Capítulo treintaidos.

2.2K 164 14
                                    

'' Creepypastas ''

Aveces me pregunto...

¿A caso siento algo?
¿Quien soy?
¿Por que estoy viva?

Preguntas que no puedo responder directamente, no se cuando me volví tan débil...

Ah, si, el momento en el que me enamore de él.

En ese momento olvide quien era, mis ambiciones, mi humanidad.

Solo me centre en el, solamente en el, obligándome a amarlo... Pero... Me sentía tan sola...

Sus frios brazos eran tan...cálidos, sus suaves labios eran tan dulces.

Sus ojos estaban perdidos, pero estaban fijos en mi.

El intento matarme una vez, me alejo de mi familia, mato a mi unico amigo, me quito mi humanidad.

¿Que como puedo amarlo? Sencillo, estaba loca.

Loca por él.

Jeff me tenia sobre su espalda, caminaba a pasos lentos mirando al frente, creo que se dirigía a la cabaña.

Acaricie su cabeza y comencé a jugar con su cabello.

-Jeff, ¿Tu me amas?-Pregunte mientras jugaba con su cabello pelinegro.

El rio por debajo.

-Ahora mismo no puedo vivir sin ti. - Dijo en tono bajo.

Suspire, y me recoste de su hombro izquierdo.

-Yo te amo, y daría todo por ti.-Dije en su oido.

Sentí como todo su cuerpo se tensaba.

-Entonces... - Dijo aclarándose la garganta, nervioso. - Conviértete en un creepy pasta. - Nuestras miradas se chocaron.

Por un momento deje de respirar, mi corazón paro de latir...¿A que se refería? ¿Quería...que yo...me convirtiera en un mounstro?

-Tu...¿Quieres que yo...?

-Sí. - Dijo interrumpiendo mi pregunta, adelantándose.

-Pero, ¿Y sí...y que pasara conmigo? - Dije algo asustada por la idea.

-Mientras yo este a tu lado, y sigas siendo mia, no dejaré que nada malo te pase.-Dijo lentamente, su voz estaba rota, por un momento creí que estaba nervioso.

Esas palabras de Jeff bastaron para convencerme, aunque desde un principio, algo en mi me decía que de todos modos haría.

Suspire y me recosté de su hombro.

-Alma, ¿no has pensado en cortar tu cabello? - Dijo Jeff cambiando de tema fugazmente.

Mire mi pelo, estaba suelto, bueno... Estaba quizá un poquito largo, bueno, realmente estaba bastante largo.

Antes estaba por debajo de mi cintura, pero ahora ya estaba casi por mis rodillas.

Crecimiento de cabello, ojos grises y azules, mis ojos cambian de color según lo que siento, eso también es raro...

Mi cabello es gris, y soy tan pálida como una hoja de papel, soy rara.

-Me gusta asi, ¿por que lo dices? - Respondí luego de un largo tiempo en silencio.

-A mi tambien me gusta, pero, un poco mas y ya no puedes caminar con todo ese cabello. - Dijo riendo.

Diablos, no hagas eso, te vez demasiado sexy.

Mordí mi labio inferior.

¿Para que caminar si tengo a un sexy Jeff para llevarme?

-Supongo que mientras me digas sexy no me importa llevarte donde quieras. - Solto una leve carcajada.

Oh, mierda, ¿los creepypastas leen mentes?

-No, solo tenemos oídos, y escuchamos la gente cuando habla. - Dijo tras un suspiro.

¿Qué?

-Estas hablando en voz alta Al. - Dijo soltando una carcajada.

Sentí como la sangre subia a mis mejillas.

Escondi mi cara con el hombro de Jeff.

Jeff me bajo de su espalda y me coloco frente de el.

Me cubrí mi cara con mis manos.
Moria de vergüenza, le dije sexy a Jeff. ¿Que diablos hará ahora?



Un amor entre psicopatas (Jeff The Killer) ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora