El Hijo de mi Niñera

Tranquilo, no pasará nada que ella no quiera.

|Capítulo 14|

Al abrir la puerta, veo a Luck, sinceramente estoy muy sorprendida, aun no sé el motivo exacto por el que está aquí, pero mi cuerpo empieza a reaccionar de una manera tan nerviosa e inquita, que empiezo respirar muy fuerte. Está vestido con la ropa que fue al colegio por la mañana, al parecer vino desde ahí, y bueno se le ve muy guapo - mierda - está apoyado de los brazos, en la puerta, esperando a que diga algo, pero justamente ese es el problema, no sé qué decirle, si ni siquiera espere su visita. Al ver que yo no me inmuto y mucho menos menciono alguna palabra, a lo que él prefiere empezar.

- Hola Sofía – me saluda con un tono de voz más bajo de lo habitual.

- Hola – respondo de lo más relajada - Luck no sé ...- pauso y nos miramos súper profundo, sus ojos andan un poco acristalados, pero trato de no tomarle mucha importancia a sus gestos - ¿Quieres pasar? – finalmente logro decir ya que supongo que quiere hablar ¿No?

- Sí – me confirma – justo iba a decirte, que ha eso vine – sonríe de lado - a hablar contigo – empieza a mover su pierna de manera inquieta, mientras le hago espacio para que pueda entrar, y así lo hace.

- Siéntate - digo amablemente - luego de sentarme a su lado y quedar en silencio, un tanto incomodo - de la nada aparece Elena y suspiro de alivio ya que me evito estar mucho más incómoda junto a Luck, no sé qué le pasa, si se supone que quiere hablar conmigo, pues que hable, solo esta callado y no logra dirigir su mirada completamente hacia mí.

- Sofía necesito hablar contigo – me dice Elena ¿Hablar conmigo? - solo un momento - me levanto y me acerco a ella - bien tu sabes que no estoy pasando por un buen momento, y te doy gracias por entenderme - asiento - hoy iré a visitar a mi hermana que como sabes está muy enferma – suspira - así que te quedarás con Matías al menos dos días, y te lo digo a ti porque sé que eres más responsable que mi hijo – dice esperando alguna respuesta de mi parte, la verdad es que poco me importa si me quedo con Matías, es casi como quedarme sola.

- Claro – asiento - está bien no hay problemas – digo y ella asiente y se dirige a la puerta para retirarse, así de rápido.

Vuelvo al mueble y me siento junto a Luck otra vez.

- Bien – suelto un suspiro - ahora si podemos hablar – le meto presión para que por fin se digne a soltar alguna palabra, y el asiente.

- Okay – respira profundo y me mira - ¿Sabes? – me pregunta - no entendí lo que me dijiste hoy en el colegio - frunzo el ceño - no quise seguirte porque estabas molesta y preferí darte tu espacio - sonreí inconscientemente, maldita sea mis reacciones. El me mira esperando alguna respuesta por lo que dijo.

- Bueno – pauso y lo miro un poco confundida - yo ... - no sé qué decir no puedo decirle que me gusta, así como si nada, además prácticamente le estaba celando así que no tengo idea de lo que quiere escuchar, es más el es quien tiene que hablar. ¿A eso vino no?

- ¿Y bien? – pregunta Luck, ¿Y bien? ¿Qué?

Regresa el momento incómodo, ya que no tengo que decir y el aún espera mi respuesta, ¿Pero porque la mía? Por cierto ¿Dónde está Matías? No lo veo desde que Luck vino a casa, según él a conversar conmigo, pero anda esperando más a que yo le responda a que el darme alguna explicación de lo que paso.

¿A qué viene esto Sofía?

Es que no lo veo desde que tocaron el timbre

Wow y como si eso fuera mucho tiempo.

- ¿Sofía has visto a mi madre? – oigo decir a lo lejos a Matías, entrando distraído y sin darse cuenta de la presencia de Luck.