Capítulo 23.

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—Entonces... ¿voy a tener un hermano? —pregunta Jazmyn, terminando de acostarse en medio de sus padres.

La idea de tener un hermano emociona mucho a la pequeña, quien muere de ganas por tener a un pequeño hermano a quien pueda cuidar, enseñarle cosas y defenderlo de cualquier persona que quiera hacerle daño. Porque es para eso que están los hermanos, a pesar de que muchas veces se discute con ellos, son las únicas personas que siempre van a estar cuando más les necesites.

—Sí, tendrás un hermano o hermana —sonríe apenas Justin, sin dejar de preocuparse por el estado, psicólogo, de Stella.

Desde que han llegado al departamento, Stella no ha dicho nada, está encerrada en su propio mundo, mundo al que no le deja entrar ni a Justin ni a Jazmyn. Y eso le preocupa demasiado a Justin, porque él sabe que está mal por todo lo que ha sucedido con su madre, pero aún así ella debe dejar de pensar en eso, tanto por el bien de ella como por el bien de el bebé.

—Mami, ¿estás bien? —pregunta Jazmyn, preocupada, logrando llamar la atención de Stella.

—Sí... Estoy bien —le ofrece una sonrisa fingida a la pequeña, quien no lo nota, pero Justin si lo hace.

—No le hagas caso a la fea de tu mamá —murmura la pequeña, colocando su cabeza en el pecho de su madre—. Papi y yo te queremos mucho a ti y al bebé, así que eso debe de alcanzarte y sobrarte —coloca su mano sobre el vientre de Stella.

Las palabras de Jazmyn hacen entrar en razón a Stella, porque a pesar de que es una niña, tiene razón. Si Stella y el bebé tienen el cariño de Jazmyn y Justin, no necesitan el cariño de nadie más. Si tienes el cariño de las personas más importantes para ti, el resto no importa.

—Te amo —la rubia besa la mejilla de la pequeña—. A ti también te amo —se acerca al oji-miel para poder besar sus labios, un poco en modo de disculpa por como lo ha tratado desde que han llegado.

Justin suspira, tomando la mano de su novia para luego entrelazar sus dedos, sintiendo ese típico cosquilleo que siente cada vez que toca a Stella, es una hermosa sensación que experimenta sólo con ella.


{...}


—¿Qué más nos falta, mi amor? —pregunta Stella, sin dejar de empujar el carro del supermercado.

Justin deja de mirar a Jazmyn para mirar la lista que trae entre sus manos, las cuales están cubiertas por unos guantes de lana negros, ya que a pesar de que la primavera está por llegar, los últimos días de invierno están siendo un total infierno congelado.

—¿Podemos llevar una súper chocotarta? —pregunta la pequeña Jazmyn, formando un tierno puchero con sus labios sólo para poder convencer a sus padres.

—Claro que sí —responde Stella—.Tengo muchísimas ganas de comer algo de chocolate —cierra sus ojos, imaginando el delicioso sabor del chocolate.

Justin ríe y toma la mano de Jazmyn para comenzar a caminar juntos hacia la heladera del supermercado en la cual están guardadas las tartas. Stella aprovecha para tomar su celular del bolsillo de su saco, para poder fijarse la hora y responder un par de mensajes que le han enviado Harry y Louis.

Por otro lado, una hermosa mujer les observa desde lejos, cuidando de que la pareja no note que les está siguiendo, algo que se le ha estado haciendo costumbre desde las últimas semanas. 


Corto, lo sé, pero bue. ¡Espero que les guste! Y también quiero decirles que comenzaré a actualizar más rápido la historia, bueno, lo intentaré, ya saben que todo depende de como esté de imaginación, je. 

Las quiero xx.

Stay with me → j.bDonde viven las historias. Descúbrelo ahora