ENTRECRUZADOS [Justin Bieber Y Tú]

Capítulo 14

Capítulo 14: "Príncipe Azul"

Podía estar segura en declararme la persona con menos suerte en todo San Diego. Era probablemente el día más caluroso en lo que iba del verano, y no podría meterme en el mar porque tenía la regla.

La noche anterior, luego de que todos se hubiesen ido a sus respectivas casas después de la cena, mi cuerpo había tenido la ocurrencia de avisarme que este mes tampoco había quedado embarazada.

"Pero claro, Emily... si eres más virgen que el aceite de oliva", había pensado mientras cambiaba mi protector diario y me disponía a tomar unas pastillas para calmar mi insoportable dolor de ovarios.

En ocasiones como aquella, detestaba mi anatomía, detestaba las estúpidas hormonas femeninas, en fin... detestaba a todo el mundo. Enterré mis pies en la arena caliente y me eché hacia atrás en el respaldo de la reposera evitando darle demasiada importancia al asunto.

-No puedo creer que Justin y tú hayan decidido ser amigos de nuevo, si es que eso es siquiera posible.- resopló Kate, y mi atención volvió a centrarse en ella.

-La verdad es que yo tampoco me lo creo.- asentí con la cabeza.-pero, ya ves, tú misma lo has dicho, no hay forma de que eso sea posible.

-¿Por qué no?

Suspiré y, por enésima vez en lo que iba de la temporada, enumeré mentalmente la lista de las razones por las que Justin me caía mal.

-Pues porque somos muy diferentes...-me limité a contestar. Kate frunció el ceño, claramente disconforme ante mi respuesta, y me aclaré la garganta antes de añadir:- lo que sea que le haya sucedido a Justin cuando se fue de Imperial Beach, no fue bueno. Solía ser un chico agradable, ahora es un imbécil.

Mi amiga soltó una carcajada y colocó sus lentes de sol de último modelo por encima de su cabeza.

-A mí no me lo parece.- se encogió de hombros.- de hecho, me resulta una versión más moderna y divertida del viejo Justin.

-Tú sólo lo dices porque siempre intentas verle el lado positivo a la gente, yo no soy así.

-Ahora opinas eso sólo porque estás en tu período.- bufó, y no pude evitar sonrojarme ante el comentario.- pero dale tiempo, ya te acostumbrarás a su nueva personalidad de Casanova y pronto podrás tolerarlo.- hizo un gesto con la mano.

-Cierto.- concluí, con la esperanza de zanjar la conversación para que hablásemos de otra cosa que no fuera Justin o que estuviese relacionada con él. Pero, cómo no, Kate levantó un dedo en el aire, haciéndome callar, y continuó conversando.

-Además,- añadió con las cejas enarcadas.- ayer en tu casa parecías tolerarlo lo suficiente cuando bailaron la canción más cursi del universo... en serio, ¿a qué demonios ha ido eso?

Abrí mucho los ojos.

-¿Qué? ¿Tú nos has visto?- me llevé las manos a la boca en un pésimo intento por ocultar mi sorpresa. No tenía ni idea de que los demás se hubiesen percatado de mi pequeña escenita con Justin. Por un momento, hasta había llegado a creer que él y yo éramos los únicos dos en la sala.