Flechalo, Cupido!!!

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"•"Punto de vista de (tn)"•"
Después de que Mags se sintió mucho mejor regresamos a nuestro dormitorio.
-... Oye... A Erinia no la mandaron nunca a la enfermería...-Comente recordando que ella también había sido herida. No me agradaba la peliblanca, pero, tampoco le deseaba algo malo.
-Seguramente la llevarán a un hospital mágico. No me sorprendería que se fuera a uno muy caro. Así fue una vez antes de que tú llegaras. De la nada se desmayó en clases, a los pocos segundos llamaron a los paramédicos mágicos más costosos para que la tratarán.-Comento Mags para volver a morder una barra de chocolate con caramelo. No sabía que me sorprendía más, el hecho de lo malcriada que debía estar Erinia o la gran cantidad de azúcar que Mags estaba consumiendo el día de hoy...
Al llegar a nuestra habitación ambas nos tiramos sobre el colchón.
-Cambiando de tema... Ya tienes lo que vas a usar para el primer día de la semana cultural???-Me preguntó Mags al acomodarse sus lentes. Negué algo preocupada.
-No te preocupes, el ten es libre. El año pasado te juro que vi a Alfred en pijama de Superman.-Aseguro Mags con una sonrisa divertida en los labios. Fue muy fácil imaginarse a Alfred de esa forma, tal vez siendo regalado por Arthur...
-Y tú ya tienes algo, Mags???-Pregunté esperanzada de que tal vez me sirviera de guía saber de que iría ella.
-Seré un personaje que cree para unos primitos.-Me explico para sacar su teléfono, en el fondo de pantalla estaba una chica con un extravagante parecido a Mags, pero, tenía unos orejitas de oso... Con uñís audífonos negros. Su traje consistía en una playera blanca estilo asiático, unos shorts abombados de color menta, guantes del mismo color que los shorts, un botín largo (hasta la rodilla) estiló converse en la pierna derecha y un botín estiló converse (que le llegaba al tobillo) en la izquierda. Su cara tenía marcadas unas ojeras (tal vez de pintura???).
-... Wow...-Expresé asombrada, Mags me regaló una sonrisa.
-... En la realidad... PandaNita tiene a una compañera de equipo... Se llama (tu nombre de heroína) y bueno... Yo estaba pensando pedirte que hicieras equipó conmigo.-Me comento Mags enseñándome el diseño de una chica (curiosamente parecida a mi) que tenía (inserte aquí la descripción de tu traje). Sonreí fascinada.
-Pero, no tenemos el material!!!-Comente algo alarmada.
-Tú tranquila, yo también. Debemos ir con la costurera de la academia, como cuando necesitamos los trajes de invierno. Ella se encargara de todo.-Me tranquilizo mi pair con una sonrisa divertida y confiada al mismo tiempo.
-Entonces, qué estamos esperando???-Le comente para levantarme de la cama. Al abrir la puerta me detuve literalmente de golpe, pues alguien se había interpuesto en mi camino.
-Ha ha ha, justo a tiempo (tn). Nice!!!-Exclamo Alfred, quién me abrazaba de la cintura atrayendo mi cuerpo a él... Tenerlo tan cerca comenzaba a ser peligroso para mi corazón.
-Caramel!!!-Exclamo Mags para tomar a nuestro familiar en manos. El hámster movió los bigotes de un lado a otro.
-"Hasta cuando piensas soltar a mi ama, Alfred???!!!-Exclamo Mags a modo de traductor. Al escuchar aquello pude escuchar claramente como el corazón del gringo comenzó a latir con fuerza y rapidez. Al igual que el mío.
-Y qué los trae a estos bellos rumbos, chicos???-Pregunto Mags mientras dejaba que Caramel presionara un curita (la bandita adhesiva esa que se pone en las heridas) que tenía en su brazo derecho.
-Yo vine porque necesitaba hablar contigo, little girl.-Comento Alfred al mirarme a los ojos.
-Yo vine a hablar seriamente con la mocosa.-Respondió Arthur para mirar de forma asesina. Al ver aquello, Caramel salto del hombro de la mexicana, se volvió humano en cuanto recitamos el conjuro y salió corriendo llevándonos a Alfred y a mi.
-Suerte, Mags...-Murmuré al ver como mi pair pasaba la saliva nerviosa.