que no sé como pasó, TN_____.
—Pero ¿Qué pasó? —pregunté demasiado intrigada.
—Nos besamos —susurró las palabras.
—¡¿Qué?! —pregunté sin poder creerlo.
—Baja la voz por dios —suplicó y miró a su alrededor —Quiero morirme, TN_____. Esto es terrible ¿Cómo voy a hacerle una cosa así a Zayn? No tengo perdón... no lo tengo.
'Si supiera que eso no ha sido nada a comparación de lo que él le hizo'
'Tienes razón, _______(2do nombre). No tiene porque sentirse tan culpable'
—Tranquila, Bella. No es la muerte de nadie... fue un simple beso —la calmé.
—Pero ese no es el problema —aseguró.
—¿Y cual es el problema? —pregunté.
—Estoy muy confundida, TN_____. Yo no sabía que amando a una persona se podía sentir atracción por otra.
—¿Me estás queriendo decir que te atrae Alex?
Ella asintió.
—Mucho —musitó.
—¿Y qué vas a hacer? —le pregunté.
—Amo a Zayn —aseguró.
'Pero él no te ama a ti'—dijo _______(2do nombre) en mi cabeza.
'Eso no lo sabes _______(2do nombre)' —le dije.
'Si la amara no le hubiese hecho nada de lo que le hizo'
—Lo amas pero te gusta su mejor amigo —razoné.
—Eso suena tan trágico... soy una basura —su voz sonó temblorosa.
—No, no Bella. No te pongas mal —dije y tomé su mano —Una, creo yo, que no puede manejar sus sentimientos y esas cosas ¿o si?
—No, no podemos manejarlo —susurró.
—Bien, quizás por ahora debas dejar las cosas como están y no decir, ni hacer nada. Yo voy a hablar con Alex.
—¿Qué vas a decirle? —preguntó rápidamente.
—Le voy a preguntar qué pasó, por qué hizo eso...
—Fuimos los dos, TN_____.
—Lo se, lo se. Pero quiero saber sus razones.
—Está bien, creo que es una buena idea —dijo. Sonreí y ella también lo hizo —Eres genial TN_____ y me alegro mucho de haberme mostrado como soy contigo.
—A mí también me alegra que lo hayas hecho —le dije y comenzamos a salir del baño. Aceleramos el paso pues estábamos por llegar tarde a nuestra primera clase del día. Aunque con el profesor Mayer no hay problema —Bella, ¿puedes ir yendo? Tengo que hacer una llamada.
—Claro, te veo en el salón —dijo y corrió por el pasillo.
Solté un suspiro y tomé mi celular. Tenía que llamar Hugh. Hoy no lo había visto muy bien antes de venir. Marqué el número de su celular y esperé a que me atendiera.
—Monstruito, ¿estas bien? —preguntó algo exaltado al atender.
—Estoy bien extraño ¿Por qué? —le dije.
—Oooh, por nada. Solo... nada, nada —dijo nervioso.
—¿Qué está escondiéndome, extraño?
—Nada monstruito, nada...
—Hoy a la mañana estabas muy extraño, extraño.
—De verdad, no es nada.
—Dime la verdad porque te la voy a hacer decirla a la fuerza.
—Está bien... pero no quiero que te alteres.
—Te prometo que no voy a alterarme.
—Bueno, entonces escucha bien lo que voy a decirte. Jordan ha escapado de la cárcel y nadie sabe en donde está.