Completamente Mía

Capítulo 39

Cielo

Después de ese encuentro algo... ¿cómo decirlo, cómico?

Porque lo fue, pareciera que estaba con dos niños. Jamás voy a olvidar ese momento.

Flash-Back.

– No sé cuántas veces tengo que decirlo. ¡Deja de tocarla!

El grito de Nicolas es tan fuerte que hace que me tape los oídos.

– ¡Mira lo que estás haciendo! – dice Dante – ¿ángel estás bien?.

– Si no te preocupes, solo dejen de discutir – digo con una sonrisa.

Nicolas me toma del rostro y hace que lo mire.

– ¿Cariño estás bien?, no fue mi intención – lo dice con una mirada cargada de culpa.

Es tan lindo.

– ¿Pero porque no deja de tocarte? – y ahí se va todo. Dios santo parece un chiquillo.

Siento a Dante a mi lado tomando una de mis manos.

– Ángel, dile que yo también puedo tocarte – dice y se ve a kilómetros que lo hace para exasperar a Nicolas. No puedo creer que se trague el cuento.

Sonrío sin poder evitarlo.

– ¡Mira! Sonríe por mi.

– ¿Qué?, ¡claro que no! Es por mi – y Nicolas me aprieta más contra el.

Pero hay un límite para todo señores.

– Bien ya basta – digo alejándome de los dos.

– ¿A dónde vas? – pregunta Nicolas.

– Necesito alejarme de ustedes dos, me van a volver loca, además se supone que solo caminaríamos un momento. Y los demás me han abandonado.

Busco con la mirada a Carson o Amber pero no las veo, hasta que diviso a Thor y corro hacia él.

– Hola – saludo al llegar – ¿Dónde está Amber?.

– Pues estaba justo aquí comiendo unas nueces.

– Bien, pero ¿a dónde se fue?.

– Nos acercamos a la sombra de un árbol, y una ardilla apareció de repente robandole la bolsa – dice y no puedo evitar soltar una risita.

– ¿En serio?, dime por favor que no fue tras la pobre ardilla.

– Puedes apostar a que si – dice riendo.

– ¿Y los demás? – pregunto ya que no los veo.

– Carson quiso detenerla diciéndole que era absurdo y que dejara a la pobre ardilla vivir feliz con sus nueces. Y Trevor la quiso acompañar, pero solo para burlarse de mi chica – quiere parecer disgustado pero no puede, a él también le hace gracia.

– ¡Maldita ardilla! – escuchamos como se acerca Amber, y detrás los demás.

– Cariño, ¿pudiste atraparla? – le pregunta Thor, pero el mundano quiere reírse.

Amber hace un puchero y pone ojitos tristes.

– No – dice enfurruñada.

– Ya tranquila, te compro otras – le dice conciliador.

Amber sonríe un poco y corre a abrazarlo.

– Cielo, ¿donde está Nicolas y tu amigo? – pregunta Carson, a lo que yo doy un suspiro y apunto hacia la otra calle en donde claramente se les ve discutiendo. Dante riendo y picando a Nicolas, este último no tarda en echarsele encima.