Capítulo 30

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Minho

Seguimos al señor hasta el comedor. Nos permiten sentarnos cómo queramos así que me pongo junto a Audrey y Derek. Cenamos más o menos rápido, cuando están trayendo el postre el hombre regresa. Thomas le pregunta algo pero pasa en frente suyo ignorándole por completo.

Cuando terminamos de cenar subo directamente a mi habitación y me tiro en la cama.

Despierto con unos potentes rayos de luz que apuntan hacia mi cara, abro un ojo, no sé quién narices me habrá corrido las persianas pero cómo le pille... Me levanto y miro por la ventana, hay una fuerte diferencia entre cómo daba el sol en el laberinto y cómo lo hace aquí. Compruebo la hora, son las once de la mañana, no me puedo imaginar el calor que debe de hacer a las dos de la tarde.

Doy un pequeño salto al oir que alguien llama a la puerta.

—¿Sí?

—No puedo dormir.

Abro a Audrey.

—Chiquilla, son las once ya, no deberías dormir más.

—Pero... no hay nadie despierto y no quiero estar sola en el salón.

—Pasa, así me enseñas cómo va lo de la tele.

Acabámos tirados en la cama toda la mañana, nos hemos enganchado a una serie y no hemos bajado ni a desayunar, espero que nadie se preocupe. Alrededor de las cinco Audrey se muere de hambre y decidimos salir al salón.

—¿Tendrás algún problema con Aris?

—¿Yo? Qué va. —Se ríe—. Simplemente eres mi amigo, resulta agradable hablar con un tío que no quiere nada contigo.

—Pues sí, no te vayas a enamorar de mí eh.

Suelto una carcajada y Audrey me mira con burla.

—Descuida.

Caminamos por el pasillo, bajamos las escaleras y pillamos algunos bocadillos del comedor. Cuando entramos a la sala común todo el mundo nos mira. Avanzamos hasta dónde están sentados los más conocidos.

—Aris vigila que te roban la novia.

—Qué va a robar Minho con esa cara —bromea Newt

—Sólo somos amigos.

—Eso dijo Lara —dice Thomas, esta le da un golpe en el brazo y le mira  mal. Newt se entristece por un segundo pero cuando Allison le da la mano reaparece su sonrisa habitual.

—Es que para estar aquí sin hacer nada prefería descansar.

—¿Sí? Pues que sepas que te has perdido la gran aparición del "presidente del estado" —anuncia Newt mientras hace unas ridiculas comillas con las manos.

—No jodas, que ha dicho.

—No mucho la verdad. La enfermedad que hay ahí afuera se llama "La llamarada" afecta al cerebro y va por fases. Nos ha explicado que hay gente que es inmune a ella. Nos harán las pruebas de la enfermedad cuando lleguemos. —Asiento.

—¿Algo más?

—Se supone que se originó por el calor extremo o algo así, no me he enterado muy bien pero según lo ha descrito no parece muy agradable. Recemos para que no nos toque a ninguno.

—¿No existe ningún tipo de cura?

—Se me olvidaba, nos ha hablado sobre C.R.U.E.L, nos hemos hecho un poco los locos pero posiblemente ya sepan de nuestra procedencia. No aprueban la empresa pero tampoco la prohíben porque es la que está investigando para hallar una cura.

Resurgense | TMRDonde viven las historias. Descúbrelo ahora