La Sombra de mi Ángel #1 (Saga Sombras, Grey)

Capítulo 31 || El rostro de la traición

—¿Qué fue todo eso? —pregunto entrando a mi estudio donde esta Taylor junto con Sawyer.

—No he tenido mucho tiempo para investigar, pero lo único cierto es que Ethan Kavanagh murió hace exactamente dieciocho años. —Me sirvo un trago de Whisky.

—El mismo tiempo en que murió mi esposa —musito para luego beber el líquido áspero y caliente de un solo trago.

Giro para verlos a ambos.

—Christian, en aquel tiempo te encerraste con el dolor y no te permitiste investigar las causas reales del accidente...—Tomo asiento ya que mi cuerpo por alguna razón está inestable.

—¿Qué querías que investigara? —pregunto exasperado—. Acababa de perder al amor de mi vida, ¿y tú querías que vistiera mi armadura de FBI con el dolor que me consumía? —Se pone de pie.

—Por lo menos podíamos haber llegado al fondo de todo esto. Aceptaste el mediocre informe policial sin saber si todo lo que estaba ahí era cierto. —Me fulmina con la mirada. —¿Cuál fue el resultado? —Sus palabras están cargadas de reproche.

Inhalo y exhalo tratando de calmar la ira que recorre mi cuerpo.

—Si son conscientes están discutiendo por temas pasados cuando deberían centrarse en lo que tenemos en estos momentos —ambos miramos a Sawyer—. Estoy seguro que Katherine Kavanagh sabe mucho de todo esto. Su actitud y mirada dejaban mucho a entender. —Asiento frustrado. —Necesitamos lo que sabe, estoy segura que es la pieza clave para todo esto. —Ahora son ellos quienes me miran.

—¿Qué? —musito perplejo.

—Estoy seguro que después del tamaño de la declaración que te hizo en nuestras narices, te será muy fácil sacarle información. —Bufo.

Niego con la cabeza, se volvieron locos.

—No hablaré con ella —digo firme—. La simple idea de... —me detengo abruptamente.

—Se razonable —pide Sawyer—. Esa mujer en estos momentos tiene una debilidad y es el supuesto sentimiento que tiene hacia ti. —Parece irreal saberlo, no puedo negar que el sentimiento de culpa está clavado en mí, he olvidado aquellas palabras que ahora vuelven a hacerse presente haciendo que me sienta miserable ante mi hermano. —Su mirada dejaba claro el oído que le tiene a Anastasia y, tu deber de esposo, es descubrir por qué.

Paso mi mano por mi rostro. Nuevamente Kavanagh hace de las suyas, en estos momentos tiene información vital para descubrir toda esta mierda y aunque me asquee la idea de hablar con ella debo hacerlo.

—Está bien —digo frustrado—. Hay una pregunta que me ha estado rondando desde que mi esposa apareció. —Ambos me miran fijamente. —Taylor dijo que el auto de mi esposa había explotado con dos cuerpos dentro. —Sawyer asiente lentamente. —¿De quiénes eran los cuerpos? —Frunce el ceño.

—En el informe que te entregó el oficial aquel día debía estar escrito. —Ahora quien frunce el ceño soy yo.

Me pongo de pie y camino al retrato abstracto que cuelga en la pared que se une con la biblioteca. Lo desmonto dejando a la vista el panel digital de mi caja fuerte, ingreso el código e inmediatamente abre.

Al ver el interior no puedo evitar preguntar porque hay tantos documentos, sin ponerme a meditar los saco todos, los esparzo en mi escritorio bajo la mirada perpleja de Taylor y Sawyer.

—¿Qué es todo eso? —pregunta Taylor.

Me encojo de hombros.

—Por lo que veo son los documentos de la sociedad anónima con Trump, la compra de una de sus empresas y... —Quedo paralizado.