Me remuevo sintiendo mi cuerpo relajado. Mi brazo se aferra a la cintura de mi nena, mientras la atraigo aún más a mi cuerpo. El calor de su cuerpo me lleva a querer quedarme así, junto a ella...
Un momento.
Abro los ojos sobresaltado sintiendo un vacío en mi cuerpo que me hunde literalmente el corazón.
Salgo de la cama como un resorte al comprender que he compartido mi cama temporal con otra mujer. Una mujer a la cual prometí jamás darle cabida en mi vida...
Esto no puede ser cierto...
Yo no pude haber hecho esto...
¡¿Qué mierda hice?! Me gruño internamente, furioso conmigo mismo.
El recuerdo del día de ayer se recrea rápidamente en mi cabeza y no consigo dar en qué momento esto sucedió...
—¿Por qué no vamos al bar del hotel y nos tomamos unas copas? —Sus carnosos y llamativos labios esbozan una media sonrisa.
En sus ojos está ese brillo indiscutible del amor que claramente no es correspondido.
—Anabell, he sido sincero contigo. No te hagas ilusiones porque jamás podría estar con otra mujer. —Puedo ver el dolor que le causan mis palabras.
—No es posible que le guardes luto de por vida a una muerta. —Sus palabras llenas de odio me hacen enfurecer.
—Esa muerta es la mujer que amo y amare hasta que muera. —Asiente conteniendo el aire. Su mirada vuelve a su comida.
Por alguna razón me pregunto: ¿Por qué acepté cenar con ella?
¡Claro que se el motivo!
La jodida educación que me caracteriza.
—Lo entiendo —veo determinación en sus ojos—, me conformaré con ser tu amiga. —La miro con una ceja alzada. Sonríe a medias. —No soy un animal irracional, Christian. Sé entender un "hasta aquí." —Asiento incrédulo.
Aun no entiendo qué hace aquí, o cómo me encontró.
Las palabras de Taylor llegan a mi mente y obviamente caigo en la conclusión de que su padre es el causante de que Anabell se encuentre en este país.
—Lo siento, pero debo preparar unos documentos para mi regreso —digo al paso que saco efectivo de mi cartera—. Fue un placer cenar contigo.
Se pone de pie y se acerca a mí de manera rápida.
—Esto es un adiós —Sus palabras salen de manera apresurada, no reacciono cuando consigue pegar sus labios a los míos, en un beso que me deja aturdido, completamente fuera de lugar para poder reaccionar.
Cuando consigo entender todo, sus labios tienen una sonrisa radiante que me deja descolocado ya que nunca le correspondí el beso.
—No te atrevas a hacer eso nuevamente, de lo contrario se me olvidara que eres mujer —digo para tirar el billete en la mesa y salir de aquel lugar furioso...
Recuerdo claramente que esa fue la última vez que la vi. Taylor me esperó afuera y ambos llegamos al hotel. Observo mi miembro y todo rastro de dudas sobre haber tenido algo se esfuma, al sentir mis partes lisas y levemente pegajosas.
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La Sombra de mi Ángel #1 (Saga Sombras, Grey)
FanficUn amor que ha perdurado intacto por los años. La muerte de la mujer que ama lo ha llevado a un continuo sufrimiento de donde no ha podido escapar. Entre tanto dolor y el regreso de sus sombras, se encuentran dos seres que aun en medio de la tristez...