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Martes por la tarde

Narra Steny:

Faltaba poco para las ocho, la verdad es que no tenía ganas de ir y estuve por decirle que no, es más, se lo dije y ella insistió.

Me pareció raro la verdad.

Me preparé poniéndome algo sencillo y cómodo, cargué con mi bolso, cogí las llaves y salí de casa.

Cada vez que me iba acercando a la casa de Milda y Mélica, me daba un escalofrío, en serio, tengo una malísima sensación.

Iba andando tranquilamente, disfrutando del paseo. Pasé por un parque y lo atravesé para llegar a casa de Milda y Mélica, iba andando tranquilamente cuando pasé por el lado de un banco donde habían cinco chicos más o menos de mi edad y empezaron a llamar mi atención, claramente, pasé de largo, pero, pareció ser que no sirvió de nada.

-Ey guapa- me agarró uno de la muñeca.

Me aparté de su agarre.

-¿Tienes miedo?- me dijo alzándome la voz mientras se reía.

Seguí mi camino.

-¿Por qué huyes? Sólo queremos conocerte- escuché de fondo.

Noté que dos personas me estaban persiguiendo.

Los chicos que me perseguían me agarraron de abas manos impiéndome que siguiera mi camino.

-Soltadme- ordené brusca y secamente.

Pareció ser que hicieron oídos sordos y me llevaron ante el banco.
Aún me sujetaban.

Uno de los chicos se levantó y me miró detenidamente con una sonrisa picarona.

-¡Qué bombón me habéis traído!- exclamó impresionado.

Los dos que me sujetaban me soltaron para que después, el chico que se levantó, me observara de arriba abajo mientras daba una vuelta a mi alrededor, hasta que se paró delante mía y me agarró del mentón.

-Me gustas- sonrió.

Puto degenerado.

-¿Que te gusta quién?- oí a mis espaldas.

La voz me resultaba familiar.

-¿¡Hermano!?- dijo el chico que me agarraba del mentón.

Rápidamente me soltó y di dos pasos hacia atrás, me choqué contra alguien.

¿¡Isedo!?

-Nifeo, ¿otra vez?- empezó a regañarle.
-Isedo, no te metas en mis asuntos- dijo mientras volvía hacia mi.

Isedo me agarró del brazo y me puso detrás suya.

-Nifeo, ella no es para ti- frunció el ceño.
-¿Para quién es si no?- se rió.
-Es mi novia, déjala en paz- me cogió de la mano dulcemente y después me la besó, para después sonreirme y guiñarme un ojo.
-¿La conoces? ¿os conocéis?- preguntó confuso mientras nos miraba.

Asentimos con la cabeza.
Nifeo se rió.
Este chico está loco.

-Me da igual si es tu novia- se dio la vuelta- ya sabes lo que pasó la última vez- volvió a reírse y desapareció de allí con los demás chicos.

Suspiré.

-Gracias por salvarme- le agradecí.
-Nada, nada- me sonrió con amargura, pareció ser que lo último que le dijo su hermano le afectó.

Le solté de la mano.
Me miró.

-¿A dónde ibas?- me preguntó llevándose la mano en el bolsillo del pantalón.
-A casa de Milda y Mélica- le contesté- Milda me invitó para ver una película y, como no tenía nada que hacer, acepté- le expliqué.
-Entonces, vamos al mismo sitio- sonrió- a mi también me invitó a su casa.
-A lo mejor nos ha invitado a todos- le sonreí.
-Puede ser- se llevó la mano a la cabeza.

Lo noté un poco nervioso, pero no le hice mucho caso.

Narra Isedo:

El móvil no hacía nada más que vibrarme, sabía perfectamente que era Milda la que me estaba llamando para saber donde estaba.
Creo que su plan no iba a salir como ella había planeado, pues, en un principio, tenía que ser una sorpresa, pero ya que Steny me ha visto, sólo va a causarle decepción hacia mi persona.
Cuando pasé por el parque en dirección a casa de Milda, no contaba con que mi hermano estuviera ahí, cuando lo vi visualizando a una chica, dudé en salvarla, pero al ver que la chica era Steny, fui sin pensármelo dos veces. Le dije que era mi novia para salvarla, la verdad es que no sé por qué le dije aquella escusa tan barata, sabía que a mi hermano le iba a dar igual que fuese mi novia o no, sólo que, si Steny estuviera a mi lado, la dejaría en paz, pero si la ve sola, iría a atacar.

Os preguntaréis ¿qué le hizo a mi ex novia? Simple, cuando la veía sin mi, la conquistaba hasta que esta cayó al bote y se acostó con ella.
Y eso, precisamente, lo hace con todas las chicas que le gusta.

Narra Steny:

Llegamos ante la casa de Milda y Mélica e Isedo llamó a la puerta.

Abrió Milda.

-¡Vaya!- exclamó al vernos juntos- parece ser que os habéis encontrado por el camino- sonrió y miró a Isedo.
-Eso parece- contestó este desviándole la mirada.
-¡Pasad, pasad!- nos dijo- iremos al sótano al ver la película- nos dijo después de entrar al interior de la casa.

Milda se dirigió a la cocina para coger un cuenco de palomitas y después nos guió hacia el sótano, una vez abajo, me espanté.

¿¡Qué ha pasado aquí!?

Vi a Clady atada y con la cabeza hacia abajo en una esquina del sótano, a Melune y a Siul atados en una silla, uno respaldado contra el otro, a Éneon tumbado en el suelo también atado y en una esquina al fondo de la habitación pude ver a Mélica tumbada en un viejo colchón sin ataduras. Ninguno se movía.

Chillé del espanto.

Cerraron la puerta del sótano de un portazo e Isedo me agarró de los brazos.

-¡Bienvenida a mi humilde morada!- me dijo Milda con una sonrisa radiante.
-¿¡Qué le has echo!?- le grité con desesperación.
-Qué chica tan mal educada- se quejó mientras hizo un pucherito.

Mi cara de horror iba aumentando.

-Bienvenida al comienzo de la película- siguió hablando.

¿Cómo que el comienzo de la película?

-Estás de suerte- se rió- tú vas a ser la protagonista- chasqueó los dedos.

Del fondo de la habitación apareció un chico vestido de negro, estaba totalmente camuflado a la oscuridad del sótano.

Vino hacia mi y supe quien era perfectamente.

Dail.

Una de sus manos aportaba una jeringa.

-Muy bien bonita- me dijo Milda cogiendo la jeringa.

Isedo comenzó a atarme las manos con celo gris y me colocó uno en la boca.

-¿Lista para la actuación?- se acercó a mi con la jeringa.

Me movía como podía e Isedo me sujetaba con gran fuerza.

No tenía escapatoria.

-¡MMMMMMMMMMMM!- fue lo único que puede decir.

-Uy, veo que está muy ilusionada- sonrió, pero esta vez, su sonrisa era malvada.

Me inyectó el contenido antes de que reaccionara.

-Buenas noches querida- oí de fondo- aquí comenzó tu película de miedo.

Como una muñeca TRILOGÍA VENGANZA I [Terminada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora