Mi Nuevo Hermano

capítulo 28: la señal del dedo medio

Darla

Llegó una tipeja de cabellera rubia, labios rojos y una sonrisa tan falsa como su nariz operada.

Llegó y se le abrazó a Dilan dándole un beso cerca de los labios, después me dedico una mirada despectiva, mirándome de arriba a abajo.

-y ella ¿quien es querido?- dijo con su estúpida voz chillona.

Dilan apenas iba a abrir la boca cuando lo interrumpí.

- su novia- le contesté regresandole la mirada despectiva.

Ella fruncio el ceño y volvió a mirarme de arriba a abajo, con una cara de desagrado.

-no me habías dicho que ya tenías novia querido- dijo mirando a Dilan-  Olivia Hamilton mucho gusto, ex novia de Dilan-.

Me extendió su mano brindandome una sonrisa falsa.
Yo le extendí mi mano sonriendole, más bien haciendo una mueca.

-Darla, actual novia- le dije mientras le daba la mano.

-¿No posees apellido querida?- dijo sin soltar mi mano.

-no creo que sea de tu interés- respondí soltando su esquelética mano.

-pues entonces pasén, en un momento más estoy con ustedes- dijo pasando de lado, llendo a saludar a otras personas recién llegadas.

Yo giré para ver a Dilan y ahí estaba él, con la boca abierta, gracias a Dios no me había puesto en ridículo negandome enfrente de su ex.

Lo tomé del brazo y entramos a la casa, que era hermosa, extremadamente lujosa y parecía más un edificio que una casa.

Dilan seguía sin emitir palabra alguna, nos paramos y pasó un mesero con copas de champagne, Dilan rápidamente se apoderó de una y la bebió sin piedad.

-tranquilizaté, de haber sabido que te ibas a poner así, no digo nada enfrente de tu amada- le dije gruñiendo.

-no, todo bien, sólo que eso fue intenso...- dijo limpiandose el sudor de la frente.

-¿aún la amas?- le pregunté alzando la ceja.

Él negó con la cabeza y me sonrió de lado.

-¿entonces porque te importa lo que piense esa boba?- le dije cruzando los brazos.

-porque ahora hará de la cena tu peor pesadilla...- dijo con cara de preocupación.

Yo solté una carcajada y giré la cabeza para ver como entraba regalandomé una mirada despectiva.

-que se atreva y entonces me conocera- contesté mirándola fijamente.

Dilan me presentó con varios empresarios amigo de sus padre, afortunadamente ellos no pedían etiqueta de si éramos novios, amigos o hermanos.

Durante toda la fiesta estuve intercambiando miradas llenas de odio con Olivia, y algo me hizo presentir que esto acabaría muy mal.

Comenzó una orquesta a tocar, la verdad que esa música me aburre pero tal parece que a los millonarios es su música preferida, ya que comenzaron a bailar al son de la orquesta.

-¿bailamos hermosa?- me dijo Dilan al oído.

Yo le sonreí y asentí con la cabeza.

Él me llevó al compás de la música, era muy buen bailarín, incluso estaba haciendo que disfrutara de esa música aburrida.

En una vuelta que me dio Dilan, pude ver a Olivia con su cara de niña caprichosa, su mirada denotaba odio, celos y envidia.
Y yo para hacer que eso se incrementara, aún bailando al compás, me acerqué a Dilan y lo besé.