La virtud de la noche

Capítulo 21

- Actúas muy extraño últimamente, desde la fiesta. ¿Qué ocultas? -me pregunta Aby con los ojos entrecerrados y yo me siento acorralada. 

- Bien te lo diré. -le digo suspirando y ella se acomoda para escucharme atentamente. No puedo creer lo que estoy a punto de hacer.- Estoy... Enferma, aún no sé qué enfermedad es pero lo sabré pronto, estuve por el hospital de aquí para allá, no quería preocuparte. -le miento muy descaradamente. No me perdonaré ésto.

- ¿QUÉ? -me pregunta con los ojos abiertos como platos.- Tenías que decírmelo, soy tu mejor amiga Jade -añade con la expresión preocupada.

- Lo sé y lo siento, pero por el momento tendremos que cancelar nuestros planes de ir a la playa. -le respondo decaída, no por el hecho de cancelar esto, sino por el hecho de mentirle. Pero es por su bien.

- Está bien lo entiendo, pero al menos responde mis llamadas -me dice tomando mis manos.

- Hay otra cosa que debo decirte. Estaré fuera por un tiempo, debido a que necesito saber qué es lo que tengo y necesito tratamientos más complejos. -le vuelvo a mentir descaradamente otra vez.

- ¿Tan grave es? -me pregunta y sus ojos se llenan de lágrimas. Cielos, no por favor.

- Aby no lo hagas, estaré bien. Sólo espera a que vuelva ¿de acuerdo? -le digo con voz temblorosa. Y ella asiente muy cabizbaja.

- Te echaré de menos, lindo tomatito -le vuelvo a hablar y la abrazo muy fuerte. Es la primera vez que tengo la iniciativa de abrazarla.

- ¿Por que siento que te despides? -me pregunta con su rostro triste.

- ¿Por que me voy? -le respondo con una pequeña risa y ella pone los ojos en blanco.

- Al menos respondeme de vez en cuando los mensajes -me pide

- Lo haré siempre que pueda pero no te preocupes si no lo hago. -mi voz falla y se torna triste y tengo un nudo en la garganta.

- Adiós -le digo una vez que estamos en la puerta, ella me ofrece una débil sonrisa y sus ojos se llenan de lágrimas nuevamente.

- Cuídate -me dice entonces y subo a mi auto.

Una vez en el, empiezo a llorar, no recuerdo haber sido tan llorona, pero ahora tengo verdaderos motivos para hacerlo. Aún es temprano, tengo tiempo para ir a recoger algunas cosas de mi casa y pasar últimos ratos con Tyler. Mañana pondrá su plan en marcha cuando lo tenga listo, es un momento peligroso y arriesgado, un momento decisivo, no sólo para mí, sino para el mundo entero. Tyler puede ser la salvación de éste mundo lúgubre, lleno de maldad y pecado.

Cuando llego a casa, mis padres no están como siempre. Voy a mi habitación y pongo en un bolso algunas prendas. Cuando termino, dejo una nota a mis padres diciéndoles que estaré unos días fuera. "Planes de vacaciones". De todos modos ellos confían en mi y me dan libertad, esa es la ventaja.
Al menos ellos están a salvo. Y Aby.

Conduzco hacia la casa de Tyler y me pongo a pensar en cuánto amor puede sentir él por mi para arriesgarse de ésta forma, creo que hay otras razones, no puede ser posible que yo sea el único motivo para cometer tal riesgo. Ésta decisión está llena de consecuencias, él necesita un buen plan. Y espero que lo tenga listo.

Ahora ya no toco el timbre, simplemente entro en la casa, y para mi sorpresa, no hay nadie en el salón principal.

- ¿Hola? -digo en voz alta a ver si responde alguien. Un momento después, unos zapatos de tacones empiezan a emitir el típico sonido al caminar, que resuenan en un sutil eco. Kate aparece en el salón principal, con su silueta esbelta, su cabellera larga y negra, vestida en el típico vestido de luto. Me pongo nerviosa al verla pero decido guardar la calma, trago saliva y ella se queda viéndome de una forma aterradora y misteriosa.

- Perdona mi comportamiento en la última vez. -me dice y su voz es sumamente suave pero grave.

- Lo comprendo, descuida. -le respondo nerviosa y se me escapa una risa nerviosa, pero ella siempre se mantiene seria.

- Spencer y yo cuidaremos de ti, mientras el señor Friedrich, no se encuentra. -me habla de nuevo, y yo abro mucho los ojos, confundida. ¿Cómo que ''mientras no se encuentra''? ¿Se refiere a Tyler?

- ¿Perdóname? -le digo entrecerrando mis ojos, y Spencer aparece de la nada a lado de Kate, como por arte de magia, obviamente me llevo el susto de mi vida.

- Tyler tendrá que ir al palacio de Drácula, para encontrarse con el rey Abraham, ahí se encuentra el rey. No podrás ir con Tyler, y por ende nos ha confiado y solicitado que cuidemos de ti. -me responde y yo lo miro aterrada.

- Pero tú me odias, y Kate intenta no comerme -le digo enarcando una ceja. De pronto me arrepiento de mis palabras.

- Todos intentamos no hacerlo. Y no te odio, solo significas un torbellino en mi mundo tranquilo. No sabemos que pasará a partir de mañana, pero estoy seguro de la fuerza de Tyler, es el vampiro más antiguo después del rey. -me explica, y yo dejo escapar un suspiro y no estoy segura si es cansancio, o alivio. Probablemente lo primero.

- ¿Dónde está él ahora? -le pregunto inquieta

-  No ha bebido sangre hace días. -me responde Spencer y yo hago un gesto de asco.

- ¿Caza animales? -le pregunto frunciendo el ceño.

- No. -me responde secamente.- No bebemos sangre de animales. 

- ¿Matan personas? -le pregunto asustada

- Bolsas de sangre, donaciones a hospitales. Tyler fue a traer de esos. -me respondo y suspiro aliviada. De pronto la puerta se abre y por ella, entra Tyler, y una sonrisa se forma en mi rostro al verlo, y el me devuelve el gesto.

- Están en el auto. -le dice Tyler a Spencer, y sale por la puerta, y Kate la sigue, dejándonos a solas.

- Volviste pronto -me dice acercándose a mi. 

- ¿A caso quieres que me vaya y vuelva más tarde? -le pregunto con una sonrisa

- Absolutamente, no -me responde muy serio, y yo dejo escapar una pequeña risa.  

- ¿Tienes un plan? -le pregunto y su rostro cambia y se aparta un poco de mi. 

- No es un plan exactamente.