Mi Nuevo Hermano

capítulo 37: el sobre amarillo

-¿porqué mejor no me dices que nunca te importé?-

-¡porque sería mentirte Darla!- me dijo tratando de que me relajara.

-¿entonces porque ahora quieres que dejemos esto "por la paz"?- dije imitando su tonta voz.

Dilan sólo me miro y suspiro para después de unos segundos soltar

-es complicado Darla...-

-¡es por ese maldito sobre que no me quieres decir que es!- grité sin importar que la gente nos mirara.

Horas antes

Llegué a casa después de la pelea con violeta ya más calmada, las lágrimas habían cesado.

Había apagado el celular para no recibir sus llamadas ni mensajes, me había lastimado y a pesar de ser mi mejor amiga no midió la intensidad de sus palabras.

Abrí la puerta de mi habitación y escuche la melodía de una guitarra.

¡entonces estaba en casa!
¿Porqué no me había buscado?
¡creí que se había ido de viaje o algo así!

Toqué la puerta y la música seso, tardó unos minutos en abrirme y cuando por fin abrió la puerta estaba ahí, su mirada se veía cansada, y su atuendo era desarreglado.

-¿que pasa?-

¿que pasa? ¿que pasa? Me dejas días sin verte y lo primero que me dice es un ¿que pasa?

-¿qué te pasa a ti Dilan?- pregunté cruzandome de brazos.

Observé como sostenía fielmente un sobre amarillo sobre su pecho, lo abrazaba como sí su vida dependiera de ese sobre.

-¿qué es eso?- pregunté tratando de quitárselo, pero él me evadio.

-¡Darla no!- dijo retirando el sobre de mi alcancé.

-¿qué tienes ahí que no quieres mostrarme?-

-¡no te metas en mis asuntos!- me dijo molesto.

-¡Disculpa por preocuparme por ti!- contesté alterada.

-salgamos de aquí, ven te invito un helado- dijo mientras me tomaba del brazo.

Llegamos a la heladería y por alguna razón sentía a Dilan nervioso, no sabía exactamente porqué, pero se le notaba.

Pedí un helado de vainilla, ya que era mi favorito y él pidió uno de fresa.

Nos sentamos en la mesa más alejada de las ventanas, me sentí un poco mal, porque con él a eso me tenía que atener, a estar escondidos y ocultos entre la multitud.

-¿me dirás que sucede?- pregunté antes de dar una lambida a mi helado.

-pues mira... es complicado de decir...- comenzó diciendo- pero me han llegado noticias...-

-¿en el sobre amarillo?- pregunté interrumpiendoló.

-no... bueno sí... bueno ese no es el punto Darla- dijo acomodandose su cabello- pero las noticias que me llegaron son de gran importancia-.

-¿De que se trata?-

-no puedo decirte, pero el punto es... que quiero que dejemos esto por la paz- soltó porfin después de darle tantas vueltas.

Eso no me lo esperaba, obligue a las lágrimas a no asomarse, no quería parecer débil. ¿había hecho mal? ¿que noticias le habrán llegado?

-¿porqué mejor no me dices que nunca te importé?-

-¡porque sería mentirte Darla!- me dijo tratando de que me relajara.

-¿entonces porque ahora quieres que dejemos esto "por la paz"?- dije imitando su tonta voz.

Dilan sólo me miro y suspiro para después de unos segundos soltar

-es complicado Darla...-

-¡es por ese maldito sobre que no me quieres decir que es!- grité sin importar que la gente nos mirara.

- Relájate, por eso mismo te saqué de casa, para evitar esto- dijo tratando de tranquilizarme.

-disculpame por ser una mal educada, tienes razón, debes estar con alguien como Olivia, ella si tenía clase-.

-Darla, entiende, no es por ti es por mí...-

-¡oh claro! Ahora me vas a salir con el choro de no eres tú soy yo ¡Vamos Dilan! te creía con más imaginación...- le dije bajando sólo un poco el nivel de mi voz.

-eres maravillosa, pero la noticia complica las cosas...- me dijo tratando de tomarme de la mano, cosa que yo no le permití.

-dime que es lo que dice en tu dichoso sobre amarillo- dije cruzando los brazos.

-No... no puedo... perdón- contestó agachando la mirada.

-Bien, me voy- dije poniéndome de pié.

-espera, siéntate ¿porqué tenemos que terminal mal el día?- dijo tratando de detenerme.

-ya me rechazaste, ya me dejaste en claro que no confias en mi ¿qué más quieres?-

-que te quedes, aunque no lo creas lo que siento por ti no fue mentira en ninguna forma, pero la situación no permite el poder estar juntos-.

-¿eso fue todo?- le respondí haciendo cara como si no me importará lo que me decía- si eso fue todo, yo me voy. No te molestes en llevarme, la casa esta a dos cuadras-.

Comencé a caminar, pero una fuerza diabólica hizo que me regresara y soltara una cosa más.

-por cierto, gracias por el helado, estaba riquísimo ¿lo quieres probar?-

Y terminando esta frase, le estampé el cono de helado en su cara.
Eso no quitaba el dolor que estaba experimentando, pero bajaba un poco el coraje que sentía.

Salí de la heladería con una ola de inesperados aplausos y sonrisas de las personas ahí presentes.

Yo fui su heroína para ellos, pero su devoción momentánea no curaba el dolor que sentía en mi pecho, me dolía, realmente dolía mucho...

Nota: el sobre amarillo de la discordia

Hola he vuelto *sale de la tierra*

Perdón amores, me cuide vacaciones y regla de mis padres es no celulares ni laptop. Pero ya estoy de regreso y aquí me tienen de vuelta.

¿que creen que tenga ese dichoso sobre?

Los amo y no se Olvídense comentar y votar :3 los adoro y gracias por sus larga espera.