El camino hasta casa, a pesar de estar muy cerca, se les hizo muy largo. Ninguno de los dos era capaz de decir nada, sólo podían intercambiar alguna mirada y apartarla rápidamente.
Cuando Theo aparcó el coche frente a la casa de Stiles, los dos se bajaron y caminaron el uno al lado del otro hasta la puerta. Stiles abrió la puerta y le indicó a Theo que entrara.
Stiles cerró la puerta y suspiró, dirigiéndose a la cocina.
- Hay que comer algo. No suele haber mucha cosa, pero me apañaré. Puedes sentarte en el salón si quieres - Murmuró mientras caminaba -.
- ¿Crees que te voy a dejar cocinar estando así? - Susurró Theo detrás de él -.
- Estás cansado, además, es mi casa.
- Me importa una mierda, tu tienes que descansar.
Tras aquellas palabras, Theo agarró a Stiles, y lo levantó, hasta sentarlo sobre la encimera.
- Yo me encargo de la cena, tu quédate ahí sentado.
- ¿No puedo ir al salón? - Murmuró Stiles -.
- Haz lo que quieras, pero descansa.
- ¿Sabes que no puedo estarme quieto sin hacer nada no? - Masculló observando como Theo abría la nevera y observaba atónito el interior -.
- ¿Que coméis en esta casa? - Preguntó aún mirando el interior de la nevera - ¿Cerveza?
- Eso parece...
- Llamaré a algún lado - Murmuró negando con la cabeza -.
- Será mejor, si.
Tras unos minutos, Theo lanzó su teléfono sobre la encimera y se plantó frente a Stiles.
- Espero que te guste la comida china.
- Esperas bien - Susurró mirándolo -.
- ¿Sabes que hora es? - Preguntó Theo alzando las cejas -.
- Por como me miras, imagino que es la hora del beso ¿Cierto?
- Te equivocas, es la hora de curarte esa herida - Murmuró mirándolo - Pero luego te doy los besos que quieras.
- Sabes que eso no va a pasar - Susurró Stiles -.
- ¿No me vas a dejar besarte?
- No voy a dejar que me cures, puedo hacerlo solo...
Theo negó con la cabeza y bufó con fuerza.
- Stiles, me resulta molesto tratar de ayudarte y que te niegues siempre. ¿Podrías ponerme las cosas un poco más fáciles?
- ¿A que te refieres? - Preguntó Stiles mirándolo a los ojos -.
- A que siempre tienes que decir algo, no puedes simplemente dejar que te ayude, sin negarte a ello.
- ¿Eso hago?
- Siempre. Y me resulta muy molesto. Parece que no confíes en mí.
- Bueno, no eres precisamente el tipo de gente en la que suelo confiar - Murmuró Stiles ladeando la cabeza - Pero confío en ti.
Theo no pudo hacer más que mirarlo mal. Stiles lo miró, aparentando que no ocurría nada, pero al final cedió. Poco a poco, se levantó la camiseta, y miró a un lado.
- Espera hombre, iré a por unas vendas, gasas, yodo, y un poco de esparadrapo - Murmuró Theo bajándole la camiseta con cuidado - ¿Donde lo guardáis?
- ¿Donde lo guardamos? En el baño ¿Dónde lo guardas tú?
Theo trató de aguantar la risa para parecer serio, pero le fue imposible. Pero fue rápidamente a buscarlo todo.
- Ahora es cuando te levantas la camiseta - Murmuró mirándolo -.
Stiles rodó los ojos y poco a poco la levantó. Theo, tras mirarlo, mojó las gasas en agua, y limpió cuidadosamente la herida.
- ¿Te duele? - Preguntó concentrado -.
- No, de momento vas bien. Pero, no te pases echando yodo, ni con el esparadrapo, por que...
Stiles no pudo terminar de hablar. Se quedó perplejo al ver como Theo rompía un trozo de esparadrapo y se lo colocaba en la boca. Lo miró mal al momento.
- Mucho mejor - Murmuró riéndose - Hablas demasiado. Si te curo yo, te curo bien, y si tengo que gastar el rollo de esparadrapo, para que no caiga nada raro en la herida, lo gasto. ¿Entiendes?
Stiles asintió, esperando que Theo le quitara el esparadrapo. Pero no lo hizo.
Cuando terminó de curarlo, lo miró a los ojos y se echó a reír.
- Es increíble que haya tenido que hacer esto para que me dejaras curarte tranquilo. Creo que a partir de ahora llevaré un rollo de estos en el bolsillo siempre.
Cuando Stiles se quitó el esparadrapo para responder a aquello, ya era tarde. Theo caminaba hacia la puerta.
Justo cuando llegó a ella, sonó el timbre. Abrió la puerta, y sacó su cartera del bolsillo. Ya había llegado la cena.
Ambos cenaron hasta que saciaron su hambre. Theo recogió las cosas, esquivando a Stiles, que trataba de hacerlo él.
Cuando terminaron, subieron a la habitación, y Stiles cogió el pijama de la bolsa que Theo había soltado en el suelo.
- ¿Puedes darme el mío? - Preguntó Theo sentándose en el borde de la cama -.
Stiles buscó en la bolsa.
- Aquí no hay otro pijama Theo.
- ¿Me prestas uno?
- Lo haría, pero me has puesto esparadrapo en la boca ¿Recuerdas?
- Tú mismo - Murmuró entre risas quitándose la camiseta - Si tu padre llega por la noche, y me ve medio desnudo, puede que nos pegue un tiro a los dos.
- No haría eso, se quedaría mirando unos segundos, y luego se marcharía.
Theo se levantó y se quitó los zapatos y los pantalones.
- Entonces estamos fuera de peligro.
- Exacto - Respondió Stiles mientras se quitaba la ropa para enfundarse en el pijama -.
Theo se tiró sobre la cama y cerró los ojos. Stiles se tumbó cuidadosamente cuando terminó.
- Es increíble que te hayas dormido ya - Susurró Stiles al ver que Theo ya se había quedado dormido -.
Apagó la luz, y no tardo mucho en caer rendido.
Theo abrió los ojos lentamente, cuando los rayos de sol que entraban por la ventana le daban en la cara. Miró a Stiles, que se encontraba pegado a él, profundamente dormido. Poco a poco se acercó con cuidado, para no despertarlo y dejó un beso en su cuello.
Tras un par de minutos, decidió incorporarse y se frotó los ojos. Seguía muy cansado.
Poco a poco abrió los ojos, y después de dar un gran bostezo, su cuerpo se tensó con fuerza.
Scott estaba en la habitación de Stiles, mirándolo fijamente, y su expresión, era poco agradable.
ESTÁS LEYENDO
A escondidas Parte 1 (Steo).
FanfictionDespués de todos los problemas, Stiles, siente una fuerte atracción por el chico malo. Una situación difícil para todos, ya que Theo, intentó matar a su mejor amigo, Scott.