CAPITULO I - DUELE MUCHO

5.6K 210 18
                                    

¡¡Volvimos!! :D



- Emma despierta – escucho decir a Liam, no me quiero levantar, ¿para qué? otro día en este lugar – ¡Emma, vamos, arriba mujer! – siento que toma mis manos y me jala para que me levante, abro lentamente mis ojos, me pesan – ten tus bolsitas heladas de té, veo que has vuelto a llorar – me reta, lo sé, lo hace cada mañana – quita esa pereza, prometiste que me ayudarías a prepararle algo a mi madre por su cumpleaños – su madre se refiere a mi tía, la dueña de esta casa, es una mujer muy tierna, desde el momento que la conocí, me pregunte como esa mujer puede ser así de sencilla y dulce y mi madre tan fría, son familia ¿no? – ¡arriba mujer, en cinco minutos de quiero lista, ya vuelvo! – lo escucho decir a lo lejos, la puerta se cierra y yo termino de abrir mis ojos por completo, suspiro y coloco cada te en mis ojos, espero que se deshinchen rápido.

Despertarme cada mañana y que casi en todas sea lo mismo, Liam me despierta muchas veces cuando tengo que ayudarlo en la hacienda, con los caballos o las vacas, con las gallinas o los patos o en ir de comprar al mercado, siempre me levanta temprano, aquí se trabaja bastante, todos siempre están en movimiento, todos ocupados en lo de siempre porque cada empleado tiene su oficio.

La casa en donde he vivido en estos cuatro meses es grande. Aquí vivimos la tía Amanda (madre de Liam) es viuda desde hace 6 años y es la dueña de la hacienda, Henry (el hijo menor) tiene 11 años y es muy extrovertido, Liam (el hijo mayor) cumplió hace un mes los 19 años; las cuatro empleadas, Jessica, Julia, Johanna, Juana, cada una tiene un oficio en la casa y son hijas de Don Pedro (el capataz de la hacienda) un señor de más de 50 años, viudo desde hace 5 años, es una de las personas que ha estado desde la creación de la "HACIENDA SOCO".

Esta hacienda tiene historia, lleva 35 años en pie y es una de las más grandes y mejores que existen en California del norte. Cuando le pregunte a Liam sobre por qué SOCO me conto que es la unión del apellido de su abuelo Lucas South con el apellido de Don Pedro Corrin, ellos prácticamente la fundaron.

Así que en total somos nueve personas, casi 10, porque Jessica la hija mayor de Don Pedro está embarazada tiene ya seis meses de embarazo, ella es la que se encarga de cocinar y a veces hacer las compras con Julia, la que se encarga de la limpieza es Johanna y de lavar la ropa es Juana la menor, ella tiene 21 años, es una chica muy simpática y soñadora, es una con las que más hablo, a veces coincidimos cuando voy a lavar la ropa, hablamos por horas, ella siempre me cuenta sus sueños, son grandes. Eso es sin contarles aun de todos los demás trabajadores que hay aquí.

Me levanto rápidamente después de unos minutos, busco algo de ropa y me cambio lo más rápido posible. Para ya cuando estoy en el baño, cepillándome los dientes, escucho a Liam entrar otra vez.

- ¿Ya estas lista Emma? – pregunta, me enjuago la boca rápidamente y salgo del baño, sonríe al verme – así te ves mejor, las bolsitas de té son realmente efectivas – asiento en respuesta – ya no te ves tan fea – le saco la lengua por decir eso, tan temprano y ya está molestando, camino hasta mi mesita de noche y busco un moño, me ato el cabello rápidamente en una cola y lo sigo, porque ya se ha ido de mi habitación, debe ser tarde y esta apurado o nervioso.

Entro a la cocina y casi me caigo al ver tanta gente, todos están aquí, haciendo algo.

- Buenos días dormilona – dice alegremente Henry, me saluda desde el mesón, está amasando junto a Juana quien también me sonríe – ¡Buenos días! – escucho decir a todos

- Buenos días con todos – respondo, busco mi mandil y Liam me coloca el gorro.

- Solo faltabas tú – dice y se aleja

¡LOCO POR TU AMOR, LOCO POR TUS BESOS! ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora