𝕭𝔯𝔬ӄ𝔢𝔫 𝕺𝔭𝔢𝔫 {𝚍.𝚖}

28. El silencio agonizando

Sus ojos miraban los míos desde hace mucho tiempo, mientras estaba allí, paralizada. No podría moverme... no era capaz de obligar a mi cuerpo a hacer cualquier cosa, para responder de ninguna manera.

No podía ser cierto.

No había manera de que él me amara - mierda, me refiero a que habían sido... ¿qué? Tres semanas? ¿Cómo podría él amarme? Los hombres siempre se supone que deben decir lo a lo último, de todos modos, sobre todo Malfoy. Infiernos, Malfoy no debía decir nada en absoluto.

Pero me di cuenta demasiado tarde... que tomó mi duda como un rechazo.

Se incorporó lentamente, la decepción inconfundiblemente marcada en su rostro, y se revolvió el pelo rebeldemente incómodo.

"Sé lo que estás pensando..., ¿verdad? ¿Qué carajos tengo que decir yo sobre el amor? "

_____... di algo.

"Y confía en mí, yo no lo creía al principio, lo idiota que era , ja, ja ... antidepresivos : La cura para el amor, Sí claro.... "

_____ ...

" Tal vez debería convertirme en un – cual fue la palabra que utilizaste - drogadicto? Sí, tal vez debería. Sacar estos malditos pensamientos de mi cabeza ", y se sento en el borde de la cama, hundiendo la cara en su palmas .

_____!!!

" Yo- " tartamudeé , y la espalda de Draco se puso muy tensa. Pero cuando no pude encontrar el coraje para terminar, suspiró.

"Olvídalo, _____... olvida que incluso lo dije. "

No, Draco -espera.

Dilo en voz alta -no seas un maldito cobarde!

¿Por qué diablos estaba congelada de esta manera? Nunca me congelo. Siempre he tenido un plan B.

Mierda, estaba de pie.

Y, sin embargo, todavía estaba allí, mirándolo como si se estuviera muriendo.

Me miró, y fue un aspecto que con el que no estaba familiarizada. Una mezcla brutal de la ira y la angustia. El sufrimiento y la furia.

"Lo siento ", murmuró, y luego se fue, recogido su ropa.

No, Draco -espera.

La puerta se cerró detrás de él.

Eres un total y absoluto maldito cobarde!

Sólo me tomó unos segundos para estallar en lágrimas, violentas calientes y luego darme la vuelta y gritar mi corazón en la almohada.

Porque estaba empezando a pensar que lo amaba demasiado...

Y él nunca me creerá ahora, aunque yo derramé mi alma en él, lo bese, le acaricie, me case con el... porque había visto incredulidad en mis ojos.

Draco Malfoy había pasado seis años de su vida tratando de romperme, y nunca había tenido éxito.

Sin embargo, yo... Yo lo rompí en doce segundos.

Con un grito de horror y de dolor, me lancé a mis pies, gritando al universo de mierda, y transformándome en mi cuerpo alternativo.

Al mirar hacia abajo a mis cuatro patas, el grueso, pelo enmarañado, mis garras empezando a salir, observándolos desplegarse de mí.

Y entonces hice lo que no había hecho en años.

Me levanté en mis patas traseras, extendí los cuchillos viciosos que eran parte de mí y les arrastre en mi pecho.

El dolor no era nada.

No fue suficiente para cubrir el dolor por el que lo había hecho pasar a el.

Así que lo hice de nuevo.

Y otra vez.

Y otra vez.

Me apuñale, rasguñe y corte hasta que caí al suelo por perdida de sangre, mi cabeza se golpeo duro contra el suelo, puede ver el charco de sangre extendiéndose frente a mi.

No, yo no iba a morir... pero por una fracción de segundo me hubiera gustado.

Yo no valía nada.

Mi forma lobuna pronto descendió de nuevo en mi humana, aunque casi no podía distinguir la diferencia. Y mientras yacía en el suelo, fría, desnuda y sangrando - me cantaba, enviándome al peor sueño que alguna vez tuve en mi vida.

"Who's next? Never you mind, death professor. Electrified-my love is better. It's crystalized. So am I. All could be the diamond fused with who's next..."

Las lágrimas corrían por mi rostro, mezclándose con la sangre. Mi voz era un gemido silencio sepulcral, cante la ultima parte lamentable "la's" y finalmente me deje ir.

Les tomó mucho tiempo para encontrarme. No podía estar segura de cuánto tiempo... horas, días, semanas... ¿quién sabe? Todo lo que recuerdo fue que me levantaron de la calidez de mi propia sangre y se apresuraron a llevarme con Madame Pomfrey.

Recuerdo que miraba los techos altos a medida que pasaban rápido, mi salvador jadeando mientras me entregaban a los cuidadores médicos de Hogwarts que estaba mucho más allá de ser salvada.

Y recuerdo a Madame Pomfrey dice, " Minerva - notifícale al Director. Se trata de un intento de suicidio. "

Lo había sido?

Me había puesto tan loca con la pérdida de un hombre que me había tratado de matar?

No... Porque no era eso en absoluto.

Había estado tan abrumada por su confesión que no me había dado cuenta de que fue lo que realmente hizo que me congelara de esa manera.

No había sido la declaración.

No había sido el sexo.

No había sido nada de lo que había dicho o hecho.

Había sido el tatuaje de una serpiente oscura grabada en su antebrazo, esa cubierta mágica que tenia lentamente se había desvaneció.

Draco -mi - Draco era un Mortífago.

Un hombre que había estado en mi vida sólo unas pocas semanas- había -de alguna manera, con la mirada en sus ojos, tal vez, Se había convertido en mi todo.

Mi amante.

Mi corazón.

Mi alma.

Supongo que lo sabia hace tiempo, sabia que lo amaba, y que el era el único lo suficientemente jodido como para adaptarse a mis bordes dementes.

Y mi único defecto era que lo amaba demasiado.

Demasiado para soportar la idea del Señor Oscuro respirando en su cuello.

Me quería morir antes de ver esa marca de nuevo...