Capítulo 3

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-Señorita hemos llegado.- escuche una voz bastante a lo lejos que me hablaba.

Me desperté bastante sobresaltada y me encontré con la azafata del avión, creo que dormí todo el viaje a Inglaterra, tengo el sueño bastante pesado no me culpen.

-Gracias.- respondí asintiendo con la cabeza, me di cuenta que era la única que estaba en el avión.

Tome mi equipaje de mano y baje del avión, había bastante gente en ese aeropuerto para ser tan tarde, revise la hora en mi celular y eran las 7PM.

Tuve que ir adonde se recoge el equipaje y ahí fue cuando me di cuenta que no tenía quien me llevara a casa, o donde sea que tenía que ir ahora.

Salí adonde se pone la gente con esos típicos carteles de bienvenida o con nombres, y busque el mío por algún lado, no perdía nada con intentar.

A lo lejos había un letrero que decía "Welcome Taylor" y lo sostenía un señor de más o menos 30 o 35 años, no creo que más.

Me acerque bastante tímida al hombre el cual me sonrió y saco una fotografía que tenía en el bolsillo.

-¿Eres Taylor?- pregunto con un acento británico bastante marcado mientras me mostraba una fotografía mía.

-Si, soy yo.- le sonreí de vuelta mientras trataba de que el señor entendiera lo mejor mi inglés.

-Bienvenida a Londres, déjame te ayudo.- dijo tomando mi maleta mientras me hacía señas con las manos para que lo siguiera.

El señor que ya no era tan desconocido, se presentó a sí mismo como Charles Ross, el padre de la familia donde supuestamente me tendría que quedar.

El señor Ross me guio hasta un auto bastante lindo, y bastante caro por lo que se veía, y me invito a subirme.

-Estaremos en casa en menos de una hora.- anuncio el hombre mientras salía del aeropuerto.

Genial más de media hora con un desconocido.

-Está bien.- asentí y me gire hacia la ventana para observar Londres.

Era hermoso.

No es mentira cuando muestran que hay de esas casetas de teléfono rojas por todos lados, porque si habían por todos lados.

Iba demasiado embobada para darme cuenta que ya habían detenido el auto frente a una casa bastante lujosa.

-Hemos llegado.- anuncio el Señor Ross.

Baje del auto y me quede parada frente a la gigante casa que tenía a la vista.

-Adelante señorita Smith.- hablo el Señor Ross para darme la bienvenida a su humilde casa.

Sarcasmo please.

La casa era tan preciosa por dentro como lo era por fuera.

-Cariño ya volví.- hablo el Señor Ross.

Una mujer salió de la que yo creo era la cocina, con un vestido precioso, la mujer también era bastante linda.

-Tú debes ser Taylor, eres más linda que en las fotos que nos mandaron.- dijo la señora abrazándome.

-Mucho gusto Señora Ross.- salude educadamente a la mujer.

-Oh por favor llámame Karen, me haces sentir vieja cielo.- dijo la mujer riendo.

Era bastante amigable.

-Bueno como sabrás te mandaron aquí a un tipo de intercambio, por lo tanto deberás empezar con las clases mañana.- hablo el señor Ross.

¿Sólo una fan?-h.sDonde viven las historias. Descúbrelo ahora