capitulo 57: Visitas incomodas

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Siempre he considerado que el café de los hospitales sabe mejor, no sé qué clase de pacto tendrán los hospitales para lograr que su café tenga este delicioso sabor. Imagino que quizás pactaron con el diablo que a cambio de tener el café más delicioso del mundo les quitaría toda la empatía y el buen humor a las enfermeras.

Realizaba esta teoría en mi mente mientras miraba a la "amigable" enfermera que estaba en la recepción, quitándome las ganas de volverme a enfermar en mi vida con tan solo mirar la cara de odio hacia la humanidad que tiene.

Entonces, dirigiendo mi mirada hacia otro lado, observe como Dilan está saliendo de la habitación de su padre. Tenía cara de confusión ¿Qué te sucede amor mío? Pienso mientras caminaba decidida hacia él.

Pero, justo a unos pasos de llegar a él, una persona se atravesó entre nosotros, y no cualquier persona...

- Dilan, cariño ¿Cómo estás?- dijo Olivia mientras abrazaba a Dilan, quien al mirarme abrió sus ojos en señal de sorpresa.

- Darla...- emitió separándose de Olivia.

Ella, giro lentamente para lanzarme una mirada despectiva, como era de esperarse, para luego voltearse de frente a Dilan, no sin antes mirarme de arriba abajo.

- ¿Cómo esta Leonard, Cariño? Mi padre me dijo que estaba aquí y no dude ni un segundo en venir a acompañarte- pronunció mientras tomaba entre sus manos las manos de Dilan.

Mi sangre se sentía más caliente que el café que sostenía aun en mis manos.

Caminé hacia ellos, poniéndome justo en medio, separando sus manos. Olivia levantó la ceja y yo sin separar mi mirada de la de ella, puse mi café en las manos de Dilan, así estarían ocupadas evitando que esa aprovechada se las volviera a tomar.

- ¿Qué te pasó en la cara? ¿una pelea callejera?- me dijo Olivia con su horrible voz.

- ¿Qué te pasó en la cara? ¿Una mala cirugía o así es tu genética?- respondí tranquila, no quería otra pelea, pero tampoco pretendería dejarme insultar.

- ¡Oh por Dios, Cariño!- Exclamo Olivia mientras le tocaba el pómulo lastimado a Dilan -¿Qué te ha sucedido?-

¡En serio que me saca de quicio! ¿Cómo se atreve a tocar a mi Dilan?

- Quita tus sucias manos de Dilan- dije mirándola furiosa-

- Estas manos ya han estado en más partes de su cuerpo que ni te imaginas, así que ¿Qué más da si lo toco? – respondió mientras sonreía sínicamente – él ya está acostumbrado a estas manos...-

Mis ojos están a punto de salirse. ¡Cuánta osadía en esta niña!

- Dilan, creo que te corresponde decir algo- dije tratando de mantener la cordura.

Dilan nos miró a ambas, y lanzo un bufido, quito las manos de Olivia de su rostro y me devolvió mi café.

- ¿A dónde vas?- pregunte mientras veía como Dilan se retiraba del pasillo.

Comencé a seguirlo y la mustia de Olivia imito mi acción.

- ¡Ya basta chicas!- dijo girándose bruscamente – no es el momento, mi padre está hospitalizado y estamos en un hospital, podrían por favor solo aaagh- dijo mientras manoteaba sin cesar.

- ¿Pasa algo?- dijo mi madre mientras se acercaba por la espalda de Dilan.

- No mamá, no pasa nada, solo que Dilan está abrumado- contesté.

Mi mamá frunció el ceño, y nos miró detenidamente a los 3.

- No tengo el gusto de conocerla señorita...- dijo mi madre a Olivivia.

- Oh lo siento- contestó Olivia mientras estiraba la mano hacia mi madre con un gesto de repugnancia – Olivia, Olivia Hamilton. Usted es la mamá de esta por lo que escuche...-

¿Esta? Dios dame paciencia que si me das fuerza la mato.

- Mamá de DARLA – contesto haciendo énfasis en mi nombre – y esposa de Leonard, padre de Dilan...-

Oh mierda.

Pude ver la cara de Olivia, estas palabras fueron de impacto para su diminuto cerebro, y tardo un momento en procesarlo...

- ¿O sea que ustedes dos son hermanastros?- dijo llevando su mano a su boca.

- ¿Por qué la sorpresa señorita? – dijo mamá cruzando los brazos.

- ¿entonces no lo sabe? – dijo Olivia riéndose, sorprendida aun

- ¿saber qué?- respondió mamá

Mi cuerpo comenzó a sudar frio, son muchas emociones en un mismo día, no podría con tanto, sentía que me iba a desmayar.

- Que Olivia es mi novia – dijo Dilan mientras pasaba su brazo por los hombros de Olivia – ella no conoció a Darla en la mejor situación y no sabía que era mi hermanastra, bueno ya nos vamos adiós-

Mi mandíbula se iba a caer de mi rostro ¿en serio que es peor? ¿Qué mi mamá supiera toda la verdad, o que tuviera que decir que esa era su novia? ¡Yo soy tu chica! YO DILAN, YO.

- Espera aun no término...- se escuchó a Olivia decir mientras Dilan se la llevaba al estacionamiento.

- Que tipa tan desagradable- dijo mamá mientras se daba la vuelta para irse.

¡Maldita, mil veces maldita! Ahora ella lo sabe ¿Será tan cruel como para decirlo?

- Sí...- me respondí yo misma.

Nota: Olivia en galería 

Mi Nuevo HermanoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora