El Puto Amo.

Capítulo 20.

Dean

Suspire. Suspire por que la reacción que tuve agresiva antes Juliette no era buena. Cuando pierdo los papeles me pongo muy agresivo. Yo no me doy cuenta pero los qué están a mi alrededor si. Puedo ver sus caras de miedo y eso me avergüenza. Tendré que contenerme si llega a pasar nuevamente lo mismo. Por Juliette. No quiero que me tenga miedo. Ella no me lo tiene pero puede cansarse de esa actitud mía tan gilipollas que tengo.

Hoy estaba más tranquilo a clase. Y cuando entre.

Miraba con repudio a Claire. Tenía que pasar por su lado para sentarme en mi sitio. Ella puso su pierna para que yo me cayera, y por poco me caigo. Claire toco su pelo negro mirándome de repente. Se disculpó irónicamente pestañeando varias veces y volvía a mirar al frente.

Andando para mi sitio susurré lo zorra qué era. Al parecer ella me oyó.

-Dean recuerda qué naciste mediante una mujer.-

-Te aseguro que no es tan guarra como tú.-Dije alzando mis cejas mirándola, me estaba riendo de ella.-

-Es verdad.-Se silenció por segundos tocando su pelo negro liso, y me miro de repente.- Tu madre lo es más.-

Mi cara se incendiaba de la rabia borrándose la sonrisa de la cara y apretaba mis puños. Que ganas de reventarle esa cara de puta que tiene. Pero no hice otra cosa que volcarle la mesa de un lado. Ella se quedaba quieta en su silla. Como si nada hubiera pasado. Pero los de la clase miraban, atónitos.

-¿Te vas a poner con una mujer? Que poco hombre serias.-

-Tu no eres ni eso, eres tan puta, que hasta James te puso los cuernos.-Se me escapaba diciéndolo rápidamente muy cabreado y reaccioné por segundos, aunque luego viendo su cara, no me arrepentía de hacerlo.-

-¿Perdona?-Levantaba más su mirada a mí sin creerlo.- ¿James a mi siendome infiel?-Aunque su voz era neutral.- Pues si le ves dile que dejo a ese inútil.-

Pero James entraba por la puerta de la clase y se quedaba sorprendido por lo de la mesa.

-Diselo tú misma.-Dije sonriendole irónicamente y me quedaba mirándola. Metía mis manos en los bolsillos del pantalón.-

-¿Que cojones pasa aquí?-Decía James entre abriendo su boca acercándose a nosotros, se colocaba a mi lado.-

-Qué hemos acabado.-Se levantaba de la silla colocándose frente a James.-Tu amiguito del alma se le ha escapado que me hiciste los cuernos.-Me señalaba con los ojos y luego le volvía a mirar.- Hemos terminado-Se lo volvía a repitir, pasaba por delante de él yéndose de clase.-

James dejaba su boca entre abierta. Lucía como un niño inocente esa expresión qué tenía. Al igual que su hermana. Se quedaba pillado. No por mucho tiempo. Cerraba sus labios girándose poco a poco a mí y me miraba sin entender bien su mirada. Tenía que consolarlo.

-Lo siento tío.-Hice una mueca colocando mi mano en su hombro.- Me provocó para hacerlo y se me escapó pero es una puerca, un peso que te has quitado.-Me encogía de hombros dándole una sonrisa e consuelo.-

Aunque él no aceptaba o no se tomó bien mi consolación.

Recibí un puñetazo suyo en toda la cara.

Me tapaba la nariz que era dónde fuertemente me había dado. Aunque no sangré nada. No le iba a pegar. Pero ponía las manos frente suya de manera que parará y andaba hacia atrás.

-Venga James.-Decía mirando como andaba hacía a mí, me entraba las ganas de reírme. Me reía. Miraba a James tan cabreado que no me lo creía.- Somos amigos tío.-