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22. El Silencio Fuera de Control

Corrí. Corrí tan rápido que mi pelo estaba azotando en mi cara y podía oír el viento en mis oídos.

En este momento, no me importa lo puta que estaba actuando. Quería, no, necesitaba esto.

Cuando me detuve en la Sala Común, me tomé un momento para recuperar el aliento, tratando de calmarme. Pero mi cuerpo ya estaba zumbando con el deseo, de que, si él me recibía... Oh Merlin, yo esperaba que lo hiciera.

Tiene que hacerlo.

Tomando una última oportunidad para sacudir mis manos nerviosas, entonces me dirigí al túnel siniestramente oscuro que daba al dormitorio de los chicos.

Coraje _____... puedes hacer esto.

Sí. Sí, maldita sea.

Llegué al final de las escaleras en silencio, y gracias a los cuatro creadores de Hogwarts por permitir que las niñas si pudieran entrar en los dormitorios de los muchachos. Probablemente fue idea de Slytherin.

Pero tan pronto como ya estaba dentro, rodeada de hombres dormidos, en un espacio oscuro y de forma ovalada, el horror me golpeó.

Tendría que buscarlo.

Todas las cortinas de las camas estaban cerradas.

Poco a poco, conteniendo la respiración, me trasladé a la primera cama, apartando las cortinas. La forma robusta que sólo podía ser Theodore Nott me sorprendió, y rápidamente me aleje.

La segunda cama era Goyle-oh... asqueroso y el tercero era Zabini.

Pero la cuarta cama... esta era más esperanzadora. Sus cortinas de color verde oscuro estaban muy maltratadas, como si las hubieran arrancado muchas veces con furia. Yo sabía quien estaba dentro.

Él era impresionante dormido. Su hermoso rostro, sin ninguno de los duros pliegues cínicos que siempre estaba empeñado en mostrar, como si estuviera acostumbrado a aburrirse, y tenía un brazo echado sobre sus ojos.

Coloque una mano sobre mi estómago que revoloteaba locamente, tome una respiración profunda antes de realizar un encantamiento silenciador alrededor de su cama.

No hay vuelta atrás.

Por favor, por favor, no me rechaces.

Cerré las cortinas detrás de mí y me subí despacio y con cautela, encima de él.

Una parte de mí quería que se despertara de inmediato, para poder haber sabido la respuesta antes, pero otra parte quería que me tomara mi tiempo.

Malfoy no se despertó.

Mi respiración se cortaba mientras me subía a él, temblando locamente. Y entonces lo vi una vez más, en toda su gloria, piel pálida y músculos fuertes... y yo estaba descontrolada.

Sin darme una oportunidad para salir de esto, me sumergí en el hueco de su cuello con mis labios acariciándolo, puse mis manos en su pelo suave como una pluma. se despertó con un ligero sobresalto.

Conteniendo el aliento, me obligué a mantenerme besando su cuello mientras el se movía debajo de mí... y luego se echó a reír, un sonido suave y cansado.

"Pansy." murmuró en voz baja, acariciando mi pelo y me congelé.

Retrocedí rápidamente, sentí que mis peores temores habían sido más que confirmados, y cuando conectaron nuestros ojos, nos congelamos juntos.

Nunca había visto a Malfoy estar tan quieto, parecía tan fuera de su elemento. Completamente sorprendido con la guardia baja, todo lo que podía hacer era exhalar con voz temblorosa.