Acero y sal [One Piece. ZoroxReader]

Capítulo 5

- Vaya, eres más rápido de lo que pensaba. Esperaba que ese láser pudiera acabar contigo cuanto antes, pero veo que seguirás dándome problemas.

El Gobernador volvió a disparar y Luffy se quedó inmóvil antes de volver a saltar. Si uno de aquellos disparos le daba, le heriría de gravedad.

Luffy volvió a saltar hacia un lado y el láser le pasó cerca del cuello. Apretó los dientes con fuerza, furioso porque aquel hombre no le estaba permitiendo reaccionar. Se había escondido detrás de un montón de espejos que le reflejaban, pero Luffy era incapaz de adivinar dónde se encontraba el original, incluso por unos segundos llegó a dudar de que todo aquello fuera real, de que El Gobernador estuviera verdaderamente ahí, pero si no se deshacía de todos esos espejos, no podría confirmarlo.

Sus ojos se desviaron una fracción de segundo para ver cómo se encontraba _____. Chopper hacía lo que podía, pero tanto él como Nami estaban cubiertos de sangre. El aspecto de la chica resultaba cadavérico, pues su piel, aunque era muy clara, había perdido todo signo de vida y mostraba un tono casi fantasmal.

- ¿¡Dónde está Tora-o!?- preguntó mientras continuaba saltando. Había escuchado a Chopper decir algo sobre una operación y el que tenía mejores conocimientos sobre la materia era Law.

- Se quedó atrás, con Brook y Sanji, nos cubrieron para que nosotros pudiéramos llegar hasta ti. Tiene demasiados hombres- Nami le respondió centrada en su tarea de intentar frenar la hemorragia de _____ sin mucho éxito.

Luffy se puso a un costado, con la respiración entrecortada, agotado por tener que esquivar todos aquellos disparos.

- ¿Te has cansado ya, Mugiwara?- el Gobernador rió y Luffy negó con la cabeza.

- ¡Hone Fuusen!- Luffy mordió su pulgar y sopló, insuflando aire a la herida para hinchar su brazo por completo. Su puño aumentó de tamaño y Luffy lo echó hacia atrás,- ¡Gigant Pistol!

Luffy extendió su brazo hacia delante y, utilizando la fuerza sobrehumana que le otorgaba aquel ataque, el cristal de los espejos se quebró, mandando fragmentos en todas direcciones. Nami gritó e intentó cubrirse de los fragmentos mientras Chopper se colocó sobre el cuerpo de _____, procurando no ejercer presión sobre ella, para protegerla de cualquier trozo que pudiera empeorar aún más su situación.

- ¡Pero es que eres idiota, Luffy! ¡Avísanos antes!- Nami le fulminó con la mirada, pero Luffy emitió una risita triunfante y volvió a encoger el brazo.

La plaza estaba ahora completamente despejada y, sí, sobre una plataforma se encontraba el verdadero Gobernador. Luffy colocó su puño en el suelo.

- ¡Gear Sekando!- a través de sus piernas, Luffy bombeó la sangre necesaria para conseguir que su cuerpo mejorara sus habilidades. El Gobernador saltó de la plataforma, lanzando aquella pistola contra el suelo y desenvainó una espada.

Los movimientos de ambos eran rápidos y precisos, pero Luffy no podía permitir que su cuerpo de goma sufriera ningún corte profundo. No podía permitirse que aquella pelea durara mucho más. Los Gears tenían un tiempo limitado y su cuerpo todavía no se había recuperado de su batalla contra Doflamingo. Se había dado cuenta el día anterior, cuando su cuerpo no soportó una simple pelea que, estando él en plenas facultades, habría finalizado de un solo golpe.

Saltó hacia atrás esquivando una de las estocadas y extendió sus brazos hacia atrás.

- Gomu Gomu no... ¡Bazooka!

Sus brazos impactaron de lleno en el cuerpo del Gobernador, que salió despedido por el aire, chocando con fuerza contra el suelo. Luffy clavó la rodilla en el pavimento al sentir un pinchazo en su estómago y escupió a un lado, dejando en el suelo un pequeño círculo de sangre.