Capitulo 4

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Esa noche Marinette durmió profundamente invadida por hermosos sueños. Sueños bonitos de los que desearia no haberse despedido pero hoy era lunes y ya iba tarde al instituto. Se fue sin desayunar y se marchó corriendo al edificio de su instituto.

Por suerte Marinette llegó antes que la profesora y se sentó en su sitio que estaba al lado de Alya, y delante estaban Adrian y Nino.

Marinette apenas podía concentrarse en clase. Seguía pensando si lo iba a hacer bien en la "cita" con Adrian. Como superheroina que es, y chica corriente, tenía la obligación de centrarse en cada cosa a su debido tiempo pero por alguna extraña razón, pensó en lo de ayer con Catnoir. Se puso un poco nerviosa pero no sabía por qué. Miró un segundo a Adrian y esté le mando un disimulado saludo. Marinette le sonrió. Él le sonrió. Nada podía salir mal. Todo debía ser perfecto.

Después de las clases Marinette se acercó a Adrian preparada para hablar con él y conocerlo mejor.

- Ho... hola Adrian. - genial ya empezó a tartamudear.

- Ah, hola Marinette. ¿Estás lista? - preguntó Adrian.

- Sí. Sí, estoy lista. Listísima. Supermegalista jaja... - rió nerviosamente la chica.

Adrian rió por lo bajo y camino al lado de ella hasta un puesto de helados. Marinette se cogio uno de mitad de fresa y mitad chocolate y Adrian cogio uno de avellanas.

Marinette consiguió encontrar varias cosas en común con él.

A ambos les gustaba el color rojo aunque a Marinette también le encantaba el rosa, les gustaban los hamters... y poco más porque la mayoría de cosas en las que tenían en común eran sobre los superheroes Ladybug y Catnoir. Eso a Marinette no le hizo mucha gracia en realidad, pero le siguió la corriente para no estropear el momento, pero en realidad no era muy difícil , el simple hecho de estar con Adrian era como un sueño, un sueño feliz.

Todo iba como la seda hasta que se encontraron con Chloe y Sabrina. Chloe se acercó demasiado a Marinette y muy enfadada. Aunque claro... ¿Cuándo no está enfadada?

- Hola Adrian. - canturreó Chloe abrazando posesivamente a Adrian.

- Ah... ho... hola Chloe. - el pobre intentaba apartarla pero le estaba siendo imposible.

- ¿Qué haces con... "esa"? - dijo de forma muy desagradable apuntando a Marinette.

- Solo estamos dando un paseo Chloe. - se excusó el chico.

- ¿Estás saliendo con una chica que no soy yo?

- ¡Qué horror! ¡¿Cómo puedes hacerle esto a Chloe!? - dijo Sabrina escandalizada.

- ¡Adrian no ha hecho nada malo Chloe! - exclamó Marinette enfadada.

- Marinette, tranquila no pasa nada. - Adrian miraba a Marinette tristemente y algo avergonzado.

- Sí Marinette, tranquila. ¿No confias tanto en Adrian? - Chloe miró a Marinette de forma maligna al verla acorralada. - Ah... ¿No se lo has dicho?

Marinette se quedó aterrorizada.

- ¿Co... contarme el qué? - Adrian estaba confuso.

- Oh... yo... yo... - Marinette estaba en pánico.

- Bueno te lo diré de todos modos, porque te quiero y no quiero que te equivoces con quien estas. Marinette, Adrian es mi novio y no el tuyo.

- ¿Qué? - preguntó Adrian.

- Adrian yo... - Marinette estaba a punto de saltarle las lágrimas.

- Veras Adrian. - dijo esta vez Sabrina. - A Marinette le gustas.

Las Aventuras De Ladybug Y Catnoir: Una Historia De Amor DiferenteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora