Sean me sonrió, caminando hacia mí.
—¡Hola! Te estaba buscando desde la fiesta, pero no te encontré.
—Soy una persona difícil de encontrar. —Alcé el mentón, pero mi mirada se desvió a los libros entre sus brazos—. Ya acabaron las clases. ¿Irás a estudiar?
—Hay un seminario de recuperación de la primera clase. Me quedé dormido, así que necesito ir. ¿Te vienes? Empieza en cinco minutos.
La primera clase. Justo la que había perdido por culpa de Tyler.
—Sí, claro. Vamos. ¡Adiós, Tyler!
Él me sujetó de la muñeca antes de que me fuera.
—Tenemos que irnos.
—¿Qué? —Lo miré confundida.
—Puedes perderte la clase, vamos.
—No. —Me zafé de su mano—. No quiero perderme la clase.
—Es solo una clase, Levin —intervino Sean.
Tyler lo señaló dando un paso al frente, molesto.
—No confío en ti, así que no me hables.
—No eres nadie para decidir eso.
—¿Qué está pasando acá?
Nick se acercó a nosotros con el ceño fruncido. Paseé la mirada de uno a otro, nerviosa.
—No pasa nada, ya me iba.
—¿Qué haces con mi hermana, Sean? Te dije que no te le acercaras.
—¿Qué? —Lo miré atónita—. ¡No puedes pedirle eso!
—Sí puedo, soy tu hermano. Te estoy cuidando.
—No necesito que me cuides, Nick. Y no necesito que decidas con quién me puedo juntar.
—No lo decido. Estoy...
—Estás prohibiéndole. —Sean se puso a mi lado—. Solo irá a una clase.
—Vant, es mejor que te quedes callado —espetó entre dientes.
—Es hora de irnos. —Tyler se apresuró a sujetar mi brazo al mismo tiempo que Sean sujetaba el otro.
¿Qué es esto? ¿El día de descuartizar a Lydia?
—Suéltala, Levin. Ella no es nada de ti.
—¿Y de ti qué es? Porque no recuerdo que te conozca.
—¡Basta los dos! —Me zafé de ambos, molesta—. En serio no sé qué les pasa. Me voy.
—¿No entrarás al seminario? —Sean frunció el ceño.
—No, quiero estar sola.
—Lydia... —Tyler se adelantó.
Me fui sin mirar atrás. Estaba demasiado molesta para quedarme con ellos. ¿Qué se creían que era? ¿Un paquete sin voz propia? ¿Creen que me pueden sortear a ver con quién paso tiempo?
Doblé por un pasillo, perdiéndome de vista, pero otra persona apareció frente a mí. Me quedé helada. Estaba apoyada en los casilleros, sonriendo como si lo hubiera escuchado todo.
—¿Qué haces aquí? ¿No puedes dejarme en paz?
Morgan se enderezó, rodando los ojos.
—No eres el centro del universo. Solo... Estaba tomando aire.
—Con razón ya huele raro.
Eso hizo que su máscara falsa se fortaleciera.
—He quedado con Tyler.
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Inevitable Destrucción
Teen FictionLydia tiene prohibido causar más problemas, pero cuando el rompecorazones que reina en su nuevo instituto fija su objetivo en ella, todo se complica. Tyler Levin, el chico de ojos cafés y sonrisa encantadora, perfecto para muchas, tiene un error: Cr...