Capítulo 36

6.7K 560 34
                                    

- Bien, vamos allá.

Sanji fue el primero en aparecer tras los arbustos. Tal y cómo esperaban, el puente principal del castillo estaba bajado, así que podrían llegar hasta la puerta principal por su propio pie.

- ¡No voy a esperar a nadie, así que, andando!- gritó mientras encabezaba a un grupo de varios hombres del pueblo que habían decidido unirse a ellos. Nami y Brook también le acompañaban, corriendo muy cerca de él, cada uno a un lado. A lo lejos, comenzaron a vislumbrarse las figuras de dos guardias corpulentos, cada uno a un lado del enorme portón de entrada.

- ¡Déjamelo a mí!- dijo Nami. La navegante unió las piezas de su Sorcery Clima Tact y comenzó a formar nubes de color negro justo por encima de aquellos dos hombres- ¡Thunderbolt Tempo!- gritó la pelirroja lanzando unas dos últimas esferas de color amarillo que, en cuanto se integraron con las nubes, estallaron en dos potentes rayos que dejaron fulminados a los guardias.

Varias exclamaciones se escucharon tras ellos. Los hombres del pueblo no daban crédito a lo que acababan de ver sus ojos, comprendiendo rápidamente que la fama que se había generado la tripulación de los Sombrero de Paja no había sido en vano. Sanji, por su parte, no se lo pensó dos veces y de una patada abrió las puertas de par en par, permitiendo que todos se adentraran en el interior del castillo. El cocinero se paró en la entrada, cuando una enorme explosión se escuchó en el interior del castillo, haciendo temblar sus cimientos.

- ¿¡Qué demonios ha sido eso!?- preguntó Nami alarmada, sosteniendo su Sorcery Clima Tact con ambas manos con fuerza.

- No tengo ni idea- respondió Sanji- Pero tenemos visita.

Varios soldados, provenientes del interior del castillo, corrían hacia ellos empuñando varias armas.

- Hitoyo Giri.

Brook, desapareciendo del lado de Nami y Sanji a gran velocidad, dejó fuera de combate a varios de aquellos soldados con un corte del que ni siquiera pudieron defenderse. Los soldados cayeron al suelo, rodeados de una especie de neblina y, sin mirar atrás, el esqueleto continuó dando estocadas, pues habían recibido instrucciones muy específicas sobre lo que podía esperarles en el interior del castillo y sabían también cómo debían actuar.

Sanji miró hacia atrás.

- Os habéis estado preparando para esto, ¿no?-el cocinero miró con determinación a los pueblerinos que les habían acompañado hasta allí- ¡Pues moved el trasero!

- ¡SÍ!- gritaron todos con entusiasmo mientras pasaban corriendo por el lado del cocinero y comenzaban a golpear al resto de soldados, que no dejaban de aparecer.

- ¡Gust Sword!

Una ráfaga de viento salió de uno de los extremos del Sorcery Clima Tact, atravesando las filas enemigas y acabando con una serie de soldados de un solo golpe.

- ¡Esa es mi Nami-swan!- gritó Sanji entusiasmado al ver a la pelirroja en acción junto al esqueleto.

- ¡Muévete, idiota!- respondió la navegante, fulminando con la mirada al rubio, mientras todavía continuaban rodeándole cientos de corazones. Solo entonces, Sanji siguió las instrucciones de Nami y noqueó a dos soldados que se acercaban por detrás de la chica propinándoles a ambos una patada.

Poco a poco, el número de soldados fue disminuyendo hasta que, finalmente, consiguieron acabar con todos. Nami se apoyó en su arma para tomar aliento, mientras los ciudadanos de Gravos que les habían acompañado celebraban una victoria que a los Sombrero de Paja les parecía inexistente.

- ¡Nami-san! ¡Sanji-san!- Brook llamó la atención de ambos- Hay alguien ahí- el esqueleto señaló hacia el final del pasillo. La figura de un hombre comenzaba a hacerse más grande a medida que se acercaba hasta ellos.

Acero y sal [One Piece. ZoroxReader]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora